6- cupido vengador y velocidad

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Le mando un mensaje a Fleur para que venga a buscarme en el auto de su madre: Tania, quien es una mujer muy tierna pero su auto es una reliquia para ella

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Le mando un mensaje a Fleur para que venga a buscarme en el auto de su madre: Tania, quien es una mujer muy tierna pero su auto es una reliquia para ella. Después de todo, fue mi amiga quien aceptó la salida y yo no tengo medio de transporte; papá y Mary salieron a un club de gente mayor para revivir las llamas de su amor.

Busco ropa entre mis valijas que a pesar de llevar varios días en esta casa, no las he terminado de desempacar. Me pongo un suéter de cachemira ajustado blanco porque el día está refrescando y un pantalón de lino verde con lazo que es lo único que me gusta usar con botas.

Decido que es hora de darle forma a mi cabello haciéndome las ondas con los dedos y listo. Me aparto del espejo varias veces mientras me repito lo bien que me veo, que no me guste la visibilidad social no quiere decir que tenga problemas con mi cuerpo.

Cinco minutos después, en la recepción me avisan que alguien me está buscando. Bajo el ascensor fijándome que no tenga nada entre los dientes con la cámara del móvil y salgo del edificio. Las veces que intenté aprender a manejar respetaba los límites de seguridad, pero Fleur no tiene límites en cuanto al acelerador.

Mi amiga lleva su pelo recogido en una trenza, con el cerquillo pelinegro en sus ojos. Unos aretes penden de sus orejas. Lápiz de labio rosa y un delineado para que no luzcan tan finos. Hasta se puso uno de sus encantadores vestidos floreados.

- ¿Cómo hiciste para maquillarte?- pregunto entrando al coche- la verdad es que a mi apenas me dio para bañarme.

Mentira, solo no quiero ir tan arreglada, no sé qué es lo que amerita una salida con Oliver y aunque solo sea eso; me pone un tantito inquieta.

- Quiero que Jouna vea lo que se perdió.- empiezo a pensar que está algo obsesionada, tal vez deba presentarle a otros chicos- ¿Piensas que es mucho?

- Estás hermosa amiga.- le digo y su expresión preocupada se desvanece. Fleur se preocupa mucho por lo que dicen de su apariencia.

No obstante ella me inspecciona con ojo crítico.

- ¿Qué?

- Cands se que te gusta la ropa formal pero necesitas verte más viva.

Enarco las cejas mientras ella mete la mano en su bolso y saca un lápiz labial color cereza.

- Júrame que no tienes herpes y te presto mi labial.

- ¡Fleur! Arranca de una vez y dame esa cosa.

Quince minutos más tarde, Fleur conduce por el camino de acceso al parque bajo el atardecer que se pone poco a poco y yo ya luzco unos bonitos labios de cereza ¡sin herpes!
Dejamos el coche en la zona más apartada del estacionamiento, para poder salir sin problemas.

El parque se encuentra casi saliendo de la ciudad, sobre una especie de colina, lo que hace que el viento sople con mayor fuerza y arrastre palomitas y envoltorios entre los pies de la gente. Fleur hace una mueca de reproche mientras nos dirigimos a la taquilla. Hace tiempo que no venía a este lugar. El Magic es una atracción durante las vacaciones de verano, con sus instalaciones recreativas, conciertos, puestos de videncia y la infaltable recreación del "puesto de los besos".

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