Eres perfecto para mí (Completa)

Dolor

Kakashi había llegado a casa, no había rastro de Sakura de pronto supo que algo no estaba bien y salió en busca de su mujer.

—Toc, toc, toc, toc — sonaba la puerta de la casa Yamanaka con insistencia

—Quien se atreve a tocar la puerta de esa manera a esta hora, ya verá! Uh? Kakashi-sensei

—Ino... Sakura, sigue aquí?— preguntó temeroso

La rubia lo miro horrorizada, pues hacia 3 horas que Sakura había dejado su casa. Kakashi escuchó atentamente lo que su amiga le decía, al terminar dio las gracias y se marchó.

—Kakashi-sensei! Espere— lo alcanzó la rubia

—Tienes idea de donde puede estar?— la rubia asintió —Lo averigüe. Está en el hospital

—El hospital pensó lo sabia! Sabía que algo pasaría, él nunca quiso dejarla ir sola, él nunca quiso tener una fiesta de despedida, él solo quería pasar la última noche de soltero con la mujer que amaba, pero esa dulce sonrisa y esa hermosa mirada color jade lo habían convencido de lo contrario.

—Kakashi— habló un pelinegro

—Shikaku-san. Donde está Sakura

—Sé que debes estar preocupado por ella en este momento, pero necesito que veas a otra persona primero.

Kakashi no entendía, el quería ver a su amada pero lo estaba privando de hacerlo porque debía ver a alguien o algo más importante, pero que podía ser más importante que su Sakura?

—Dice llamarse Juugo, lo encontramos en el terreno en el que Sakura, aseguramos tuvo un duro enfrentamiento— habló entrando al cuarto de interrogación con Kakashi siguiéndolo. El peliplata no lo podía creer, su Sakura había tenido una pelea de la cual había salido gravemente lastimada, pues se encontraba en coma.

—El mal nacido no ha confesado nada, los métodos de interrogación de Ibiki no dieron resultado. Además Inoichi intentó entrar a su mente, pero nada, él, es como si no tuviera memoria, como si no tuviera mente, como si no tuviera alma.

—Eso o un jutsu de protección secreto— interrumpió el peliplata

—Lo consideramos, pero al investigarlo no encontramos nada— aseguró el patriarca Yamanaka.

—Genjutsu tal vez— insistió Kakashi

Todos guardaron silencio, era posible. Pero quien?

—Necesito ver a Sakura — habló con la voz quebrada —Luego de verla regresaré y los ayudaré con la investigación— aseguró

—Hai— asintieron los mayores a él y se dirigió apresurado a la habitación 107 donde se encontraba ella

—Kakashi-san Gomene, pero no puede pasar, e..está muy delicada y no puede recibir visitas— lo detuvo una dulce y temerosa enfermera

—Claro que puede! Es más iremos, ven. Kakashi— se dirigió a ellos de forma autoritaria la Hokage de la aldea

—H..hai. Summimasen

Entraron a la habitación, decididos a enfrentarse a lo que fuera. Sabían que estaba en coma, pero no se imaginaban lo grave de la situación.

La encontraron ahí, tendida en esa cama de hospital, sujetándose a la vida a través de esos benditos aparatos que hacían que su corazón siguiera latiendo, sus ojos vendados, los dedos de su mano derecha quebrados al igual que dos costillas, el tobillo y la rodilla izquierda fracturada, su piel estaba pálida sin color, su labio inferior tenía señal de sangre, y en su cabeza... 3 cables la atravesaban para conectar el cráneo que había presentado una fisura debido al impacto de su cabeza contra el árbol.