Habían pasado ya un mes y dos semanas, el viernes era la graduación, es jueves, si, mañana me gradúo.
Kio no había venido a la escuela, en todo este tiempo, pero sabía que estaba haciendo clases en línea.
Olivia regreso hace dos semanas, me contó que termino con Kio, no éramos uy, amigas de toda la vida, simplemente ella había dejado de ser una perra, resulta que Olivia no podía seguir viviendo con miedo y por su bien, termino con él.
La puerta sonó sacándome de mis pensamientos, siendo abierta por mi hermano.
- Debes comenzar a arreglarte- dijo y yo asentí.
No había conseguido dormir mucho, debido a mi nerviosismo, como había sido la mejor de la generación, yo tenía que dar el discurso de despedida.
Me levante de la cama y me di una ducha fría, salí y me saqué el cabello y después comencé a maquillarme, una vez termine, me hice mi peinado y después me puse mi vestido:
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Me puse mi toga negra y mi birrete del mismo color, para después tomar mi celular y bajar.
Mi madre al vernos a Jason y a mi con nuestra toga, comenzó a llorar y nos tomó una foto.
Salimos de la casa y nos dirigimos a la escuela, la cual al llegar, estaba repleta de autos.
Cuando bajamos Jason y yo nos dirigimos al gimnasio y mi familia se fue a el campo de fútbol.
En el gimnasio nos dijeron como nos sentaríamos y el orden.
Cuando íbamos saliendo alguien tocó mi hombro y al voltear me encontré con Griffin, Jaden y Anthony.
Los tres me abrazaron y me desearon suerte con el discurso.
Cuando llegó la hora, los chicos y yo salimos y nos sentamos.
La ceremonia comenzó y el director comenzó a hablar.
- .....antes de comenzar a entregar los certificados, nos gustaría que la mejor alumna de la generación, le diera unas palabras, damas y caballero, reciban con un fuerte aplauso a Alexis Morgan- dijo y yo subí las escaleras para subir a el escenario.
Tenía tarjetas.
Estaba temblando, me acerqué a él micrófono y lo golpeé unas cuantas veces, haciendo que este soltara un chillón.
- Lo siento- dije y busqué los ojos de mi hermano entre la multitud, él me miró y asintió, soltando un "tu puedes" con mímica- Bueno, se supone que estoy aquí, para darles un discurso emotivo, pero- dije y entonces hice contacto visual con él, quedándome congelada.
Kio estaba aquí, en la última fila de alumnos del lado en el que yo estaba sentada, con Griffin y sus amigos, sonrió y yo salí de mi trance.
- Todos dicen que el ultimo año de preparatoria, es igual que todos los años solo que con más presión- dije y reí irónica- Si bueno, eso, es totalmente mentira, al menos en mi caso, lo fue, mi ultimo año de preparatoria, fue un caos, me enamoré- dije mientras veía a Kio- Y rompieron mi corazón, pero, de no haber sido por eso, no habría conocido a personas maravillosas- dije mientras veía a Quinton, Ryan, Griffin, Josh, Anthony y Jaden- No habría conectado aún más con las personas que ya tenia- dije mientras veía a mis mejores amigos- Y saben, no se acostumbren a la tranquilidad, denle ese toque de aventura a su vida, les aseguro que no se arrepentirán, busquen a personas que pongan su mundo de cabeza, no que lo acomoden, luchen por sus sueños y por las personas que aman no crean esa mierda de " si lo amas, déjala ir" no, si los aman, luchen por ellos, vivan y dejen vivir a las personas, y sobre todo, no se rindan, y jamás pierdan la esperanza- dije y todos aplaudieron.
Baje del escenario.
Comenzaron a dar los certificados y al terminar, el momento que había estado esperando llegó.
- Muy bien generación 2018-2020, ustedes son declarados graduados- dijo el director y todos lanzamos nuestros birretes al aire.
La ceremonia se dio por terminada y todos nos fuimos a el lugar en donde sería el baile.
Al llegar, esta vez si se habían lucido con la decoración, de verdad.
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Al llegar la fiesta comenzó y todos, se fueron a bailar.
Todos tenían pareja para el baile, menos yo, me lo habían propuesto, pero no quise.
Fui por un poco de ponche, con la esperanza de que ya le hubieran puesto alcohol.
Y o vaya que lo hicieron, incluso creo que se les fue la mano.
Me senté en mi mesa y me puse revisar mi teléfono.
Entonces me llegó un mensaje.
Desconocido: Ven afuera.
El mensaje me confundió, pero como la persona estupida que soy, salí.
No había nadie, busqué con mi mirada y vi a una persona en el fondo del estacionamiento, en la esquina mas lejana y oscura, ahí fue donde lo vi, con mucho cuidado camine hacia la persona.
- ¿Kio?- dije y él sonrió.
- Hola- dijo y lo observé, tenía un traje color negro, con una camisa blanca y un moño negro, tenía sus manos metidas en los bolsillos del pantalón, se acercó a mi, ¿tímidamente?.
- ¿Pasa algo?- pregunte y él me miró a los ojos.
- Vuelve conmigo, por favor- dijo y me quede en shock.
- Kio...-.
- Lo se, se que lo arruine todo, se que metí demasiado la pata, pero te amo, y se que no lo parece después de toda la mierda que hice, pero no quiero vivir sin ti, se que probablemente tú ya no me ames, pero no me importa, úsame, juega conmigo, jode mi vida, pero vuelve conmigo, pon mi mundo de cabeza de nuevo, juega conmigo, destrozame, has lo que quieras conmi....- decía pero junté mis labios con los de él.
Él tardó en reaccionar, pero cuando lo hizo, me devolvió el beso con necesidad, puso sus manos en mi cintura y me pego a él, pase mis manos a su cuello profundizando el beso, cuando por falta de aire tuvimos que separarnos, me mordió el labio.
