Eternos

El nuevo vecino

Anne se despertó ese día emocionada, aunque eran casi las dos de la tarde y solo podía pensar en el hambre que tenía, ese día iba a quedar con su mejor amiga para dar un paseo en bici. Hacía mucho que no veía a Eva, se había pasado casi todo el verano fuera y llevaba más de un mes sin verla, la echaba mucho de menos.

Llegaron las seis de la tarde y empezó a prepararse, había quedado a y media en casa de su amiga. Se puso su camisa naranja a modo de vestido que tanto le gustaba y unas medias.

Cuando vio a Eva no pudo evitar correr a abrazarla y después de un largo abrazo las chicas fueron a por sus bicis para dar ese paseo.

Durante el paseo hablaron de muchas cosas, se pusieron al día. Eva le contó a su amiga que había conocido a un chico en su pueblo, le dijo que era muy guapo, que tenía el pelo rizado y que estar con él era igual a risas aseguradas.

-Te gusta- Anne estaba segura de ello por la sonrisa de Eva al hablar sobre él

-¡Que dices! No, sólo es mi amigo, además ya no lo voy a ver más hasta el siguiente verano, si es que coincidimos

-ya ya...- no le creía

-Bueno y tú qué?Alguna novedad?

-Que va, yo me he pasado todo el verano aquí, aburrida y muriéndome de calor, el verano en Sevilla es insoportable...

-Lo sé, el año que viene te vienes conmigo sí o sí- ese año ya lo habían intentado pero el padre de Anne no la dejaba, a ella le había dado bastante rabia y se había enfadado con él, pero el enfado le había durado poco, su padre siempre sabía cómo hacerla reír.

Sin darse cuenta habían acabado en un pueblo cerca de la ciudad, no estaban siguiendo ninguna ruta. Ya estaban un poco cansadas así que decidieron buscar un sitio en aquel pueblo para sentarse. Después de un rato dando vueltas encontraron un parquecito un poco aislado, no había nadie así que no se lo pensaron dos veces, dejaron las bicis amarradas y se sentaron, sacaron el altavoz y pusieron música, empezó a sonar "Put your head on my shoulder" era una de sus canciones favoritas y siempre que la escuchaban cantaban juntas, esa vez no era de menos y empezaron a cantarla a todo pulmón, no les importaba lo que la gente podría pensar de ellas, se habían echado mucho de menos y lo necesitaban.

Cuando terminó la canción empezaron a hablar del curso siguiente, entraban a primero de bachillerato y sus caminos se "separaban" y es que, cuando tienes 16 años, que tu mejor amiga no este en tu clase es el fin del mundo.

Después de un buen rato hablando, lleno de abrazos, risas y promesas de que no se separarían, decidieron volver a casa,ya se estaba haciendo de noche y no querían llegar muy tarde.

Una vez dejaron las bicis se despidieron, seguramente se verían al día siguiente, todavía tenían muchas cosas que hacer y muchas cosas por hablar.

Anne se sorprendió cuando al llegar a su casa vio un camión de la mudanza en la puerta, es verdad que había un piso libre, el señor mayor que vivía encima de su familia había fallecido recientemente y aunque a casi nadie le importó a ella le puso un poco triste, a veces se lo encontraba en el ascensor y éste le decía lo guapa que era y lo mucho que disfrutaba escucharla cantar desde la terraza, eso siempre animaba a Anne y le ayudaba a la poca confianza que tenía en sí misma y en que su voz fuera tan bonita como su hermano Flavio siempre le decía.

-Hola- una voz la sacó de sus pensamientos, se dio la vuelta y se encontró a un chico rubio, debía ser de su edad, tenía unos ojos verdes que hacía que te quedarás embobado,unos ojos a los que Anne podría mirar por todo el tiempo del mundo, no era muy alto y llevaba gafas, estaba sudado de subir tantas cajas pero aún así estaba guapísimo, al menos eso le parecía a ella.

-Hola, eres el que se va al mudar al nuevo piso?

-Si, con mi hermana Maialen y mis padres

-Jo, que guay, siempre está bien conocer gente nueva- ¿siempre está bien conocer gente nueva?que acababa de decir!?, no se podría creer que estuviera nerviosa- Bienvenidos

-Muchas gracias, por cierto me llamo Gèrard

-Encantada Gèrard, yo soy Anne-se hizo un silencio que, extrañamente, no fue incómodo- me tengo que ir, me esperan para cenar- no era mentira,estaba segura de que la estaban esperando, pero esa no era la única razón por la que se quería ir, y es que decir que estaba nerviosa era poco.

Gèrard se había quedado embobado pensando en Anne, en sus rizos, en sus ojos verdes, su eyeliner perfecto y en la ganas que tenía de conocerla mejor.

-Pero bueno hermanito no te habrá gustado a ti la vecina no?- Mai lo dijo un poco entre risas, ver a su hermano así le había hecho gracia.

-No, simplemente me parece guapa- en la voz se le notaba que estaba nervioso.

-Es que es guapa- su hermana sabía que no se lo había contado todo pero no quería insistir- anda ayúdame con estas cajas.

Una vez subieron todas las cajas había que instalarse, desempaquetarlas y poner todo en su sitio, pero ya era bastante tarde, había sido un día agotador y todos en la familia estaban muy cansados, así que decidieron pedir pizza e irse a dormir, ya empezarían a hacer todo eso mañana.

Como se acababan de mudar Gèrard durmió en un colchón en el suelo en su futura habitación, tenía muchas ganas de empezar a decorarla,había pensado en poner sus guitarras y su teclado, una mesa de estudio amplia y muchas más cosas que tenía guardadas en cajas con la palabra frágil bien grande para que los de la mudanza tuvieran mucho cuidado con ellas, no quería que se rompiera nada. Antes de dormirse pensó en lo mucho que echaría de menos a sus amigos y a Ceuta, aunque sabía que su familia había hecho lo correcto en mudarse, no podía evitar sentirse mal, pero en una semana comenzaba el curso y tenía ganas de empezar de cero.

Cuando Anne llegó a su casa un olor a tortilla la invadió, tenía mucha hambre aunque raro era cuando no la tenía.
Le contó a su padre y a su hermano el maravilloso día que había tenido con su amiga y le dejó caer a su padre el hecho de irse con ella el verano siguiente, éste puso los ojos en blanco y decidió ignorar el tema, ya habían hablado demasiadas veces de ello. También les contó que había conocido al nuevo vecino.

-Yo también he hablado con ellos, vienen de Ceuta, tienen dos hijos, el pequeño, es de tu edad, Anne, y la mayor tiene la edad de Flavio- que informado estaba, ni el FBI

-Al menos podré compartir mi estrés de selectividad con alguien que me entienda - Flavio, solo por eso, sabía que iba hacer buenas migas con esa chica.

-Creo que deberíamos ayudarles, siempre es difícil llegar a un sitio nuevo, por eso mañana le llevaréis una lasaña que prepararé.- una cosa que caracterizaba a su padre era que tenía un corazón tan grande que no le cabía en el pecho.

-Vale- a los dos les parecía una buena idea y ambos tenían ganas de conocer a sus nuevos vecinos.

Justo después de cenar Anne se fue a su cuarto, antes de acostarse miró el móvil, ya era costumbre, siempre miraba las redes sociales antes de dormirse. En ese momento le llegó un mensaje de Eva.

Eva

Te vienes mañana al nuevo centro comercial

con, anaju y sam?

si, claro :), nos vemos por la tarde

Sam insiste en que venga

tu hermano jajajajajaj

le ha pillao fuerte...

dile que mi hermano irá

Va, buenas noches bb❤️

Buenas noches amor😘

Justo antes de irse a dormir escuchó una melodía, le picó la curiosidad y abrió la ventana, miró por todos lados pero no vio a nadie, supuso que sería alguien de los nuevos vecinos, pues ella, que conocía bastante bien el bloque, sabía que ella y su hermano eran los únicos en tocar algún instrumento. Decidió que mañana, cuando les llevara la comida les preguntaría sobre aquello.