—M—Llamo la atencion de la futura esposa Evie. —¿Sí?. —¿Que harias si alguien se opone a tu casamiento?. —¿Sabes de alguien?. "Si yo" pensó Evie —No, te ves hermosa. —Gracias, ahora debo irme. —Nos vemos en la iglesia. La peli-morada salio y la peli-azul comenzo a vestirse, si iba a interrumpir el casamiento de su mejor amiga debia vestirse bien. —¿Se puede?. —Uma, si adelante. —¿Estas segura? —Debo hacerlo.
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[...] —Si hay alguien que se opone a esta boda, hable ahora o calle para siempre. —YO ME OPONGO!. Mal y Ben la miraron helados, la peli-morada hervia del enojo y del dolor y Ben estaba muy confundido. —¿Quien es usted?. —Evie, yo, Mal tengo que hablar contigo a solas. —Ya lo dejaste claro Evelyn. —Son cinco minutos. Mal asintió, y salió al patio de la iglesia con Evie. —¿Que queres? —Te amo. —¿Que? —Que elegí amarte, elegí tus sonrisas, elegí tu olor como aroma favorito.— Las lagrimas se apoderaron de sus ojos —Elegí tu voz, tus abrazos, elegí que no queria otras manos agarradas a las mias. —Chicas— Interrumpio Ben –Yo, Evie Uma me contó, les deseó lo mejor debo irme. Mal lo vio irse, y miro a Evie, esperando que continuara. —Elegí quedarme con tus manias y defectos, te elegí a vos y volveria a hacerlo. —Evie, yo, no... —Comprendo. La vio irse, nunca la tuvo, pero penso que tal vez sí. Vio como todos salian de la iglesia, Uma y Harry la llevaron a su castillo y ahi se quedo. Semanas despues... —¿Como esta?. —La rechazaste, ¿como quieres que este?. No ha dejado de llorar, no diseña, no se maquilla, nada. —¿Estan yendo a verla?. —Si, Uma, Harry, Jay, Audrey y yo. —¿Puedo ir a verla?. —Supongo. Pero no la lastimes. Mal asintio, camino hasta la casa de Evie, entro y subio a su cuarto, la vio dormida así que entro despacio y se sento a su lado. —¿Uma? —No. —¿Mal?— Preguntó con los ojos rojos e hinchados de tanto llorar. —Sí. —¿Que haces aquí?. —Evie yo, no quise tratarte así. Es que yo... —Estas enamorada de Ben, lo sé, y lo entiendo. —Evie, podemos seguir siendo amigas. —No Mal, no podemos. Porque yo te amo. —Evie yo no quiero perderte. Evie la besó, Mal se dejo llevar y le siguió el beso. —¿Eso fue un sí?. —Esta bien tu ganas.
