Capitulo Dos.

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Al regresar a casa todo está tranquilo y a oscuras, no me dejaron salir del hospital hasta las 8:45 que era la hora de comer de mamá, hace ya un tiempo que no me dice nada al respecto sobre mi comportamiento pero ahí va, ya está empezando.

-¿Hasta cuándo seguirás con esto Jonathan?-Me dice. -¿Por qué lo haces?- Y sus ojos se empiezan a llenar de lágrimas, oh no.

-Lo siento mamá...- y es lo único que digo antes de irme a mi habitación.

Me despierta un leve golpe en mi puerta, esta Jase. Le digo que entre y se acuesta al lado de mí.

Al amanecer estamos desparramados en mi cama me levanto y voy al baño, después a la cocina para preparar el desayuno para ambos, falta cinco días para empezar clases, e reprobado así que cursare segundo año, otra vez, en una nueva escuela, que está aún más lejos.

Termine el desayuno y ahora estamos viendo la televisión, Bob Esponja. Mi hermano está más que entretenido, ciento que en cualquier momento se le caerá la baba. Tiene el pelo chino así que empiezo a aventarle pedacitos de comida en el pelo. No se da cuenta y le a viento uno de los cojines, voltea a verme con el ceño fruncido y se balancea sobre mí, empiezo a jugar y de un momento a otro está muerto a carcajadas por mis cosquillas.

-No... No… Para, para. Me are--¡Pipi! - Y un líquido empieza a correr desde sus pantalones, yo paro y empiezo a reír. Se me queda viendo- No te rías…- y empieza a llorar.

-Vamos, vamos, no llores. Vamos a la bañera.

-Vale.- me dice ya un poco más calmado.

Y así son todos los días en casa, tranquilos, normales, Ojala también lo fueran haya afuera. Con tan solo pensar que faltan cinco días para entrar... No...

Yosse x.

Desorientado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora