Eres perfecto para mí (Completa)

La apertura

—Que pasa Sakura? Te conozco desde los 9 años, qué pasa?— rompió el silencio el mayor, silencio que había durado 4 horas desde la partida de Konoha —sabes que puedes contar conmigo—

—No es nada sensei—

—Kakashi— interrumpió

—Gomen, no es nada Kakashi— hablo cabizbaja

Kakashi paro en seco en la rama de un árbol —que sucede— preguntó confusa la pelirosa justo cuando Kakashi la tomaba por la muñeca y la postraba contra el frondoso árbol, demasiado cerca cabe decir

—Me crees idiota, sakura-Chan?— preguntó divertido el mayor

La chica sólo se limitó a sonrojarse con la respiración agitada

—Me duele verte así, ya te lo dije, eres importante para todos, para mí— soltó

—No es nada Kakashi— hablo viendo hacia otra parte

—Bien— el peliplata aflojo su agarre y se dispuso marchar

Con el corazón agitado y un leve presentimiento de que tenía la mirada pegada de su sensei en su retaguardia
Prosiguieron en silencio hasta llegar a las puertas del país de la Catarata

—Bienvenidos!!!!— hablo un castaño de ojos claros, —nos alegra tenerlos acá señor y señora Hatake—

—Are?— comentó la pelirosa con los ojos abiertos de par en par

—Hai, hai, un honor estar en este país—comento el peliplata

Sakura seguía anonadada, si bien sabía que debía hacer lo necesario para que la misión se llevara a cabo, jamás en su corta vida pensó hacerse pasar por la esposa de alguien, y menos con su sensei

—Vamos mi amada esposa— la saco de sus pensamientos el peliplata —nos darán la habitación—

Asintió esta vez la señora Hatake con un leve sonrojo

El recorrido fue ameno, por parte de los habitantes del país, más no para la feliz pareja de recién enterados que estaban casados, pues a pesar de ser unos profesionales en misiones, la vida amorosa de cada uno de ellos estaba envuelta en papel aluminio y botada en lo más profundo de sus sótanos. Jamás tuvieron parejas, formales para Kakashi

—Pero que hermosa pareja hacen, noooombre y su desendencia será espectacular, me pregunto si sus hijos serán de cabellos rosa o de cabellos plata— se preguntaba el castaño mirando a ambos

Sakura cambiaba de colores, desde el blanco hasta el rojo tomate, por su parte Kakashi sólo reía nervioso y agradecía y kami y a todas las deidades en turno el llevar puesta su máscara para no evidenciar su notable sonrojo

–Bien, llegamos, esta será su alcoba, por favor no rompan nada. Si saben a lo que me refiero eh?— mencionó el de ojos claros pícaramente mientras codeaba a Kakashi y le guiñaba un ojo a Sakura

—Trataremos— dijo Kakashi mientras reía y se rascaba la nuca

Sakura por otro lado no había dejado el sonrojo desde su bienvenida al lugar

Ya dentro y solos...

—No me importaría tomar una ducha con mi esposa— habló Kakashi haciendo que Sakura saliera de sus pensamientos y sonrojandola mas

—Baka!— gritó Sakura en su máximo nivel de sonrojo

—hai, hai, iré yo primero—mencionó el mayor