Planificación

154 17 1
                                    

-No.- Fríamente respondió.

Todos se giraron a verlo, aunque estaba claro, él sería el único quien lo negaría.

-No seas aguafiestas Will, tal vez hasta nosotros podamos divertirnos un rato.. ¿No te parece?- Grell sonrió

William volteó hacia el otro lado tratando de evadir la mirada de Sutcliff.

-Hehehehe, a mí me parece una buena idea. Organizarle algo como ello a la querida Karin... ¡Eso será fantástico! No se lo esperará..- Undertaker se emocionó.

Sebastian fulminaba con la mirada a Faustus, quien había.. Bueno, lo que había sucedido antes con su amo y él mismo. Haber tocado a su hermosa alma antes que él lo hiciera por completo y, por su puesto, mucho mejor que ambos.

-Bien bien... ¿Qué te parece Will? Además tú fuiste quien viste por ella desde hace un bien tiemp-..

William tapó su boca antes de que continuara hablando; era cierto lo que decía, más Spears era demasiado orgulloso como para aceptarlo o declararlo en público. Undertaker sonrió más ante lo recién aconteció.

-Me encargaré de la comida.- Sebastian anunció.

Claude dio un paso al frente.

-No puedo permitirlo.- Dijo. El otro mayordomo de negro volvió a fulminarlo con sus ojos.- Supongo que te harás cargo de ver por todo se realice a la perfecció. Eso deberías dejármelo a mí, he sido varias veces mayordomo, y en ambas tuve experiencia suficiente. Déjame encargarme de ello.

Sebastian no estaba nada convencido.

-¿Cómo sé si no planeas otra trampa?- Cuestionó.

-Porque...-Quitó sus lentes-..Soy el mayordomo de la familia Trancy.

Se quedó en silencio la habitación; Sebastian sonrió, pero no por estar feliz, y lo hizo porque había comprendido a lo que Claude había querido llegar.

-Ya veo...-Lo miró-Entonces, ¿qué haré yo?- Preguntó.

Claude sonrió. Sabía perfectamente lo que le dejaría a Sebastian por hacer.

Después de ponerse de acuerdo, sus pasos se volvieron más rápidos.

-¡William! ¡Chotto, chotto, chotto! (Espera, espera, espera)- Sutcliff corría detrás de él tratando de alcanzarlo, más su velocidad era demasiada.

-No me estorbes, Sutcliff. Tengo que terminar el trabajo lo antes posible- Refunfuñó.

-¡¿Eh?! ¿Acaso es que quieres llegar temprano para la preparación de-...?

Le dio esta vez con su guadaña. Subió nuevamente sus lentes.

-Si quiero llegar antes debo de terminar lo más pronto posible.- Se dio media vuelta. Bueno, era casi Navidad, y tal.vez se arrepentiría, más por lo menos TAL VEZ le ahorraría un poco.- Tú ya has terminado, ¿no es así?- Preguntó.

-S-Sí...- Grell contestó.

William suspiró.

-Entonces.... ¿Vendrás conmigo?

Los ojos de Grell se ilumimaron tanto.

-¡AHAAAAAAA! ¡ÉSA SERÁ UNA NOCHE~DEATH!

Su mano se extendió hasta alcanzar aquella estatua tallada de la madera de un árbol de caoba. Una hermosa mujer demi-desnuda sonreía a cualquiera que se cruzaba por ahí.

-¿Qué hago con esto, joven ama?- Sebastian preguntó.

-Bótalo y regresa con una bandeja con té y galletas.. Tengo algunas cosas que firmar.- Ordenó.

-Como ordene.-Y se retiró saliendo de la habitación (o más bien, oficina).

Karin quería de deshacerse de los regalos que le habían mandado algunos de sus comerciantes más cercanos.. Una mujer semi-desnuda era un símbolo de ofensa, así que haría un papel firmado por la mismísima reina para que su compañía no volviera a negociar con ellos, aunque eso ya lo sabía: Esa noche cuando el dueño de la compañía había llegado a realizar un trato muy especial, más la joven Phantomhive desde que leyó las condiciones, sabía que había algo más oculto ahí. Eso fue hace un par de meses. Entonces decidió darle una respuesta em esas fechas.. Era el momento perfecto para deshacerse de una vez de ellos.

Sacó los papeles del contrato y uno nuevo que la reina le había autorizado. Con su sello y firma, era más que suficiente. Sebastian tocó la puerta y, al recibir el permiso, entró a la oficina.

Dejó el té y las galletas a un costado de los papeles de su ama.

-¿Se le ofrece algo más?-Preguntó.

-No.- Ella espetó.

Su mayordomo se acercó más a la mesa antes de llegar a la luz.

-Joven ama....-Susurró; Karin levantó la mirada hacia él dispuesto a escucharlo.-No sería propio de mi parte por el puesto quw llevo, pero debo de pedirle algo.

-Explícate.- Karin pidió.

Sebastian la miró con ternura.

-Mañana es un día muy especial para todos los seres humanos, pero a pesar de ser un simple mayordomo (demonio) quisiera invitarla a dar un paseo por la ciudad. Distraernos un poco-Comentó. Así entonces Karin se sentía algo perpleja y un poco sorprendida, más su sentimientos no se daban el lujo de negar su emoción por salir con él.

-¿U-Una cita?..- Se sonrojó.

La estrella del pino - OVA 1era temporada (Tan sólo soy... Yo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora