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Capitulo 61

Incluso si Jiang Mingyuan no lo decía, Cheng Huan planeaba cambiar de escuela a Xingxing. Esa escuela toleraba repetidamente el contacto de los extraños con los niños e incluso desempeñaba el papel de cómplice, lo que realmente la inquietaba.

Solo que, mudarse a la casa de Jiang Mingyuan ...

Aunque no hay muchas descripciones en esa novela, la representación de la señora Jiang está muy establecida. Tiene un concepto de clase muy fuerte, como si viviera en los tiempos de antes de la fundación de la República Popular de China. Para aquellos que son más bajos que ella, Madame Jiang los miraba hacia abajo, cree que es una limosna hablar con ellos, pero al mismo tiempo, no dejará ir a la gente que no le gusta, mas si son mas bajos que ella. Especialmente a la persona que agarró a su hijo.

Cheng Huan no leyó el reverso de la novela, pero echó un vistazo a los comentarios cuando entró en el foro. La pequeña protagonista con aspecto de sol también sufrió muchas quejas en sus manos y casi involucró a sus padres.

Cheng Huan no tiene tendencia a ser masoquista. No quiere tratar con esas personas. Cuando supo que la Sra. Jiang sabía que existían, solo quería irse lejos.

Pero de todos modos, no puede permitirse esconderse siempre, su negocio es bueno y los ingresos mensuales son suficientes para que ella y Xingxing vivan bien, excepto que ... Lo siente por el padre del niño.

No debería querer irse solo asi.

Cheng Huan estaba luchando en su corazón, y tenía mucho expresado en su rostro. ¿Cómo podría Jiang Mingyuan no ver?

Estaba lleno de sangre y de repente se enfrió, mirando a Cheng Huan, sin dejar ninguna expresión en su rostro pregunto: "¿No quieres moverte?"

Cheng Huan estaba un poco avergonzada, y no se atrevió a mirarlo cuando movió los ojos. Su declaración no fue diferente de simplemente admitir que Jiang Mingyuan estaba decepcionado, pero no sabía qué decir.

Hubo silencio en la habitación. Nadie habló. El cuerpo de Cheng Huan estaba incómoda. Parecía que estaban de regreso a cuando los dos se conocieron, extraño e incómodo.

"Yo ..." Al final, ella rompió el silencio, Cheng Huan humedeció sus labios y expresó sus pensamientos: "No quiero contactar a tu madre".

Jiang Mingyuan declaró de inmediato: "No dejaré que te moleste".

Cheng Huan lo miró, obviamente no convencida.

Vivir bajando las escaleras. Debe ser una provocación para la Sra. Jiang, ¿Cómo podría no enterarse?

Jiang Mingyuan vio su desconfianza. No continuó prometiéndole, solo volvió a guardar silencio. Después de un rato, se levantó, su tono sonaba igual que de costumbre: "Este tema se discutirá más tarde, ahora no es temprano, ve a acostarte, me voy ahora".

A causa de este incidente, Cheng Huan estaba de mal humor. Se levantó en silencio y envió a la persona a la puerta. Cuando el elevador abrió la puerta, dijo algo cuidadosamente en el camino.

"No pienses en eso" Jiang Mingyuan levantó la mano y finalmente no pudo contenerse y le frotó la cabeza mientras reía, frente a la mirada sorprendida de la mujer, con una sonrisa superficial dijo: "No es un gran problema, no lo tomes en serio".

Después subió al ascensor.

Las personas normalmente son serias cuando se ríen tienen más impacto. Cheng Huan se sonrojó. Pensando en la persona que acababa de reír, el equilibrio en su corazón continuó inclinándose, hasta que la puerta del elevador se cerró frente a ella, y de repente miró hacia atrás.