—¿Esposado? —pregunté sorprendida admirando como Chris se terminaba de vestir.
—Alguien llamó la policía, era lógico que eso sucediera —dijo amarrándose los cordones de los zapatos.
—¿Deseas que te acompañe? —pregunté viendo como caminaba hacia la puerta.
—No —se devolvió para darme un rápido beso en la frente—. Si tú vas él se volverá más loco.
—¿Por qué actúa como un niño de siete años enojado y malcriado? —pregunte deteniéndonos en las escaleras.
—No lo sé pero lo averiguaré —me dio un beso en la mejilla, me miró por un momento y después se fue.
Caminé hacia mi dúplex pero me detuve frente a la puerta de Dick, no lo había visto volver desde que se fue y no contestaba a Abigail, toqué la puerta con suavidad y esperé pero nadie abrió, volví a tocar con más fuerza y esta se abrió un poco, la empujé con algo de timidez y vi una imagen aún más triste que la de la chica, a Dick, sobre su sofá con sus codos sobre sus piernas y un cigarrillo en una de sus manos, su cabello lucia más despeinado de lo normal y su cabeza agachada en medio de sus rodillas, entré sin anunciarme y me acerqué con pasos cortos.
—¿Qué sucedió? —pregunté mirándolo.
—Se fue —susurró con algo de dolor—. Se fue muy lejos.
—¿Cómo lo sabes?
Dick levanto la mirada y se veía como si no hubiera dormido en días.
—Se fue con una de las chicas de la pandilla y la familia de esta chica vive muy lejos —dijo antes de calar un poco de su cigarrillo.
—Tú te lo buscaste —le repliqué caminando hacia la puerta.
—¿Yo? Yo no la ilusioné que yo sepa.
—La chica te entregó su virginidad, algo importante para ella ¿En serio creíste que te entregaría algo tan valioso solo porque si? ¿Por calentura? No Dick, las cosas no funcionan así con nosotras.
—¿Cómo supiste eso? —preguntó molesto.
—Ella me contó su historia —le aclaré dándome la vuelta para mirarlo—. Y en serio sentí lastima por ella porque...
—¿Por qué? —preguntó Dick colocándose de pie al ver que dejé de hablar.
—¡Ahí estas idiota! —chilló una mujer detrás de mí.
Me di la vuelta y Abigail estaba ahí mirando a Dick, estaba furiosa, se le notaba a leguas.
—¿Desde cuándo fumas? —preguntó acercándose a él con pasos fuertes y largos.
—¿Eso importa? —preguntó él dándole otra calada al cigarrillo.
—¡Deja eso ya! —le exigió Abigail—. ¡¿Por qué diablos no contestas el teléfono?!
—¿Por qué? —se colocó de pie, Dick medía metro ochenta, se veía enorme frente al metro cincuenta y cinco de Abigail—. Porque no se me da la gana, así de fácil.
—¿Pero quién te crees que eres? —Abigail sonaba ofendida ¿Por qué?—. Te di otra oportunidad...
—Mira Abigail —él se acercó a ella intimidándola y obligándola a alejarse—. Me importa una mierda si me diste una oportunidad o no, por mí dejemos las cosas así.
—¡Bien maldito idiota! ¡Se acabó! —gritó ella después de darle una cachetada.
Necesito palomitas para este drama, esta mejor que las telenovelas.
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Sometida por Chris
RomansaPRIMERA PARTE TRILOGÍA "PLACERES OCULTOS" Chris McGregor era todo lo que Faith Taylor buscaba en un hombre, su atractivo sexual y su sensual voz junto con su belleza física eran la representación de su hombre ideal, pero solo tienen tres meses para...