Una historia fuera de lo común.

Capítulo 22

Pensé que el estar con Oliver haría que mi vida siguiera adelante, ya que el trato iba a suceder porque lo habíamos planeado, pero no fue así, no lo fue porque tome malas decisiones, en primer lugar jamás debí haber llegado así como si nada y tener sexo con él, porque acababa de enterarme de algo malo, segundo antes debí haber arreglado mi mierda no decir ¡Oh, mi madre morirá, me haré cargo de mi hermana y todo estará bien!, ¡No, porque no va a estar bien, mi mamá morirá y nada será igual!, y tercero ¿Cómo pude creer que hacerme cargo de mi hermana no sería difícil? ¡Es la vida de una persona, no de un perro! (Que por cierto no se ni siquiera como cuidar una mascota). Hice la peor cosa que pude haber hecho en toda mi corta vida, y encima iba a lo de Oliver con la intensión de tomarlo y hacerlo solo mío, porque lo quiero, pero me fui con el tiro por la culata, porque él me hizo suya y cuando terminamos y me miró a los ojos sabía que seguía luego, acurrucarse, y él estaba dispuesto a hacerlo, y me di cuenta que había caído, él había caído en mis redes, el chico más lindo y atento que he conocido estaba en mis manos y yo lo podía romper cuando y como quisiera. Tenía que salir de allí, tenía que disculparme, pero seguí pensando sólo en mí, que solo necesitaba olvidar un poco lo que ocurría y de verdad lo hizo, él logró hacerme olvidar todo durante esos minutos que estuvimos juntos y que dios me perdone por decir esto, pero ¡Fueron los mejores minutos de mi vida!, todo lo que no logré sentir en meses fueron cuadruplicados esa noche, nunca nadie me había hecho sentir eso, y lo mejor era que Oliver me miraba como si fuera tan delicada, ¡Mierda, ¿Quién me trató alguna vez así? Nadie! decidí alejarme lo más pronto, quise disculparme, ¿Pero de qué?, no me disculparía por haber tenido el mejor momento de toda mi maldita existencia, lo peor era que sabía que no sólo me había gustado, él había tocado mi corazón como nadie lo había hecho antes, sólo pedía que no dijera nada, que no me siguiera, que no me arrepintiera de salir corriendo, luego le explicaría, pero él me siguió y tenía que pronunciar esa ¡putas tres palabras! "¿Te hice daño?, me jodió, esas palabras entraron y perforaron en lo más profundo de mi corazón, inundando todo sobre Oliver, mi corazón comenzó a latir por él, en un momento pensé en mandar todo a la mierda y tomarlo y ponerle una etiqueta que dijera "Propiedad de Alicia" luego miré sus ojos y me di cuenta en lo lastimados que estaban y no tuve más remedio que abandonar y dejar de dañar a la gente que entraba en mi corazón, pero no si antes decirle que quizás estaba enamorada de él, también quizás nunca debí habérselo dicho, ni menos luego que el viento golpeaba mis muslos desnudos, y la realidad le dio un vuelco a mis pensamiento comenzando a entrar la culpa y vergüenza, pero ya no podía volver atrás, y quise volver a su casa, pero a buscar mi bragas.

Logan estuvo perdido un par de días, no era el mismo en la escuela, cuando le conté lo de Mamá solo me abrazo y no volvió a hablar del tema, no hemos salido ni visto fuera del instituto e incluso creí que le había afectado lo de mi madre, pero ni siquiera son algo tan cercano como para estar alejado por diez días, éramos amigos y sabía que algo andaba mal, lo llamé para hablar pero él no quiso y en cambio tuvimos sexo, yo no quería, necesitaba saber que el ultimo había sido Oliver, mis pensamientos eran sobre Oliver pero Logan sospecharía así que lo deje, pero no puse de mi parte, sólo lo deje que sus embestidas hicieran todo el trabajo, mis pensamientos rondaban sobre Oliver, no lo había visto luego de aquella noche, ni siquiera se había presentado en la escuela, debí haberle asustado, quizás se mudó y dejó de preocuparse por una niña tonta, él tenía a Anna, y yo a Logan, jamás debimos hacer eso.

Ahora me encontraba sentada en el inodoro de mi baño fingiendo hacer pipí, porque mi novio había descubierto que fingí el orgasmo y que por ser mi mejor amigo intuía que algo ocurría conmigo.

Un toque en la puerta me sacó de mis pensamientos- Alicia, creo que debemos hablar.

-Salgo en un minuto.- Jason no se encontraba en casa, y Caroline estaba en lo de su familia, eran cerca de las siete, así que aún me quedaban un par de horas a solas con Logan.