Juntos

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Mientras Vegeta y Trunks esperaban para entrar a la habitación del tiempo, Bulma se encargaba de intentar reparar a a-16. Toda la ayuda que obtuvieran era buena. Tenía que concentrarse, aquello le venía bien para distraerse y no pensar en Vegeta y en Trunks del futuro. Se habían ido tan pronto... Ni siquiera habían pasado una noche en la corporación. Echaba tanto de menos dormir con Vegeta. No era sólo por el sexo, para ella eso era lo de menos. Cuando dormía con el sayayin se sentía a salvo, era reconfortante sentir su cuerpo junto al suyo, tal y como estaban teniendo lugar los acontecimientos podía no volver a dormir con ella jamás...

Vegeta mientras tanto se sentía furioso. Goku le había vuelto a superar otra vez. Siempre tenía que estar un paso por delante. Quedaban todavía 24 horas para que el namek saliera. La espera lo iba a volver loco. Quedarse allí las 24 horas no haría que el namek saliera antes, así que decidió que se iría a dar una vuelta. No tenía ganas de estar con gente, sólo deseaba volar y que pasara el tiempo.

-No aguanto esta espera.- Dijo el príncipe mirando a su hijo. Y sin decir nada más echó a volar. Mr Popó miró extrañado a Trunks, quién sonrió y le dijo:- Necesita despejarse, pero volverá. No está dispuesto a renunciar al día que le queda de entrenamiento.-

En el año que habían estado juntos en la habitación del tiempo había llegado a conocer a ese hombre que era su padre. No era el padre que se había imaginado, pero era su padre al fin y al cabo. En el fondo tenía ganas de entrar en la habitación del tiempo no sólo por el entrenamiento, sino por pasar otro año con su padre, ya que al fin y al cabo cuando volviera a su línea temporal sólo le quedaría de su padre los recuerdos.

Vegeta volaba sin pensar en nada, sintiendo el aire en el rostro, y disfrutando de la sensación de soledad. Él era una persona que no estaba cómodo con cualquiera. Sólo una terrícola había conseguido que se sintiera cómodo, y esa era Bulma. Desde el primer momento no sabía porqué, pero se había sentido bien al lado de la humana. Su hijo Trunks era la otra persona del planeta tierra después de su mujer con quien se había podido sentir cómodo. Aunque el año que pasaron en la habitación del tiempo quería entrenar solo, y todavía lo mantenía, la presencia de aquel joven no le disgustaba.

De repente divisó la corporación cápsula, sin pensar, sin saber como había terminado yendo a casa. Con Bulma siempre le ocurría eso, sin saber cómo, sin darse cuenta ella le engatusaba y acababa volviendo a ella una y otra vez. Tenía que concentrarse en derrotar a cell y su subconsciente lo había guiado hasta ella. ¿Qué estaría haciendo?. Se concentró para notar su ki. Era débil, pero si se concentraba un poco podía notarlo sin ningún problema. Probablemente cuando la marcara podría sentirlo a Kilómetros.

La científica se encontraba en la cocina. Se dirigió a la ventana y la observó. Estaba bebiendo un vaso de jugo y comiéndose un sandwich. Su hijo se encontraba en otra habitación con sus abuelos. No podía parar de mirar a Bulma, era como hipnótico. Sus ojos mostraban preocupación. Vegeta había llegado a conocerla muy bien, y podía saber con sólo mirarla si ella estaba bien o mal. Cuando se quiso dar cuenta llevaba ya un rato mirándola. ''Pero que imbécil soy. Tengo cosas bastante mejores que hacer que observarla.´´ Pero a pesar de saber eso, no podía parar de mirarla.''Supongo que serán mis instintos, es verdad que cuando practicaba sexo con ella luego rendía mejor en mi entrenamiento. Quizás mi cuerpo me esté pidiendo eso.

La peliazul mientras se acababa el vaso de jugo no podía evitar sentir que alguien la observaba. Era extraño, no podía explicarlo pero así era, y se voltió de golpe. Cuando vió a Vegeta en la ventana mirándola con cara de idiota del susto se calló de la silla.

-¡Vegeta!.- Exclamó mientras abría la ventana. El sayayin la miraba con las mejillas completamente rojas, Bulma lo había pillado observándola. Seguro que pensaba que era un idiota.

-¿Por qué no entras por la puerta como la gente normal?¿Dónde está Trunks?¿Ya entraron a la habitación del tiempo?-

A la primera pregunta el guerrero no sabía que contestar, así que la ignoró y respondió a las otras dos.-Trunks está en el palacio de Kamisama, Picoro está entrenando en la habitación del tiempo y Trunks y Yo entraremos cuando él termine.-

La peliazul se acercó a centímetros de la cara del guerrero. Se supone que había pasado un año fuera pero ella lo veía prácticamente igual. Apenas había cambiado. le acarició el rostro, y Vegeta se quedó muy quieto, en realidad estaba disfrutando con aquello. Había echado muchísimo de menos a su humana. Ni siquiera intentó quitar esos pensamientos de su cabeza, sólo disfrutó el momento.

Bulma vió que el príncipe estaba muy quieto pero no paraba de mover los ojos de un lado a otro, probablemente comprobando que nadie los viera.

-Vegeta, vamos a nuestra habitación.- No es que la peliazul quisiera sexo, pero quería, necesitaba desesperadamente intimidad con el padre de su hijo. Bulma comenzó a caminar hacia la habitación y Vegeta le siguió sin decir nada. Una vez estuvieron dentro de la habitación Bulma lo abrazó, y para su sorpresa Vegeta le devolvió el abrazo. Si hubiera podido parar el tiempo lo hubiese hecho.

El sayayin que no era de dar muestras de afecto se sentía extrañamente cómodo. Para él hacía mas de un año de su último abrazo, su último contacto de verdad con ella. No podía más, y aunque corría el riesgo de perder el control y marcarla estaba dispuesto a arriesgarse. No podía aguantar otro año más en la habitación del tiempo sin hacer el amor a su mujer.

Finalmente, tras mucho autocontrol por su parte, consiguió vencer a su impulso de marcarla. Como iba a disfrutar cuando llegara ese momento. Miró a la humana, estaba desnuda en la cama con los ojos cerrados. De repente los abrió y se le quedo mirando, parecía que quería traspasarle. El príncipe se sonrojó.

-Sé que no te gustó que fuera al lugar de la batalla.-

Aquello sorprendió a Vegeta, aunque conociéndola era raro que no le hubiera hecho ningún comentario al respecto.- Por supuesto que no me gustó, casi te matan.-

-Te vino muy bien que Trunks del futuro estuviera más cerca que tu.- Dijo secamente Bulma.

-Te dije que no quería que fueras a la batalla y tuviste que ir igual... y por si no lo recuerdas yo te adverti que no movería ni un dedo si te pasaba algo.-

-¿Me estás diciendo que si no hubiera estado nadie más cerca me habrias dejado morir?.- Bulma pensaba que había actuado así por orgullo, y porque sabía que Trunks estaba cerca los salvaría.

-Pensaba que me conocías mejor.¿De verdad crees que los habría dejado morir?Es lo que debería haber hecho porque te lo advertí, pero ¡no lo habría hecho!.-

Vegeta comenzó a vestirse.- Veo que piensas de mi lo mismo que tus amiguitos terrícolas.-

-Vegeta yo no pienso eso, ya se que no hubieras permitido que nos pasara nada.- La peliazul se acercó a él todavía desnuda y lo abrazó.- Me da igual lo que piensen los demás, yo se cómo eres.-

El sayayin no pudo controlarse ante Bulma abrazandolo desnuda. Se despojó de la ropa interior que apenas le había dado tiempo ponerse.

-Creo que me da tiempo de hacerlo de nuevo antes de entrar en la habitación del tiempo.-

NUNCA TE ABANDONARÉ .(always love You)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora