Todos entraron juntos, serios y tensos al salón de actos, donde se realizarían dos exámenes al día, de una duración de tres horas cada examen, con un descanso entre los dos de una hora para desayunar para luego volver a la acción. Como ya habían terminado las clases normales, no había nadie más que los preuniversitarios, así que el ambiente general, aunque tenso por parte de los alumnos, era también bastante tranquilo, ya que nadie estaba por decir nada que molestara a los demás, que estaban tremendamente concentrados en acabar lo mejor posible los duros días que se avecinaban.
Lo único que se oía en la sala era el reloj, el constante tic-tac que anunciaba de forma parsimoniosa el paso del tiempo. Sabían que, cuando llegara a en punto, su historia cambiaría para siempre, ya no serían los alumnos de un instituto superior, sino futuros universitarios que luchaban por mantener su sueño de estudiar lo que siempre soñaron.
Todos se sentaron donde les indicaron y vieron el examen sobre la mesa. Nadie dio la vuelta al papel para poder verlo ya que les habían recalcado en muchas ocasiones que bajo ningún concepto vieran el examen antes de que el profesor se lo dijera. Un profesor, que imponía respeto debido a su corpulencia y a su actitud, se incorporó y se colocó delante de su escritorio, cosa que hizo que los alumnos se pusieran aún más nerviosos.
— Buenos días, soy el profesor Ibiki Morino y seré el examinador durante todo el día de hoy, esta mañana haremos el examen de Biología, y a la tarde será el de Química. Espero que estéis preparados para los días que se avecinan. Si creéis que habéis estado estresados hasta ahora... — emitió una risa ligera y con bastante sorna, preocupando a los alumnos. — No sabéis lo que os espera en la universidad... Ya conocéis todo sobre los exámenes, así que no hace falta que os lo repita una vez más.
Sonó una ligera alarma que indicaba que ya eran las ocho en punto: la hora en la que comenzaba todo.
— Podéis dar la vuelta al papel.
Todos procedieron y comenzaron el tintineo de los lápices escribiendo las respuestas a las preguntas. Naruto estaba tan tenso que se había quedado absolutamente paralizado, solo dio la vuelta al examen y se quedó mirándolo. Comenzó a respirar lentamente con el fin de encontrar la relajación que le estaba faltando en ese momento, estaba tan ansioso por acabar todo cuanto antes que el proceso se le estaba haciendo demasiado largo. Cerró los ojos para que el método fuese más efectivo.
Pudo ver en su momento de relajación a Hinata sonriéndole, dándole la mano y diciéndole que estaba esperando por él y que no se rindiera. Esta aparición sorpresiva en su mente le dio al rubio la energía necesaria para tranquilizarse y proceder. Una vez se calmó, procedió a leer las preguntas del test, cosa que siempre hacía para hacerse una idea de cuál era la dificultad media. Era un examen complejo, pero pudo encontrar cuestiones de una dificultad algo menor, así que empezó por esas para tener luego más tiempo para plantearse las más rebuscadas y que entrañan más dificultad.
Su estrategia era básica, pero efectiva, y le había valido un buen puñado de notas altas. Aunque, con todo, todavía contaba con recuerdos de lo que había estudiado y partía con esa ventaja adicional. Se había preparado a conciencia los exámenes y tenía la experiencia. No podía fallar.
El Uzumaki fue contestando las respuestas del examen con seguridad y de forma concisa y clara, sabiendo qué hacer con claridad en cada instante. Se dio el lujo de levantar momentáneamente la vista del examen para mirar la hora, viendo que ya había pasado la mitad del tiempo y él ya había contestado más de la mitad del examen. Miró a su alrededor, buscando a su amada. La localizó dos filas por delante, en uno de los extremos, viendo lo concentrada que estaba en responder correctamente, lo que le dio muchas fuerzas para seguir adelante. Esa chica tenía que ser suya cuanto antes.
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Segunda Oportunidad
FanfictionNaruto e Hinata eran muy felices y tenían muchos planes para el futuro, pero a veces el destino no entiende de futuro y de felicidad. Hinata sufre un accidente que la deja postrada en una cama y con muy pocas posibilidades de despertar. Naruto se en...