One Shots [Fire Emblem]

Male Byleth

Estar en la Biblioteca real de Askr es algo tedioso, muchos pasillos y no soy bueno oriemtandome con eso de estantes más altos que yo.

—Oye Kiran, ¿puedes ayudarme?—El profesor me señalo algunos libros con la mirada.

—Oh....Claro— Tome los libros y seguí a Byleth— Investigó demasiado de Askr.

—Si, pienso ayudar a este reino pero necesito saber su historia— Dejó los libros en una mesa que estaba cerca. — También deberías estudiar sobre Askr, Kiran.— Byleth tomó los libros que llevaba y me entregó uno de estos.

—Me gustaría, ¿le molesta si me quedo? —

Byleth negó con su cabeza y procedí a sentarme junto a él. Empezamos a leer el libro que me entregó, cosa que no llegaba a entender el me explicaba de una manera tan fácil.

—Usted hace que leer todo esto se vea muy fácil... Ya me dieron ganas de hasta volverme profesora. — sonreí mientras tomaba otro de los libros.

—Es un trabajo complicado, puedes llegar a tener miedo de los propios alumnos, llegas a pensar si de verdad tiene sentido el mostrarles un camino.... Incluso... Una de mis estudiantes tomó muy enserio una de sus ideas... —

Al ver el rostro de Byleth se podía notar como sus ojos mostraban miedo y melancolía, poco a poco se volvieron cristalinos. No quería verlo así, solo deje que mi instinto me llevase, fue ahi cuando descubrí que estaba abrazando a Byleth. Por su reacción supuse que no lo esperaba.

—Usted les muestra el caminó, ellos deben elegir si seguirlo o construir uno por ellos mismos. No se culpe de todo. —Me solté de el abrazo y me coloque de pie. — Imagina si todos siguiéramos un camino... Nunca sabríamos si una cosa esta bien o mal... —

Byleth se mostró sorprendido por mis palabras, se quedó mirando un momento pero después apartó la mirada.

—Gracias Kiran... Ve a descansar, mañana seguiremos con la lectura. — Byleth se despido y salió de la Biblioteca.

[...]

Es de Madrugada, me levante para ir a la cocina por algo de comer. Espero que aún estén dormidos todos, me daría vergüenza si me descubrieran en la cocina comiendo como si mi vida dependiera de ello en ese momento. Llegue a la cocina, busque por las alacenas alguna cosa.

—Vaya, señorita Kiran— Era la voz de Byleth. — ¿Viene por un bocadillo nocturno?.

—Ah... Si... Solo... Vengo por... — miraba rápido los almacenes—... Por... Galletas.— Trataba de ocultar mis nervios.

—¿Galletas?... Vaya, eres de Boca pequeña.... Yo venía por mis cupcakes de chocolate... Me los entregó Dimitri... —Dejó los cupcakes en la mesa. — toma uno, por favor... Dudo poder comer todos.

—¿Esta seguro?—Deje el plato de galletas en la mesa para poder sentarme a su lado.

—Por favor. No me dejes solo comiendo.— Me entregó uno de los pastelitos y le di una mordida, eran muy ricos.

—Quiero confesarte algo Kiran... Desde que llegue aquí, solo tú me ayudaste con las enseñanzas sobre el reino de Askr incluso eres en quien puedo confiar... Y todo eso me encanta de tí. — Byleth se acercaba a mi mientras tomaba mi mano.

—Byleth... ¿que significa esto?— Estaba nerviosa pero confundida por su acción y palabras.

—Significa, que me gustas Kiran—Me tomó del mentón y me besaba de una manera tan tierna.

El beso siguió pues yo lo correspondí al continuar con la acción de dicho profesor. Subí a la mesa logrando sentarme en esta, el beso paso a ser más apasionado y lujurioso, el beso bajo a mi cuello, sentía como lamiá y mordía una parte pequeña de mi cuello, sentía como mi temperatura subía.

—Te haré mía— fue lo que escuche de él. Bajó mi pijama dejando ver mis bragas.

Byleth colocó una de sus manos en mis bragas, poco a poco bajo lentamente a mi clítoris haciendo pequeños círculos en este. Sentía que me volvería loca y solté pequeños gemidos. Mis bragas empezaron a humedecer por mis fluidos. Mordía mi labio inferior pues sentía que gemiria fuerte si Byleth seguía así.

—P-para... Nos descubrirán—Tome la mano de Byleth que estaba en mis bragas y lo aleje un poco. —No quiero que me vean.—

—No nos verán, tranquila y disfruta—Byleth bajó a mis bragas. —Espero que no te moleste que juegue un momento.

—¿Jugar? —Dije confundida mientras veía como Byleth quitaba mis bragas.

Cuando mi entrada quedó a su vista empezó a lamer mientras dejaba pequeños besos, juro que podía hasta sentir su respiración. Byleth abrió más mis piernas y metió su lengua dentro de mi. Se me escapo un gemido pero cubrir mi boca rápidamente. El profesor aún seguía hasta que considero que ya estaba preparada.

Byleth bajo su pijama dejando ver su miembro erecto, de este salía líquido pre seminal, se veía tan delicioso como salía poco a poco. Byleth se acercó más a mi dándome un beso mientras penetraba poco a poco.

No sentía dolor, era más como un pequeño ardor al principio hasta que llegó más profundo fue un dolor algo tolerable. Se quedó inmóvil un momento en lo que mi intimidad se ajustaba a su miembro. El beso continuaba, una de sus manos se unía con la mía mientras que la otra me sujetaba de la cintura.

Comenzó a moverse lentamente y con mucho cuidado, yo sentía tanta lujuria que empece a besarlo más apasionadamente mientras con una de mis manos le tomaba del hombro. Me encantaba la sensación que me daba cuando me penetraba, quería sentir más de esa sensación.

—M-más— Dije cerca de su boca mientras el sacaba su miembro de mí.

—Lo que diga la gran invocadora.... Colocate a 4...— Byleth me ayudó a ponerme de pie.

Me coloque como me lo indicó y volvió a meterla, sentía como mis paredes se expandían más por culpa del miembro de Byleth, me volvía loca de solo sentir como entraba en mi.

Primero era suave, pero comenzo a moverse más profundo y lento, lograba sentir como topaba con mi cérvix. Quise alejarlo de mi con una de mis manos pero el tomó ambas y las colocó en mi espalda. Sus embestidas fueron más profundas y rápidas, yo estaba aguantando los gemidos pero no logre contenerme y gemí, Byleth me dio una nalgada con una de sus manos, logró excitarme más.

—Eres muy desobediente Kiran... Te dije que no gimieras— me volvió a dar una nalgada.

—Lo siento profesor—Estaba tan excitada.— Por favor, Castigueme— lo había dicho con un tono sensual.

—Lo tendrás—

Byleth empezó a hacerlo más fuerte logrando que mi cuerpo temblará levemente de tanta excitación. Poco a poco empece a sentir como el miembro de Byleth se ponía más duro dentro de mi.

—Kiran, me voy a venir...—Byleth estiró de mi haciendo que mi cuerpo se pegara más al suyo.

En la última embestida sentía como algo me llenaba y topaba en mi cérvix, estaba caliente pero no me molestaba en absoluto. Por alguna razón, me resultaba muy excitante.

—¿Quieres que te lleve a tu habitación? —Byleth me ayudaba a ponerme la ropa de nuevo.

—Si... No quiero caer por las escaleras.— Me apoye de él para colocarme de pie.

—Como usted lo ordené... Querida.

Byleth me ayudó a subir a mi habitación, le pedí que durmiera a mi lado y no se negó. Puedo jurar que ya casi amanece.

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