Desorientado.

Capitulo Diez.

Y justo cuando nuestros labios estaban rozando entra Teodora, la tía de Logan.

—Hola chicos traaaaaaaje–Creo que me duchare primero...

Yo con las mejillas llenas de un rojo carmín hasta las orejas me volteé a seguir con los trastes mientras Logan se separaba de mi con pesadez... ¿¡Que estaba pasando!? ¿¡Porque no me separe!? Aun siento sus labios carnosos rozando los míos... Y como la energía  corría por mi cuerpo... ¡Fue estupendo! Jamás en mi vida había sentido algo así por alguien... Pero más importante... ¿Logan que no es hetero...?

El inesperado lunes me llego de sorpresa, no sabía qué hacer, Logan llegaría a casa y con lo que ocurrió el sábado... No creo que sea un momento cómodo. Hice lo de costumbre, ducharme, alistarnos a Jase y a mí y desayunar. Llegue a la escuela y por un momento extrañe a Logan, no había llegado y eso no me pareció tan extraño, vamos... Intento besarme siendo ¿heterosexual? Supongo que si lo es ¿no? Pero creo que dentro de mi deseaba que lo hiciera y que llegara a casa... Mas por Jase. Sí.

Entre al aula y la primera sesión de clases se pasó demasiado aburrida. Llegue a con Teodora por un repentino dolor de cabeza.

—Hola Teodora ¿Como esta?

—Bien Jonathan... ¿Tu? ¿A qué se debe tu visita aquí?

—Me duele un poco la cabeza, nada grabe, pero quisiera que me diera alguna pastilla... Además de que no quería estar en clases.- Esto último lo dije un poco apenado. Un poco.

—Está bien, bien... Puedes quedarte un momento aquí si quieres.

—Gracias.- Esto lo dije más apenado aun. No recordaba que ella nos había pillado a Logan y a mí en la cocina ¡Dios! ¿¡Cómo puedo ser tan tonto!?

—Logan está enfermo hoy. Está en casa... Por si te lo preguntabas...- Dijo esto y salió del lugar. Me dejo un tanto... Pensativo eso. ¿Que tenía Logan? ¿Estaría muy mal? ¿Necesitaría alguien en casa? Porque según yo solo viven él y Teodora en esa casa...

De un momento a otro tome la decisión de visitar a Logan. Pero ahora que estaba frente a su casa estaba un poco... Apenado. Ya me estaba arrepintiendo de haber tocado la puerta de su casa, quería salir corriendo de ahí, además de que ya estaban tardando en abrir.

Estaba a punto de largarme de ahí cuando un Logan a punto de desmayarse abrió la puesta cayendo instantáneamente al suelo.

—¡Logan! Rayos. Estúpido. Estúpido yo.- ¿Como se me ocurre llamar a la puerta cuando se que esta enfermo?¿Como se le ocurre a Teodora dejar a Logan aquí solo?

Ya habían pasado cinco horas, Logan se ve hermoso mientras duerme, como sus pestañas rosan sus pómulos con los ojos cerrados, como respira tranquilamente tan relajado y sus labios rosas entre abiertos... Esta un poco sonrosado por la calentura y eso hace que se mire mas que tierno. Yo le entoy poniendo constantemente el trapo húmedo, lo busque en internet y dice que sirve para disminuir esta.

—Hola...- Me dice con apenas aliento y su voz ronca.

—Hola.- Le digo sonriendo.- Vuelve a dormir Logan.

—Ven conmigo.- Me dice y yo me pongo de un color carmesí.

—Claro que no estas enfermo.

—No importa, ven conmigo. No te alejes.- Me dijo casi rogando. También se que es por la calentura.

—No, Logan y tampoco me alejaré, aquí estaré para cuidarte.- Pero ya no me estaba escuchado, se había vuelto a dormir.- Tonto.