Los días pasaban en un febril intento de asimilar los rayos de sol, que rebotaban en las pieles y se dejaban conducir por los ojos de quienes tenían como pasatiempo el observar. Costaba creer que apenas era primavera, que recién estaba terminando agosto y los vestigios del invierno eran simplemente los anuncios tardíos en la televisión y la radio. Pero el candor de las tardes y mediodías, el metro atiborrado de gente hasta el techo mismo, los quejumbrosos gemidos de alumnos y alumnas que querían deshacerse luego de sus camisas de manga larga y pantalones de buzo grueso... Todo indicaba la llegada de la nueva estación del año, que iba realmente pisoteada por el verano a éstas alturas de la vida. Incluso había un elemento más que demostraba la presencia de la estación del amor, del florecer, de los gorjeos festivales, de los susurros y suspiros, y éste elemento se daba a notar especialmente en los colegios;
Era la primera clase del día en el horario, un jueves calmo, a finales de agosto y aún con la sensación de las vacaciones de invierno en las cabezas de los alumnos, sobre todo al cuarto medio... porque estábamos chatos de tanto estudiar cosas que no nos interesaban. Entraron a la sala los profesores de Educación Física, uno grande y macizo con una polera de marca gris y pantalones de buzo ligeros, y la otra con un conjunto de deporte y una expresión agresiva en su rostro de piel delgada. Los veinticuatro alumnos del cuarto medio B nos levantamos y dijimos al unísono 'buenos días, profesores' para recibir el saludo de vuelta y, así, sentarnos en nuestros lugares correspondientes.
— ¡Éste año ya saben lo que tienen que hacer! — exclamó, entusiasta, la profesora. El profesor se sentó en el escritorio amplio y abrió el libro de clases para firmarlo, asintiendo con la cabeza y teniendo los ojos fijos en el papel, obviamente sólo prestando atención a la entonación de la voz de su compañera de trabajo.— Cuartos medios unidos para hacer la... ¡fantasía de cueca!
— Ay se me olvidó. — susurró la Viviana, la presidenta del curso que se sentaba al frente de todos y ocupaba unos lentes gigantes, que le obligaban a apartarse el flequillo rubio de su rostro pecoso. Inmediatamente seguido al susurro, la clase se llenó de quejas y reclamos, el Tulio delante mío se puso a putear a los cuartos medios de la primera generación que se les ocurrió hacer ésa wea. Nosotros intentábamos copiarlos éste año.
— Viejos culiaos...
— Yo pensé que íbamos a bailar pascuense... ¡Nunca he bailado pascuense, Brian!
— Profe, ¿no podemos hacer otra cosa?
— A ver, a ver... chicos. — llamó la atención el profesor, que sin levantarse del escritorio hizo callar a mis compañeros de una sola. Yo, indiferente a todo, intentaba dibujar alguna cosa en mi cuaderno, decorando los apuntes de días anteriores o preparando mis lápices para ése día.— Ésto se hace sí o sí. Está en el currículum, el ministerio pide hacer algo creativo para los cuartos medios de todo Chile y ésta es la propuesta que dieron los chiquillos de la primera generación. Ya sé que les da lata porque siempre es lo mismo, pero le pueden poner empeño e innovar dentro del marco de lo que piden. ¿Sí, Genoveva?
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PRÉSTAME TU GLOSS 𐙚 ユリ . FEM GGUKMIN.
Fanfiction« No entiendo tus nervios, corazón. Sólo somos tú y yo, ¿qué puede salir mal? ». Jimin es una chica cualquiera. Jungah... no tanto. ⋆.˚ 🍭 ᝰ.ᐟ No copiar ni plagiar. Escrito con chilenismos. Jimin y Jeongguk como mujeres. © azucarestelar 2020.