Friendly Neighborhood | Spider-Man

Primeros Pasos

El ataúd fue llevado con delicadeza por todos los presentes del funeral. Al posicionarlo, la caja descendió hacia el fondo del hoyo en la tierra. El padre Romita citaba mientras leía su biblia, dando las últimas oraciones que el alma de Benjamin Parker necesitaría en el sendero de la paz.

La gente susurraba entre sí; sonaba como una brisa en la hierba, pero el canto de los pájaros era mucho más fuerte.

Peter observó a su tía sollozar a su lado, cubriéndose el rostro con las manos. Gwen se acercó al chico castaño y entrelazó sus manos para consolarlo. Ned estaba mirando sus pies, incapaz de mirar. Harry parecía pálido y sorprendido. Las lágrimas calientes caían de los ojos de Gwen.

Y entonces, sin previo aviso, la terrible verdad se apoderó de Peter, de forma más completa e innegable hasta ahora. Su tío Ben estaba muerto, se había ido...

Apretó su puño con tanta fuerza que los nudillos se le pusieron blancos, pero no puedo evitar que las lágrimas brotaran de sus ojos. Apartó la mirada del ataúd y miró hacia el cielo, hacia las nubes. No hubo ningún despertar de su pesadilla, ningún susurro reconfortante en la oscuridad que le dijera que estaba a salvo, que todo estaba en su imaginación.

Harry había ido al funeral con su padre, Norman Osborn, quien le había dado su sincero pésame y puso una mano en su hombro unos momentos antes de retirarse.

Apreciaba el apoyo que estaba recibiendo de parte de aquellas personas cercanas, no tan cercanas, y desconocidas. Pero nada ni nadie ayudaba al problema psicológico que tenía en ese momento y a su corazón compungido. Todo estaba nublado, al igual que su mente. Sus ojos eran oscuros y sin emociones.

La gente empezaba a irse en un respetuoso silencio. Peter sintió que la mano de su amiga se deslizó de la suya, aunque le hacía falta su apoyo reconfortante, el rostro de Peter seguía inexpresivo.

May se limpió la nariz con un pequeño pañuelo. Mientras las personas se retiraban, ella se había tomado unos momentos de privacidad para despedir entre lágrimas a su amado esposo junto a Peter. Ahora solo se tenían el uno al otro. La mujer con el rostro vidrioso le dio un suave beso en la mejilla antes de seguir cabizbaja el ejemplo de los demás y retirarse lentamente.

El chico necesitaba un minuto a solas; se arrodilló cerca del borde y dejó que una lágrima solitaria corriera por su mejilla enrojecida. Con una mano agarró un puñado de tierra del suelo y con el brazo estirado dejó que la tierra cayera sobre el ataúd.

Nunca se perdonaría lo que pasó, su único consuelo era que tío Ben encontrará la paz que se merece. No habrá un solo día que no lo extrañe con cada gramo de su ser.

Cuando Peter se puso de pie, sacudiéndose el polvo de las rodillas, a unos metros se encontró con los ojos llorosos y abatidos de May Parker.

La única familia que le quedaba.

🕷🕸🕷

Peter lloraba sentado en su cama, acababa de volver del funeral de su tío. Si no hubiera ido a las luchas, si hubiera detenido al ladrón cuando tuvo la oportunidad. Él solo quiso ayudarle, darle consejos para que no se desviara del camino; y lo trataron mal. Lamentaba profundamente que sus últimas palabras hacia Ben fueran con ira. Apretó los puños, mientras que de sus ojos rojos, seguían cayendo gota tras gota.

Unos ligeros golpes en la puerta interrumpieron su llanto silencioso. Volteó y vio a su tía May entrando en la habitación, aún con la ropa del funeral puesta. Tenía los ojos irritados de tanto llorar.

May se sentó lentamente en la cama de Peter, a un lado de él.

— No he podido dejar de pensar... en lo que le dije la última vez. Trataba de decirme algo importante y yo fui grosero con él — su voz se entrecortaba entre oraciones por el llanto.