El gigante que sostiene el mundo...

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Después de el día de ayer estoy destrozado. Todavía no puedo creer todo lo que ocurrió. Despierto en mi cama, no recuerdo muy bien como
llegué aquí en primer lugar. Estoy "semi-desnudo", algo muy raro en mi ya que siempre me pongo mi pijama antes de dormir. Normalmente es un pantalón
cómodo y alguna camiseta de un solo color sin diseño, la perfecta imagen de un dominguero. Después de pelear conmigo mismo por media hora me levanto, el primer pantalón que encuentro es el que me pongo y me dirijo a la puerta de mi cuarto, sintiendo el frio en mi pecho mientras bajo las escaleras un tanto encandilado por la luz del sol. Es extraño que Alice no me haya despertado, tal vez esté ocupada abajo.

Al descender por las escaleras mis ojos solo se logran confundir. Lilith está cocinando, y sentada en el desayunador está Alice. Parecen estar... ¿hablando? Cuando mi vista viaja por la sala buscando algún indicio de que esté soñando, veo al androide sentado en mi sofá viendo un documental sobre unas águilas. Trato de buscarle una explicación lógica a esta imagen tan rara y que probablemente sería el sueño de algún niño de dieciséis años tratando de escribir alguna novela amateur. Dos chicas lindas están en mi sala y yo sin camisa... Grandioso. Subo rápidamente a ponerme un suéter cualquiera y vuelvo a bajar al país de las maravillas, al parecer.

-¡Ah, Darnell! -Me Saluda Lilith- Buenos días.

-¡Hola Darnell! -Me saluda mi niña.

El androide no me saluda, solo se queda mirando fijamente al televisor. Parece muy interesado en este documental, aún con su cara inexpresiva puedo notar su interés latente.

-¡Iván-Le reprocha Lily- Saluda a Darnell!

-Hola Usuario Darnell.

-Uhmm -Me tomo un momento para procesar todo- ¿Qué haces tú y... Iván aquí?

-¡Que desconsiderado eres! Solo hago nuestro desayuno -De un salto me sonríe de manera coqueta e inocente.

Me fijo bien y noto que Lilith lleva puesto otro suéter mío, de color gris con el emblema del Outlaw Bandit al frente. Tampoco parece llevar pantalones, lo cual me inquieta y me lleva a pensar de nuevo lo que me estaba estresando desde que desperté; será que nosotros...

-Uhm... ¿Y eso que llevas mi suéter? 

-Ah, ¿esto? -Toma el cuello del suéter y lo huele- Mi ropa se está lavando porque olía a pólvora y ceniza.

-Ah... -Me acerco a ayudarla a servir los panqueques que cocina y aprovecho para susurrarle al oído- Oye, ¿nosotros no...?

-¿Qué cosa? -Me pregunta mientras se sienta junto con Alice quien está sonriente y se mete un pedazo de panqueque a la boca- ¡Ohm, ehfo... Cwago que no!

-¿Perdona? No entendí nada de eso.

-Después de pasar la comida me responde- Darnell, me quedé aquí en la sala con Iván y de vez en cuando subí a ver como ibas... Por lo de ayer, ya sabes...

-¡Oh! Ya veo -Me le quedo mirando a Alice aliviado- Gracias por... Estar pendiente de mi, Lilith.

-¿Que pasa Darnell? -Me interroga Alice que nota mi mirada extrañada

-Nada. Solo que me sorprende que hables con Lilith tan... "bien". -Le sonrío a ambas.

-Bueno, cuando llegaron tú te dormiste de inmediato -Me explica- así que los tres nos quedamos hablando hasta tarde y cosas. Lilith me cae un poquititito
menos mal.

-¿Pero te sigo cayendo mal? -Le pregunta Lilith.

-¡No es facil!, ¿OK?

-Ok... ¡Ouch!

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