Eres perfecto para mí (Completa)

Raíz

—Tu esposa?

—Sakura... yo

—No te acerques... por qué no lo dijiste antes?

—....

—Sakura, creímos que habías perdido la memo....

—No quiero escuchar nada!!!! Yo no puedo estar casada con alguien como él!!! Es... es... es mucho mayor que yo!!!— gritó con repudio en su mirada —Yo amo a Sasuke-kun, siempre he estado enamorada de él. Y Toma, esto no me pertenece—

—Es tuyo Sakura— fingió una sonrisa

—No soy tu esposa, no quiero serlo — tenía razón, pues la boda nunca se llevó a cabo.

Dio media vuelta dispuesta a marcharse, ya en la puerta, lo vió. Quizás por última vez, y sintió algo, algo que no entendía, porque le dolían a ella también esas palabras? Porque tenía una sensación de que se arrepentiría por el resto de su vida? No lo sabía, pero no dio marcha atrás. Le arrojó el anillo y salió de la oficina De la Hokage. Dejando a un hombre con el corazón y el orgullo hecho pedazos

—Tsunade-sama... aún sigue en pie la oferta de regresar a ser ninja—

—Kakashi... por- por supuesto.

—Bien. Me tomaré la libertad yo mismo de escoger mi próxima misión

—Que harás Hatake!— exigió la rubia

—Asesinar a Sasuke Uchiha— respondió activando su Mangekyo Sharingan desapareciendo en una nube de humo y hojas

Ambos sannin sonrieron, no les gustaba la idea de matarlo, pero si de hacerlo pagar por el dolor causado y recuperar a su mujer.

Sabía donde buscarla, la conocía mejor que nadie, se dirigió a su casa y la encontró. Pero no estaba sola.

—Sí Sasuke-kun! Me iré contigo

—No lo permitiré!— salió de donde estaba oculto

—Oh, eres tú, aún tienes las agallas de venir sabiendo que me eligió a mí — se burló. —Pero dime Kakashi. Que harás si ella es quien decidió irse conmigo.

—Matarte..... ¡¡¡¡RAIKIRI!!!

El Uchiha falló, quiso escapar de aquel impacto, pero el peliplata fue más rápido y le atravesó el brazo izquierdo dejándolo sin el.

—AAAAHHH!! Maldito!— alegó el pelinegro — No te quedes estorbando ahí Sakura! Haz algo— le gritó

Por inercia la chica concentró chakra en su palma derecha y comenzó a parar el sangrado... pero como? Cómo conocía ella esas habilidades? Es más, como las dominaba? No entendía, pero una corazonada le decía que lo estaba haciendo todo mal y paró

—Kakashi!

—Sakura...

—Me amas?— preguntó sin gesto en el rostro

—Más que a mi vida— aseguró roto

—Bien, basta entonces. Déjanos ir. Es mi decisión. Si me amas... déjame ir