9.- Trato.

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Baekhyun bajó de su auto y observó la galería contrariado.

Eran las 2 am y ya había pasado una semana desde que él y su amigo habían estado ahí.

Los primeros días fue fácil seguir con su vida, pero siempre estaba una pequeña culpa que le comía más de lo esperado.

Se cruzó de brazos.

- Esto es ridículo, seguro él ya lo olvidó.

Observó su auto pero casi enseguida regresó la vista a la galería y comenzó a caminar hacia ella.

Sin pensárselo mucho más, tocó.

Tuvo que volver a tocar tres veces hasta que por fin Chanyeol se asomó por el vidrio de la entrada, sin abrir la puerta.

Se observaron en silencio.

Baekhyun analizó al chico un poco sorprendido, se veía más delgado y palido.

- Buenas noches. - Empezó el rubio.

- ¿Qué quieres? Minseok se fue hace horas.

Hizo una mueca.

¿Esos dos se seguían viendo?

- Vengo por ti. - Soltó sin saber muy bien que decía.

- ¿Qué? - Chanyeol lo observó aún más serio.

- No me gusta estar mal con las personas. - Suspiró. - Hice acusaciones muy feas sobre ti cuando solo intentabas ayudar a mi amigo.

- Para ahí. - El pelinegro alzó una mano en señal de alto.- Sí tienes culpa me da igual. Dijiste lo que dijiste y nada lo va a cambiar. No te des tanta importancia, lo que digas no me interesa. Así que olvídalo y sigue con tu vida.

Apretó los puños enojado.

- Eres un idiota.

- ¿Y tú qué eres? ¿Un santo? - abrió la puerta. - Ya ha pasado mucho tiempo, sí te hubiera importado arreglarlo lo hubieras hecho rápido, no solo hasta que la culpa no te dejó seguir.

Guardaron silencio y Baekhyun bajó la vista apenado.

Observó al chico y abrió los ojos sorprendido. Su mano era recorrida por un hilo de sangre que no paraba de avanzar.

- Estás sangrando.

El alto escondió su mano detrás de su espalda.

-Si ya terminaste, adiós.

Intentó cerrar la puerta, pero Baekhyun atoró su pie justo antes.

- ¿Necesitas que te lleve a un médico?

Chanyeol volcó los ojos.

- No.

- Está sangrando mucho. Deberías dejar que te revisen.

- Estoy bien.

- Chanyeol. - Lo observó a través del pequeño espacio de la puerta. - De verdad lo lamento, no sé por qué me enojé tanto al verte con Minseok. No pienso nada de lo que te dije y te estoy agradecido por ayudar a mi amigo. De verdad lo lamento, odiame y piensa que soy malo. Pero déjame llevarte al médico.

Park observó al pequeño rubio que estaba deteniendo la puerta y suspiró.

Su mano sí que dolía.

- Sería muy malo que un artista se quede sin mano. - Baekhyun habló.

Chanyeol asintió.

- Bien, vamos.

Abrió la puerta y el contrario sonrió.

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