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La sangre en mi cuerpo hervía, y no sabía como reaccionar, miles dr pensamientos inundaban mi cabeza y al mismo tiempo la sentía en blanco. Mis piernas se movieron por inercia, sin medir mi fuerza empuje a aquella chica a la cual ni siquiera le miré la cara, tomé la mano de mi hermana y la saqué de aquel lugar a fuerza.
Sollozaba palabras inaudibles, y me rompía el corazón. No tenía idea de lo que había pasado ahí dentro, pero estaba seguro de dos cosas, Dahyun era la persona más dulce y amable en el mundo, mi pequeña hermana ni siquiera era capaz de guardar rencor, ella siempre te sonríe sin importar nada, sabe cuando sufres, y te abraza cuando lloras. Dos años después de ser adoptados, teníamos un gato, Copo de nieve, murió repentinamente, recuerdo perfectamente lo devastada que estaba, lloraba mucho y papá Yoongi intentaba consolarla, cuando empecé a llorar justo atrás de ellos, Dahyun calló, se levantó y fue hasta mí para abrazarme, "Copito estará triste si lloras oppa, todo está bien". Ella es así, siempre poniendo a los demás antes, ahí, en el incidente, cuando enferma, cuando se equivoca, cuando me equivoco, incluso ahora, ella siempre está cuidando a todos, y yo, no he podido cuidarle a ella. Sin importar que sea, ella no lo merece.
—Oppa... Me lastimas— entre sus lágrimas me di cuenta de la fuerza de mi agarre. Y golpeé su cabeza.
—¡Eres una tonta!... Tú... ¿Por qué no me dijiste lo que estaba pasando?, ¿Por qué no me cuentas cuando sufres, Min-Park Dahyun? Soy tu hermano mayor... Por favor confía en mi...— La abracé, esperando poder protegerla al menos una vez. Cualquiera que hiera a quienes amo, sabrá lo que Min-Park Jungkook es capaz de hacer.

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—¿Dónde demonios se habían... Qué les pasó? ¡Min Yoongi, llama a la fiscalía, la Guardia Nacional!— Llegar a casa con los ojos rojos e hinchados y un moretón en el rostro además de una hora no común de retraso era lo que podía ocasionar.
—Papá, hablemos— puedo asumir que mi rostro era sombrío cuando vi la expresión en mis padres. Dahyun sólo podía mirar el piso, sintiéndose culpable.

La gente suele decir que mi carácter se parece mucho al de mi papá Yoongi, y por fuera, puede mirarse así, pero la verdad, es que soy mucho más emocional. Ver la expresión de sed de sangre en el rostro de papá Jimin lo dejó en claro, a quien me parezco más. Incluso cuando papá Yoongi también lucia tan molesto, era bastante más sereno.
—Mañana mismo, y sin excepción Dahyun, repetirás esos nombres al director.— Dijo papá Yoongi.
No dije más. Entre la decepción que sentía por mi mismo, y el enojo consumiéndome, me encerré en mi habitación.

𝓞𝓶𝓷𝓲𝓼𝓬𝓲𝓮𝓷𝓽𝓮

—Crees... ¿Crees qué Jungkook esté muy molesto conmigo, papá?— Dahyun secaba los platos que Jimin lavaba después de la cena. Jungkook se había negado a bajar o hablar con alguien desde que se había encerrado en su habitación.
—Bueno Dahyun, él está muy, muy molesto— los ojos de aquella niña se cristalizaban con el abrumador deseo de llorar, pues esa había sido la primera vez que Jungkook se molestaba así, y que le gritaba. —Pero, no está molesto contigo. ¿No lo ves?, está molesto consigo mismo y se siente responsable de que salieses herida y de que estuvieras en peligro, quiere protegerte porque es tu hermano, el que no confiaras en él para decirle lo que te lastimaba lo hace sentir inútil, porque te quiere. Sé que no dijiste nada porque no querías preocupar a nadie, y es cierto que debes pelear tus propias peleas, pero no tienes porqué hacerlo sola, todos nosotros, como tu familia y como quienes te queremos tanto, existimos para que seas capaz de apoyarte en nosotros, Dubu. Está bien que pienses en ti, y que pidas ayuda, esa es la forma correcta para enfrentarte al dolor, ¿No lo crees?— Le dijo Jimin, dejando de fregar los platos para darle una cálida y alentadora mirada, como si le diera un empujoncito para ir y hablar con Jungkook.

Los golpes en la puerta resonaron en la habitación.
—... ¿Oppa?... ¿Puedo pasar?—
Jungkook se enderezó de la cama. —Jungkookie... Yo... Lo siento mucho— Los ojos de la castaña se llenaron de lágrimas y su voz sonaba en un hilo.
La cara de Jungkook se descompuso antes de responder.
—Dahyun... ¿Por qué te disculpas?, soy yo el que debe disculparse, tú no hiciste nada mal— Jungkook tiró un poco de su cabello, desesperado por no poder expresar adecuadamente su sentimiento.
—No oppa, tú sólo querías ayudarme... Tú siempre has estado ahí salvándome y yo quería poder hacer algo por mi misma y al final...— Dahyun había comenzado a llorar. Fue entonces cuando Jungkook se levantó y la rodeó en un cálido abrazo, su pequeña hermana.
—Dahyun, por favor, déjame ayudarte cuando estés mal, permiteme ser alguien en quien confíes y te apoyes, no estás sola, yo siempre, siempre, voy a estar contigo— La estrujo entre sus brazo y elevó un poco. Como solía hacer desde niños cuando ella se molestaba para hacerla reír, y lo hizo una vez más, ella rió. —¿Cómo está tu rostro Dubu, aún te duele?— preguntó. La mejilla de Dahyun estaba roja e hinchada, pero ella negó con una sonrisa y restos de lágrimas en su rostro.
—Bueno, ¿Te parece bien si vamos a la tienda a comprar dulces y vemos películas? ¡Tu hermano mayor invita!—
No hizo falta más que eso para que ambos corrieran escaleras abajo y salieran de la casa. Mientras sus padres observaban cariñosos como sus hijos estaban el uno para el otro.

🌿

—¡Presidente Jeon! No puede hacer esto, soy el vicepresidente, ¿Sabe quiénes son mis padres? ¡No van a expulsar a mi hermana por esta tontería, sólo golpeó un poco a esa chiquilla! ¿Y qué?—
—¿Y qué? Parece que eres tú quien no entiende quienes son los Min-Park, Wooyoung. Y respecto a tu puesto como vicepresidente, no te preocupes, tengo tu reemplazo, ahora vete.—

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¿Quiénes son los Min-Park?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora