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Capitulo 54

Había mucha gente en la playa, pero Cheng Huan vio a las personas que estaba buscando de un vistazo.

Xing Xing originalmente quería jugar con la arena con otros niños, pero no estaba dispuesto a prestar a su padre del otro lado, por lo que termino haciendo un castillo solo.

Por supuesto, fue principalmente Jiang Mingyuan quien lo hacia por que la estrella pertenecía a la parte de la destrucción.

Al ver la diversión de los dos, Cheng Huan no estaba lista para molestarse. Bebió el agua restante en el vaso y le pidió a alguien que le llevara unos vasos de hielo. Después de pagar el dinero, se tumbó en la silla y se acomodo.

El viento fuerte en la orilla del mar, mezclado con humedad, hace que la gente tenga sueño. Cheng Huan originalmente solo quería descansar por un tiempo, pero se volvió somnolienta y estaba realmente letárgica.

"Hola, discúlpame". El sonido la alejo de Morfeo* y Cheng Huan abrió los ojos y miró la fuente del sonido.

(N/T: Morfeo, es el dios de los sueños, hijo de la personificación del sueño (Hipnos), y encargado de llevar sueños a reyes y emperadores. Morfeo se encargaba de inducir los sueños de quienes dormían y de adoptar una apariencia humana para aparecer en ellos, especialmente la de los seres queridos, permitiendo a los mortales huir por un momento de las maquinaciones de los dioses.)

Era un hombre de veinticinco o veintiséis años, con el rostro exquisito popular, alto, delgado, blanco y un poco largo. Parecía que se tomaba en serio el estilo.

Al ver a Cheng Huan levantarse, los labios del hombre estaban ligeramente levantados, revelando dos hoyuelos bien formados: "¿Me puede ayudar?"

Estaba un poco avergonzado: "Mi fotógrafo no pudo venir por que se sentía mal del estómago. Y no puedo tomar la foto solo. ¿Puede ayudarme por favor?"

"¿Cuánto tiempo?"

El hombre vaciló y prometió: "No te retrasará demasiado".

"Está bien". Cheng Huan estaba aburrida de todos modos, y a Cheng Huan no le importó hacer un pequeño favor. Tomó la cámara del hombre, lo intentó y preguntó: "¿A dónde quieres ir a disparar?"

"Justo allí". El hombre señaló a algunas personas.

Cheng Huan asintió y caminó hacia el lugar primero. La persona a su lado la siguio rápidamente.

El hombre estaba bien equipado con todo, desde lentes para la cámara a trípodes. Cheng Huan también había aprendido fotografía durante un tiempo en su vida. Por lo que se divirtió mucho tomando fotos. El extraño hombre también cooperó. No tardó mucho en tomar un grupo de fotos.

Después de tomar las fotos, Cheng Huan las hojeó y el hombre también estaba un poco cerca, y el olor del perfume en su cuerpo llegó a la punta de la nariz con la brisa marina.

La fragancia del perfume es muy elegante y no tan agresiva como esta persona, pero a Cheng Huan no le gustó el olor. Dio un paso a un lado y devolvió la cámara: "Iré si están bien".

Diciendo eso, estaba lista para volver.

El hombre no la persiguió, le agradeció y se quedó en el lugar para mirar las fotos, su actuación le permitió a Cheng Huan dar un suspiro de alivio y lamentó su afecto por sí misma.

Regresó a su posición original, bebió agua y el líquido frío deprimió el calor del verano en su cuerpo, lo que hizo que la persona se refrescara. Tomó un descanso, tomó la bebida y encontró al padre y al hijo no muy lejos.

Jiang Mingyuan y Xingxing todavía están amontonados en la arena, el prototipo del castillo ya apareció y el hombre está descifrando los detalles.