cap.34 Zero

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Demasiada confianza en mí mismo? Tal vez... de cualquier forma estaba listo para volver.
Habìa un montón de cosas por cambiar.
Como sea, estába dispuesto a volver a la escuela con la mayor actitud posible.
Así es, es un nuevo año escolar, es hora de la acción.
Las vacaciones se fueron volando con Rubí.
Pausa!
Seguro te preguntaras que pasó con Rubí. Pues, es una larga historia, bueno... tal vez no tan larga.
Esa vez en el hotel, dormí como un bebe. A la mañana siguiente unos ruidos extraños me despertaron, algo como un extraño jadeo. Era de madrugada y Rubí se había levantado al baño a vomitar. Su cuerpo ya rechazaba el exceso de alcohol.
Me levante alarmado de la cama al escucharla y al entrar al baño la veo con la cabeza casí metida en la taza. En seguida trate de ayudarla, pero ella me dijo que estabá bien y que solo la ayudara sosteniendo su cabello.
Oh, que romántico no?
Ya se sentía un poco mejor.
Ya era temprano por la mañana y quise invitarla a desayunar.
Ambos nos vestimos y nos disponemos a salir.
Que tranquilidad hay por las mañanas aquí en el centro de la ciudad.
Ella solo entra a una tienda sercana y al salir noto que lo unico que a comprado a sido un cigarro y un cafe.
-Oye, no me refería a eso cuando dije que salíeramos a desayunar.- le dijé.
-Descuida we, yo estoy bien con esto.-
-No, no creo que estes bien... .-
-See, ya hasta me acostumbre.-
Antes de que pudiera encender su cigarro, se lo quito de la boca y lo guardo.
-Oye!.- se molestó.
-No, tienes que comer algo primero.-
La tome de la mano y la lleve hasta mi lugar favorito. La cocina mas famosa del centro de la ciudad, donde sirven los mejores chilaquiles que haya probado.
A mí me funcionaba contra la cruda.
Pedí dos ordenes de chilaquiles con un huevo y dos vasos de jugo de zanahoria. Rubí se veía terriblemente cansada. Literalmente tuve que darle de comer en la boca porque no podía coordinar bien aún.
Que diferente se ve Rubí sin maquillaje...
Su cabello enredado y despeinado, sus enormes ojeras, sus labios partidos y resecos, su piel se ve palida y amarillenta. Era como sí Rubí fuera dos personas distintas. Pero eso a mí no me importaba, igual la quería. No soy muy superficial. Bueno... no aún.
Eso dejalo para más adelante...
Terminamos de desayunar y Rubí se tiene que ir corriendo a casa.
Nos vemos...
No nos hablamos todo el fin de semana. Espere hasta verla en clase.
Eventualmente mis padres se enteraron que estuve en el hotel con una chica. Supusieron lo peor y fue super incomodo, pero no paso de un regaño y una "charla".
Padres...
Tu sabes...
El lunes sin falta llego al salón de clases. Wow, solo faltan dos semanas más para terminar y ya solo somos como seis tipos en el salón.
Miro hacia la puerta.
Ahí viene Rubí tan guapa como siempre. Hoy trae un pantalón de cuero ajustado y una ombliguera tipo top blanca. Ya venía bien maquillada. Lo hace muy bien pues, al maquillarse, siempre queda despampanante. Le doy los buenos días y ella se acerca a mí y me saluda con un pequeño beso en los labios. Sería este el comienzo de nuestra relación? Quien sabe, despúes de todo nunca lo hicimos formal... hasta que se acabo.
Veras, los días continuaron pasando. Seguíamos esforzandonos a pesar de ser tan pocos en la clase. Siempre, al salir al descanso, solíamos caminar un poco y buscar un lugar para poder besarnos un rato y que ella pudiera fumar. Claro, siempre la obligaba a comer algo primero. En serio, tenia que obligarla a comer.
Beso.
Beso.
Cigarro.
Beso.
No me molesta un poco de humo.
Salimos un par de veces. Al cine, a tomar un cafe y charlar, y a un pequeño concierto en una plaza serca de su casa. Era muy divertido y yo era muy feliz. Y todo fue perfecto... como por dos semanas.
Al terminar las clases de verano sabia que ya no iva a poder verla.
Entonces paso.
Rubí estaba super contenta por sacar un ocho de calificación final, y claro, despúes de todo yo la ayude.
Uy, que modesto.
El último día de clases la pasamos caminando por toda la escuela y charlando.
-Y que harás ahora?.- le pregunté.
-Pues, ya aprobé unas cuantas materias más, ya estoy más acá que alla. Espero poder venir durante el semestre a tutorías o a exámenes de recuperación.-
No queria dejarla ir. Y sabia que nunca dejamos bien claro nuestra relación.
Me armé de valor y le dije: -Oye, creo que nunca te lo dije pero, me gustas mucho... .-
-Ja! Ya lo sabía... .-
-Qué? Cómo? Si siempre fuí muy sutil.-
reímos juntos.
Y le digo: -Creo que nunca te pedí que fueramos novios... .-
Pero de repente la sonrisa de Rubí desaparece.
-La verdad es que no me esperaba que te ilucionaras demacíado.- me dice.
-Qué? De que hablas?.-
-Bueno, es que la mayoria de los tipos con los que he salido les bastaba andar conmigo un rato, algo de una noche, y despúes me dejaban.-
-Qué me tratas de decir?.-
-Hablo de que... .- Rubí se queda callada por un buen rato.
Yo estaba muy confundido.
Y por fin continua: -Hablo de que... creo que no estoy lista para una relación formal.-
Pum!
-Qué? Pero... tu y yo... y todo lo que paso entre nosotros... .- me siento rechazado.
-Sí... esque la verdad no creí que durara tanto, lo siento. Además que ya no podre verte tan seguido.-
-Eso no importa. Tu me gustas! Me gustas mucho! Y quiero estar contigo... .-
-Lo lamento, creeme... fuí una tonta. Lo siento mucho.-
Ella ya había tomado su decisión. No quería forzarla a nada. Tenia que aguantarlo. Así es esto...
Ni modo.
-Bueno... supongo que al menos podemos ser amigos.- le digo.
-Por supuesto que si. Eres un gran chico y me alegro mucho de haberte conocido.-
Abrazo.
-Te quiero mucho Rubí.-
-Y yo a tí.-
Antes de soltarla volteo un poco y la miro a los ojos. Se ve algo apenada y triste. La miro fijamente y me acerco lentamente. Ella cierra los ojos y hace lo mismo.
Nuestro último beso.
Fue lento, muy muy lento, y por fin utilizamos un poco la lengua.
Eso es todo.
Estabá triste? Si, la verdad sí, pero iba a dejar que esto me afectara? No!.
Para mi esto fue como un final agridulce.
Qué pensarías si te dijera que actualmente sigo teniendo contacto con ella? Ahora es como si ella fuera mi pequeña hermana. Ya verás después a lo que me refiero.
Guiño.
Bueno, bueno, bueno... es el primer día de clases de un nuevo semestre y yo voy llegando a la escuela con toda la actitud del mundo. Después de todo, estoy muy feliz de haber tenido un romance de verano.
Tengo una actitud completamente renovada. Ahora tengo más confianza en mí mismo y trato de ser buena onda. Tengo una sonrisa fresca.
Soy un gran tipo. Aunque creo que ese fue el punto en que me comenzaba a convertir en un pendejo.
Tu sabes...
Me corté el cabello y ahora tengo un look más cool. Deje de usar el pasador dorado que me había regalado Erika pues, hubo un tiempo que cuando lo usaba, todos creían que era gay.
El mismo ambiente de cada inicio de semestre. Cientos y cientos de chicos reencontrándose por toda la escuela. Los profesores viniendo de aquí allá porque no saben qué salón les asignaron. Todo está lleno de energía.
Es muy divertido ver a los chicos de primer ingreso. Jóvenes y llenos de esperanzas.
Ya quisiera verlos a final de semestre.
Solo espera...
Obviamente lo primero que hice fue dirigirme a la banca. Ahí están todos los tipos de siempre. Esos hijos de la chingada también se quedaran otro año.
Verás, en la preparatoria en donde yo iba era lo más normal del mundo repetir un cuarto año. Ya ni siquiera era mal visto. Hasta podrías presumir de ello.
Qué estupidez.
La escuela ponía todos los medios para que te graduarás a toda costa; exámenes de recuperación, clases extracurriculares, tutorías, clases en línea y clases de verano. Ya si eras lo suficientemente pendejo para ni así graduarte era cosa tuya.
Entonces ahí voy llegando a la banca y de inmediato escuchó que Luis tiene su bocina de mano a todo volumen y sonaba la canción de "La muralla verde" de los Enanitos Verdes. Todo el mundo cotorrea.
Veo caras nuevas.
Hago un saludo general: -Que onda banda!.-
-Ohhhh! Ese wey!.-
-Que paso men!.-
-Awebo! Cuarto año!.-
-Eres la mamada.-
-Cómo estás Luis! qué tal Oscar. ese Mau.-
Parece que Alan aún no llega... típico de él.
Conocí a unos chicos nuevos en la banca muy agradables.
Comienzo a conversar con todos ellos.
A él le dicen el puma. Un chico un poco bajito y gordito con chinos y lentes de pasta grande. A pesar de su aspecto era muy bueno para jugar fútbol. Súper alivianado y buena onda.
A este chico le dicen tocino. Qué apodo tan extraño. El es delgado, moreno y tiene el pelo un poco rizado.
Sus brackets tienen ligas doradas. También es muy buena onda y agradable, se ve que es tranquilo.
Y luego está Dan. Él es un chico alto y reservado. Tiene una cicatriz en la sien derecha y me cuenta que fue por una pelea. La verdad es que tiene un aire bastante rudo, pero también le gusta cotorrear y divertirse.
Por último se encuentra mí futuro dolor de cabeza: Ana. Ella es una chica pequeña pero bastante voluptuosa. Tiene el cabello super largo y castaño rojizo y su piel es bastante blanca. Tiene una linda carita de muñeca francesa.
Te recuerda a alguien? A mí si... a Lili.
Te juro que en el primer momento en que la vi me quedé impactado. Ella es como una versión de Lili pero más pequeña. Digo, la misma carita blanca con fracciones finitas, el mismo tipo de cabello pero en rojo, y las mismas tetas grandes.
El parecido era sorprendente.
Sólo platiqué con ella un rato. Me contó que ama a los gatos, le gusta mucho la música coreana y piensa estudiar psicología.
Es gracioso porque sólo me llega hasta los hombros. Parece simpática.
Quién diria que por ella me condenaría otra vez.
Futuro final.
Todos volteamos a ver hacía la entrada. Ahí viene Alan. Rapidamente Luis cambia la canción que estaba sonando en su bosina y reproduce "Without me" de Eminem y grita: -Ahí viene ese hijo de su puta madre!.-
Todos en la banca comienzan a hacer bullicio y lo reciben a gritos.
Alan grita: -Que onda madafakas!.-
Odio admitirlo, pero me da gusto verlo tan animado.
Rapidamente se incorpora con nosotros a la platica y dice: -Que hay putos. Vengo de mirar algunos culitos en la entrada.- guiño.
Oscar se emociona y le dice: -Si, no mames! Este año hay unas morras de primer ingreso bien buenas!.-
Y Mau le contesta: -Oshes! Que riko!.-
Todos reímos como idiotas.
Entonces Alan dice: -Y si nos vamos de peda?.-
Yo le contesté: -No mames wey, tan temprano? Ni a empezado la primera clase.-
-Que importa! Llevo sobrio todas las vacaciones.-
-Nel, no te creo.- le dedico una mirada altanera.
Ja!
En ese momento pasa una chica esbelta, con camiza sin mangas y un pequeño escote en la espalda, era bastante guapa pero se veía más joven que nosotros.
Todos la volteamos a ver como perros hambrientos y la desvestimos con la mirada.
Oh sí, morvoseavamos a las chicas, pero hasta eso, tratabamos de ser discretos.
-Uff... mira eso... .- dice Luis.
Pero Alan le contesta: -Cuidadito en donde te fijas mí buen. Últimamente las morras de secundaria ya vienen bien experimentadas. Esa se ve que ya está bien pasada... .-
-Me vale verga... no se la niego.-
Yo me dí cuenta que esa chica se detuvo a mirar un panel de informes con el mapa de la escuela, parecía que no encontraba su salon de clase, y les dije: -Porque no le hablan? Está ahí parada.-
Oscar se saca de onda y me dice: -Nel, se ve que tiene cara de mamona.-
Alan dice: Yo le hablaria... pero no es lo que busco en este momento.-
Entre esos pendejos empiezan a discutir y a poner excusas para no hablarle.
Al Diablo, lo hare yo.
Pensé.
Me llene de valor y caminé hacia ella.
Tal vez quería demostrarles lo decidido y despreocupado que era ahora. Trate de verme buena onda y fresco.
-Hola, estás perdida? Quieres que te ayude a encontrar algun salón o algo?.- le dije con un tono de voz elegante.
Visto.
Ella solo me mira extrañada, se da medía vuelta y se va. Era obvio que me ignoro. Me doy medía vuelta y vuelvo a mirar a la banca. Ahí estan esos pendejos tratando de aguantar la risa.
-Ja-ja... que es tan gracioso?.- les digo.
Oscar no para de reír y me dice: -Chale men, ni te pelo.-
Y Alan le contesta: -Y tu porque te ríes pendejo? A ti menos te hubiera pelado, es más, si le hubieras hablado tú, habría llamado a una patrulla.-
Eso si fue graciocisiomo.
La sonrisa de Oscar desaparece y nos dice: -Webos, pendejos!.-
Estar en la banca era como siempre estar de fiesta.
Me tengo que despedir de ellos pues yo si quiero entrar a mi primera clase del semestre. Alan dice que se ira a tomar un rato con los demás y al rato vuelve. Antes de irse, veo que Ana se le acerca rapidamente a Alan y le dice: -Hola! Cuanto tiempo sin vernos! Por fin hice mi cambio al turno de la tarde. Nos vamos a estar viendo por aquí.- se ve emocionada. Era obvio que ya se conocían.
Él le responde: -Si, si... lo que tu digas.-
-Bueno, ya me tengo que ir a mi clase. No tomes mucho y vuelve por mi, ok?.-
-Si, ok.- Alan más parece indiferente.
Ana se despide de él con un beso en la mejilla y con un saludo general para todos los demás.
Me quede tratando de prosesar lo que había pasado.
Qué? Alan también tenia a su pequeña Lili? Me mataba la curiosidad.
Pregunte discretamente de donde conocía a Ana.
-Es una vieja amiga... .- es todo lo que me dijo.
Le respondo: -Es bonita... se parece un poco a alguien.-
Alan se pone serio y me dice: -A quién?.-
-Bueno, esque ella me recordo mucho a... .- antes de terminar mi oración, Alan levanta una ceja y me mira fijamente.
Creí que estuve apunto de cagarla y solo le digo: -No, nada... olvídalo.-
Apuesto que sabía lo que iba a decir.
Se molesto?
Bueno Alan sólo se despidió y yo también.
Tengo que ir a mi clase a fingir que pongo atención.
Éste es el comienzo de un nuevo semestre y un nuevo yo.
Qué sorpresas me esperan?
Esto se va a poner muy estúpido.
Será más estúpido de lo que imaginas... en serio.

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