Hermanastros #1 (TERMINADA)

CAPÍTULO 3: Connor

Al llegar a casa aquel día, dejé mi bolso sobre el sofá, mamá sentada sobre el suelo alfombrado me miró y sonriendo me saludó, la saludé de igual forma. 

-Hija, esto es de Luke, ¿podrías llevarlo a su habitación?

Tomé una pequeña caja, el cual tenía escrito con un lápiz negro el nombre mi hermanastro, con quien compartía habitación. 

Subí las escaleras de dos en dos y al llegar a mi habitación, dejé la caja a un lado de su cama. Él se encontraba con sus audífonos puestos y los ojos cerrados, acostado sobre su cama, la cual estaba a pocos metros de la mía. Suerte que mi habitación era una de las más grandes de mi casa.

Lo ignoré por completo y con el objetivo de relajarme un poco, fui al baño, con ropa limpia en mis manos. Tomé un baño de al rededor veinte minutos, dispuesta a relajarme, últimamente las tensiones se acumulan en cada rincón de mi cuerpo. Apliqué shampoo en mi cabello y tras aclararlo, apliqué una crema hidratante, dejándola por unos minutos, para así lograr tener mi cabello más suave. Es el gran problema de ser rubia, mi cabello es frágil y suele ponerse muy seco si no lo cuido con cremas especiales. 

Me vestí y peiné, apliqué un suave maquillaje en mi rostro, lo suficiente que mamá acepta, ya que según sus palabras "podré maquillar mi rostro como yo quiera cuando tenga la edad suficiente."

Al salir del baño, observé como Luke aún dormía; lucía sereno y tranquilo, casi como un humano normal. Me senté en mi cama, tomando mi celular entre mis manos, dándome cuenta que tenía algunos mensajes de mi mejor amigo, Connor. En todos me preguntaba si estaba viva, el último indicaba que él se encontraba afuera de mi casa, el mensaje había llegado hace dos minutos atrás. 

 Miré por la ventana, donde podía ver como Connor me esperaba, mirando su celular. Sonreí para luego bajar las escaleras de mi casa, y caminar hasta la puerta principal.

***

Estábamos, Connor y yo sentados en mi cama, comiendo comida chatarra que él había traído de su casa, mientras veíamos alguna película al azar. Y aunque, mi mejor amigo insistía en que debíamos bajar el tono de voz, debido a la presencia de Luke a pocos metros de nosotros, mientras dormía, yo no tenía problemas de reír tan fuerte como podía. 

Detestaba a mi hermanastro y si despertaba por mi culpa, me sentiría bastante satisfecha. 

-¿Estás hablándome en serio? -Pregunté entre risas- ¡Mierda, Connor!

Unos gemidos se escucharon y la cama de Luke crujió. Connor y yo nos callamos abruptamente, notando como mi detestable hermanastro abría sus ojos con pereza.

-¿Podrían tú y tu estúpido novio callarse? –Dijo él frotándose los ojos.

Rodé mis ojos, ignorándolo por completo, miré a mi mejor amigo, continuando con nuestra charla.

-En serio Connor, eso fue bastante extraño...

-Lo sé, yo solo quería una tostada –Comentó Connor riendo.

-¡Ustedes son como arena en el trasero!

El castaño se puso de pie en un movimiento rápido y bruto, caminando con rapidez hacia el baño. Cerró la puerta con fuerza, dejándonos a Connor y a mí en silencio. Mi mejor amigo me miró, con una sonrisa en sus labios.

-¿Estúpido novio? –Preguntó Connor susurrando, citando a mi hermanastro.

-No sé que le sucede. Está loco, te lo dije. Sus cambios de humor me hacen pensar que es un bipolar... Ese hombre da miedo, Connor.