Una Novia Para Shoto [PAUSADO]

♦ Capitulo 9 ♦

Se sentía perdido, no había podido ni siquiera dirigirle una palabra cuando sus pulmones parecieron dejar de funcionar y su corazón se aceleró hasta casi salirse de su pecho. Simplemente salió casi corriendo poniendo una excusa tonta a su amigo que lo miró extrañado.

Pero no podía, sintió como toda aquella terapia que había recibido se iba por la borda al momento de ver sus hermosos ojos verdes, esa fue la gota que derramó el vaso, otra vez.

¿Por que tenia que enamorarse tan perdidamente? No, esa no era la verdadera pregunta, ¿por que se tuvo que enamorar precisamente de un robot? Tampoco era que pudiese preguntarlo o podían tomarlo por loco.

- Todo es tu culpa Tenya - murmuro mas calmado parándose en un semáforo en rojo, no podía ni quería echarle la culpa al robot por algo que no podía controlar, y el era demaciado orgulloso para decir que había sido su culpa, lo que dejó a Iida como único culpable de toda su desgracia amorosa, suspiró de nuevo como chico frustrado y enamorado antes de dar marcha al auto una vez mas, pero cambiando de dirección hacia la empresa de su padre sabiendo claramente que este se encontraba fuera de la ciudad.

Unas cuantas manzanas y se encontró saliendo del auto, subió al elevador y presionó el numero que conocía ya de memoria.

Su hermana se encontraba en su oficina con papeles por todos lados, envases desechables de café en cada esquina y su cabello desordenado en un moño alto, con sus gafas en el puente de la nariz revisaba unos papeles, que Shoto supo, eran estados de cuentas.

- ¡Shoto! - exclamó feliz al verlo parado frente a su escritorio - Hace tiempo que no te veía - cambió su expresión a una mas preocupada, regularmente era raro verlo fuera de su hogar, pero siempre se daba el tiempo de ir a visitarla cuando su padre no estaba, o una vez a la semana, a veces le ayudaba con el trabajo del que se encargaba ya que su padre no le daba abasto, pero el no había pasado ni una sola vez en mas de tres semanas en donde su padre no había estado dos, y sinceramente lo encontraba en extremo raro.

- ¿sucedio algo? - preguntó preocupada mordiéndose las uñas notándose también lo cansada y estresada que se encontraba.

- Pasan muchas cosas y a la vez ninguna Fuyumi - contestó suspirando pesadamente, sentándose en la silla frente a su hermana y recargando todo su cuerpo perezosamente - Mi mente es un caos andante y no soy capas de confesar el por que por miedo a que me tomen como un loco - Cerró los ojos evitando ver el rostro de Fuyumi, probablemente estaba sorprendida por aquella revelación tan repentina, esperaba de todo corazón que su hermana no se riera de lo que le estaba a punto de revelar.

- ¿mi hermanito tiene problemas? - pronuncio con tono maternal sin pizca de burla - Sabes que puedes decirme lo que te atormenta Shoto - sonrió aun con los ojos cerrados sintiendo esa misma calidez que con su madre.

- Solo no te rías ¿bien? - abrió uno de sus ojos solo para verla asentir y lo volvió a cerrar pensando en que parte de la historia empezar, tomando aire ruidosamente - me enamoré Fuyumi, me enamore de una manera irreal, fantástica, casi inhumana. El problema, es que no puedo ser correspondido ni intentándolo - ante la ultima palabra por fin abrió los ojos fijando su vista en la lampara que colgaba del techo, con un creciente nudo en su pecho que amenazaba con expandersr si seguía hablando.

- ¿Un amor imposible? - Pregunto Fuyumi recibiendo un acentimiento de cabeza - Cual es el problema, ¿te rechazó?¿se irá del país? No creo sinceramente que haya algún motivo por el que lo creas imposible Shoto, a menos que sea casada, mamá nos educó de buena manera - Todoroki río al escuchar a su hermana sacar conjeturas de todo tipo.

- Es mucho peor, podría sobre llevar que el fuera casado, pero no es eso - susurro el final sin ver la expresión sorprendida de su hermana mayor.