Un pequeño diario en tiempos de coronavirus

Día 37

Ayer hice la incursión en el mundo exterior más grande que he hecho desde que empezó la cuarentena. Comprar pan para la cena en la 20 de Julio con una calle casi totalmente desierta y oscura. Es un vivo reflejo de las veces que escapaba de casa a medianoche, ya fuera a pasear por el parque, a divertirme en 4°B o solo a matar el hambre en la panadería. Sea como fuere, fue bastante bonito.

He estado pensando... creéis que todos tenemos por lo menos 2 dotes artísticos? Porque la verdad yo sí lo creo, y cuando se es un amante del arte en sí, me gusta mucho inspirar a la gente a hacerlo. Cantar, escribir, actuar, pintar, danzar, etc... por irrisorio que pueda parecer, todos tenemos alguno de esos dones. ¿Cuándo despertó mi amor por el arte? No lo sé, pero me ha abierto la mente y acercado a varias personas.
Arte, el verdadero lenguaje universal...

Hablando de escribir, me sorprende que haya mantenido la constancia de una entrada diaria por un mes entero. Ha sido difícil, nunca me ha gustado hablar de mi mismo, pero ahora es lo que hago cada día... quizá sea por ello que me estoy cansando de mis propias palabras, empiezo a pensar que estoy lleno de mi mismo, eso me desagrada...