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Año nuevo estaba cerca, el tiempo ha pasado tan rápido. Mis padres estuvieron hablando de boda con Tian, realmente siento que me quieren ver casada pronto.
Sería lindo casarse pero no lo sé, no estoy segura de dar ese paso y Tian tampoco. Ambos hemos vivido como hermanos en un departamento, lo sé, RARO. Ambos nos queremos mucho porque siempre hemos estado juntos, pero casarnos es un paso muy grande y no hay vuelta atrás. Al menos para él y yo, no lo hay.




-Cariño, ¿tu quieres casarte?- dijo Tian quien estaba en mi habitación sentado en una esquina de mi cama.

-¿Tu quieres?-

-Siempre he sido sincero contigo Sun, desde que te conocí he sido muy feliz y he vivido cosas maravillosas. Pero...-

-Pero no puedes dejarla ir, ¿verdad?-

-Sun, hasta que ella no vuelva y me explique el porqué de su desaparición no podré estar completo para ti-

-Lo sé Tian, y te comprendo- dije aliviada, Tian y yo siempre hemos tenido charlas así, creo que es la razón por la cual nunca hemos peleado o discutido. Nos entendemos a la perfección y siempre he creído que eso no es normal en una pareja.

-Gracias por eso- se acercó a mí y me abrazó fuerte

-Tian, te quiero mucho y te amo pero si ella vuelve pronto, ¿qué pasará con nosotros?

Te amo como una hermana ama a su hermano.

-La he buscado por 4 años, y ni un rastro de ella, sé que pronto esta búsqueda acabará y tu y yo podremos estar completos.- respondió

-Yo.. yo no estoy segura- dije mientras una lágrima corría por mi mejilla























Todos estábamos acampando cerca al río Han, los fuegos artificiales sonarían en 5 minutos.

Tian y yo estábamos sentados viendo el río. Mientras que los demás estaban asando carne.

-Un año más- dijo Tian mirando el paisaje nocturno

-Un año nuevo- me eché sobre el grass, se podían ver algunas estrellas. Los sonidos de los grillos nos acompañaban

-Este nuevo año seamos felices, muy felices- dijo un Tian que se recostó a mi lado.

-¿Lo prometes?- Saqué mi dedo meñique para hacer la Pinky promise

-Lo prometo -asintió con su bella sonrisa, su dedo y el mío permanecieron juntos. Una llamada interrumpió el momento.

Tian con señas me dijo que ya volvía. Se puso en pie y se alejó mientras hablaba por teléfono.

Me senté y seguí apreciando el horizonte, ví mi reloj. Faltaba un minuto, tenía que ir con mis amigos. Me puse de pie y caminé en dirección a ellos sin fijarme que Soobin estaba parado atrás de mi, mirándome con sus bellos ojos.

-Soobin- dije y vapor salió de mi boca

Él se acercó rápidamente y me tomó entre sus fuertes brazos propiciando un abrazo muy cálido. Estaba sollozando.

-Hey, no llores- dije intentando consolarlo

Alzó la mirada y esta chocó con la mía, sus ojos eran como cristales y brillaban, brillaban mucho, su nariz estaba roja y su piel pálida.
Sus manos frías tocaron mi cara, sentí un escalofrío debido a la frialdad de estas.
Mi corazón latía a mil, no sabía como escapar, no podía, necesitaba quedarme así. Tal vez, para siempre.

-Nunca dejé de amarte- esas palabras salieron de sus labios rojos.

Los centímetros que nos separaban se redujeron en un instante, su nariz y la mía chocaron suavemente. Cerré los ojos cuando sentí sus labios rozar los míos.

Set, dul, hana
¡Año nuevo!

Desearía que esto fuera eterno.












-Hola, ¿qué paso?-

-Señor Tian, la encontramos-

-¿La encontraron? ¿Dónde?-

-Está en su país con su familia, celebrando fiestas-

-¿Se encuentra bien? ¿No tiene algún daño?-

-Al parecer no, llegó hace poco. Su familia fue a recibirla según me informaron-

-Gracias, lo más pronto posible estaré allá- corté la llamada de inmediato.

Los fuegos artificiales empezaron, ya era hora, mi deseo se cumplió. Ella regresó, pronto solucionaré esto.
Corrí hacia donde había dejado a Sun, y ahí estaba ella abrazando a Soobin.

Nunca se dejaron de amar

































S E R E N D I P I A  [Choi Soobin/ editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora