30 One Shots Challenge Creek

Capítulo 2: Sesión de besos

Craig se encontraba nervioso, lo estaba más de lo que aparentaba, las clases habían acabado y como ya estaban acostumbrados, él y su novio caminaban juntos de vuelta a sus hogares, en esta ocasión ambos irían juntos a la casa del rubio ya que habían quedado de ir a hacer una tarea en pareja juntos y la casa del rubio era la mejor opción al no estar sus padres por estar atendiendo la cafetería.

Como siempre, ambos iban tomados de la mano y el rubio le platicaba acerca de su día en las clases que no compartían juntos, Craig lo escuchaba, aunque al mismo tiempo, no podía evitar tener en mente los pensamientos que había estado teniendo en los últimos días, miró de reojo a Tweek y notó como este seguía hablando sin parar mirando hacia el frente.

Intento esfumar esos pensamientos para prestarle la debida atención a su novio, se concentro y luego de varios intentos lo logró finalmente.

-Ngh, ¿Quieres algo de tomar? -Preguntó el rubio una vez ambos ingresaron a la casa de este, el pelinegro negó suavemente.

-No te preocupes, yo compre un par de sodas para nosotros al salir de clases y traigo varios snacks. -

-Oh, está bien, vamos entonces. -

Ambos subieron hacia el segundo piso del hogar, entraron a la habitación del rubio, una vez dentro pusieron sus mochilas en la cama y se sentaron sobre ella.

-¿Qué quieres hacer después de terminar? No creo que nos llevemos mucho tiempo si trabajamos rápido. -Comentó el pelinegro mientras
sacaba sus libros.

-Ya veremos, podemos jugar un rato en la consola si quieres. -Dijo con una sonrisa mientras abría su libro, el pelinegro asintió y le siguió,
ambos se repartieron el trabajo y se dispusieron a trabajar

De un momento a otro, a Craig se le vinieron a la mente de nuevo todos esos pensamientos sobre el rubio y se sintió muy nervioso. No le gustaba esa sensación, el solía tener siempre el control sobre sus emociones, pero Tweek siempre lo sacaba de su zona.

Lo miró de reojo y pudo ver el rostro concentrado de su lindo novio, aún con unos cuantos espasmos no dejaba de verse adorable a sus ojos, y luego pudo ver esos labios, esos labios carnosos de un suave color rosa, siendo el labio inferior arrastrado con lentitud entre sus dientes.

Oh Dios

Craig comenzó a sentir su rostro caliente, que ganas tenía de mordisquear esos labios él mismo.

Claro, ambos ya se habían besado muchas veces antes, pero eran besos leves y fugaces, simplemente juntaban sus labios por unos cuantos segundos y ya, y no era que no le gustase o quisiera dejar de hacerlo, pero simplemente...quería más.

Quería tomar a su novio y acorralarlo contra una pared para besarlo con fiereza, quería abrazarlo y pegarlo contra él con fuerza, sentir que el rubio bajo él le correspondía como pudiese, chupar esos labios y morderlos con suavidad, ver a su novio nervioso pero dispuesto, tirarlo a la cama y verlo bajo suyo, quería..

-¿Craig? ¿Ocurre algo? -Preguntó el rubio viéndolo con cierta preocupación.

Mierda, otra vez soñaba despierto.

-No, ¿Por qué la pregunta?- Intentó sonar lo más normal posible con la misma mirada inexpresiva de siempre.

-Pues...te me quedaste mirando un largo rato sin decir nada. -Hablo nerviosamente el contrario, Craig pudo distinguir los nervios de Tweek.

Y...ahí estaba, esa era justamente la razón por la cuál el pelinegro se negaba a intentar hacer lo que deseaba tanto, porque conocía a su novio y presentía que reaccionaría mal, se pondría nervioso, el sabía lo inseguro que el rubio podía llegar a ser, lo más probable es que le gritaría y armaría una enorme conspiración en su cabeza creyendo que solo quería aprovecharse de él y pasaría lo que más temía...Tweek querría alejarse de él.