— ¡Cachorro tonto!
— ¡Alfa estúpido!
Arthit y Ae dieron varias vueltas por la alfombra haciendo que sus aspectos se vean más desalineados luego de muchos manotazos y pequeños golpes entre risas. Arthit considera injusto que Ae sea más fuerte, pero de cualquier modo están a mano puesto que el último está débil debido a los cambios en su cuerpo.
Se separan de su guerra entre risa con Arthit rindiéndose y Ae con una gran sonrisa debido a su lobo competitivo feliz de ganar en cualquier actividad.
Nadie esperaba que Ae fuera un alfa, ni siquiera el mismo. Todos creían que sería un beta. El momento de presentación fue una gran noticia en toda la familia. Para Ae sólo fue una pésima semana llena de dolores, sensibilidad y soportar sentimientos impropios pues les pertenecen a su recién despierto lobo.
Los golpes en la puerta los hacen salir de su burbuja y por ella se asoma una cabellera azabache que al ver a ambos amigos tan juntos entrecierra sus ojos, más no dice nada y se acerca a su chico, tomándolo de la mano.
— Phi's, mamá dice que es hora de cantar cumpleaños — explica y luego le hace ojitos al castaño— Te guardé un lugar a mi lado.
Ae rueda los ojos ante la escena de su hermanito con una pequeña sonrisa burlesca. Más sus sentimientos con los de su lobo se mezclan y no sabe muy bien cómo reaccionar. A este no le agrada lo cercanos que son su hermano con su amigo, al ser un alfa primerizo es muy posesivo, sobretodo con su familia. A Ae no le gusta eso, es insoportable. Casi tanto como los dolores musculares y los aromas sofocantes.
Van a la sala donde sus padres lo regañan un poco por encerrarse en su pieza en lugar de convivir con todos, pero bueno, no es como si jugar con su mejor amigo sea mejor que convivir con personas de cuarenta años, claro que no.
Las luces se apagan y los cantos comienzan felicitando al pequeño Ae por cumplir trece años siendo un lindo alfa.
— Pide un deseo.
— ¡Desea algo para tu hermano menor!
Todos ríen y el cumpleañero sopla la vela. Aplausos, felicitaciones y peticiones de que meta su bello rostro en el pastel de cumpleaños a lo que se niega rotundamente retrocediendo avergonzado de tanta atención.
— ¡Ae! — exclama Arthit a su lado y cuando le mira este le ha embarrado un cupcake azul en todo el rostro causando a todo el mundo risas.
— Ah, por eso me gusta tanto — añade Kongpob.
Arthit trata de contenerse pero las pestañas de Ae repletas de crema son demasiado para él. Ae entre quejas toma un pastelito rojo y también se lo embarra.
— ¡Hey!
— Vayan a lavarse las caras — Pide May antes de que se les ocurra meter el pastel caro que compró en todo esto — Y Kongpob baja ese cuchillo plástico que tu hermano sólo ensució a Thit nada más.
— ¡Es una declaración de guerra!
Arthit se sienta en la taza del WC mientras Ae refriega su cara frente al lavamanos.
— ¿Qué deseaste?
— No haberme presentado — responde al su olfato estar sensible por el intenso aroma que siente debido a la crema en su cara. No quiere volver a saber sobre dulces en su vida.
Arthit asiente comprensivo. Él no se ha presentado más los diagnósticos que le han dado sus compañeros que sí apuntan a que no es bonito. El primer celo no es para nada placentero, los cambios en tu cuerpo no son cómodos y tener a tu lobo despierto no es tan cool. Independiente de si te presentas como alfa u omega. Aún así no puede evitar sentir curiosidad.
— ¿Cómo te sientes?
— Como si quisiera echarme en el suelo a descansar. No lo sé, es raro.
— ¿Deseas un hueso? — bromea Arthit acercándose a su mejor amigo, provocándole una sonrisa y que su lobo esté alerta — ¿Qué te dice tu lobo?
— Está al pendiente de ti. Creo que piensa que me atacaras o...
— ¿O...?.
— Que me besaras — responde con el ceño fruncido haciendo que Arthit parta en risas— ¡Ya! ¡Tú preguntaste!
Las mejillas de Arthit se ponen rojas a pesar de estar riendo y hasta sosteniendo su estómago por sobre su sweater rosado. Ae se siente avergonzado y su lobo baja la cola. Ahora desea golpearlo más sabe que su amigo está bromeando.
— Tu lobo alfa es muy tontito — responde secándose la lágrima que se escapó de sus ojos.
— Mi mejor amigo también.
— ¡Oye! Mejor vayamos a abrir tus regalos.
Salen del baño en dirección a la habitación de Ae más en el camino pasan junto a la habitación de los padres de este alcanzando a escuchar como viejas chismosas que hablan sobre él y su hermano.
— Ae será un buen alfa, ya se ve buen mozo junto a ese niñito castaño — dice una de las hermanas de May, es decir, su tía.
Ambos se miran con cara de disgusto. Ew. El lobo de Ae en cambio alza ambas orejas.
— No, Khaofang. Al que le gusta Arthit es Kongpob — aclara su madre.
— Pero ese chico se ve a leguas que será un omega. Y el alfa de esta familia es Ae, ya sabes lo que dicen...
— Hay casos que no es así. Además no puedo llegar y decirle a Kong que él no será alfa ya que entre hermanos sólo hay uno. Él está muy ilusionado.
Ambos se alejan de la puerta confundidos. Uno más que él otro. A Arthit esa conversación le deja un mal gusto en la boca. No la entiende del todo y le quedan muchos espacios en blanco. En el caso de Ae, siente tristeza por su hermano, pues ya había escuchado algo parecido más no sabía si era cierto.
— Phi's, mamá me mandó a que les trajera comida — aparece el menor de nueve años con una bandeja. Al darse cuenta que estos están junto a la habitación donde sabe está su madre se rectifica — Digo, papá me envió.
Arthit ríe olvidándose del tema y desviando toda su atención a su menor. Más en la cabeza de Ae aún ronda una pregunta.
¿Quién le dirá a Kongpob qué no puede ser alfa debido a que él ya lo es?
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My little Alpha [KongpobxArthit]
WerewolfY es que cuando le preguntaron al pequeño Kongpob que quería ser cuando sea grande, él respondió "El alfa de Arthit Rojnapat". Suthiluck desde pequeño entiende que en la sociedad hay grandes personas de apariencia intimidante y un fuerte olor que ex...