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Sakura no sabía que hacer.

Cada semana desde la llegada de ese vecino, "el falso príncipe" según ella, habían sido semanas de burlas hacia su persona. 

¿Por qué Sasuke no podía ser un poco caballeroso aunque sea?. 

Porque le agradaba, era simpático y muy lindo, pero sus groserías llegaban a irritarla como a nadie.

Pero había lo subestimado, Uchiha siempre podía ir aún más lejos de lo que ella creía. 

Como en ese festival del pueblo en primavera, donde estaban todos reunidos para festejar el arrivo de esta. 

Era todo sumamente hermoso, ella se había hecho cargo de todo aquello que tuviese que ver con la pastelería de la familia y, obviamente, había tenido a Sasuke como pulga detrás suyo todo el maldito día. 

El azabache aprovechaba cada segundo a su alcance para decirle alguna tontería, incluso pedirle un beso, así como así frente a todos. 

Era evidente que estaba frustrado porque Sakura le negaba una y otra vez ese privilegio. Y ese fue un error. 

Sasuke estaba junto a sus padres en el escenario improvisado de la casa de los Hyuga. Mientras ellos agradecían la hospitalidad y el buen trato hacia su familia, Sasuke miraba a Sakura con los ojos entrecerrados y un mohín en sus labios muy evidente. 

Sakura ya conocía esa cara. El azabache estaba ideando algo. 

Cuando le tocó a Sakura llevarle la canasta de chocolates a la familia, Sasuke se levantó y se acercó al micrófono con una sonrisa, tendiendo la mano para agarrarla. 

-¿Sólo chocolate? -Inquirió Sasuke, dándole la canasta a sus padres. 

-Si -Obvió la peli-rosa, queriendo escapar de la mirada de todos a su alrededor. Ya era más que conocida la historia entre ellos dos. 

Sasuke sonrió de lado, poniéndose el micrófono aún más cerca. 

-Que pena ser alérgico al chocolate... 

Ni se te ocurra, pensó Sakura.

-Porque te comería enterita, bombón. 

𝐋𝐎𝐒 𝐏𝐈𝐑𝐎𝐏𝐎𝐒 𝐃𝐄 𝐒𝐀𝐒𝐔𝐊𝐄 ❝ ❞ ˢᵃˢᵘˢᵃᵏᵘDonde viven las historias. Descúbrelo ahora