Capítulo 8

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Hola a todos buenos días tarde o noche.. Gracias a todos por seguir mi historia. Prometo no decepsionarlas, Disculpen si algunas les molesta mi lenguaje soez pero no me gusta adornar las cosas🍒🤗
Besos a todos.
Greys Ppe.

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Hace una semana que trabajo para Crane Inc. y lo que debía ser el trabajo que impulsaría mi carrera, me abriría las puertas para un mejor nivel adquisitivo y para poder pagar la boda de ensueño de Clara, se ha convertido en un verdadero infierno.

Apenas puedo dormir, por las noches me aquejan todo tipo de pensamientos intrusivos. Imágenes donde Perth se muerde los labios,
y sus ojos y manos recorren todo mi cuerpo. No dejo de preguntarme;

¿Cómo será ser gay?

¿Tener sexo con otro tipo? En una de mis fantasías Perth me daba por el culo

¿aquello será doloroso?

¿Cómo a un tío puede agradarle eso?

De solo pensarlo siento un escalofrío. Pero al mismo tiempo, no puedo dejar de pensar en ello. Hay algo vergonzosamente atractivo en rendir todo control, en olvidarse de todo y ser completamente avasallado. Entregarse al dominio de otro.

¿Eso sentirán las mujeres? ¿Eso sentirá Clara conmigo?

Definitivamente no, ya he perdido noción de cuándo fue la última vez que follamos. Ella tampoco tiene muchas ganas, lo único que parece excitarla es probarse vestidos y comprar maquillaje. Secretamente, me alivia que no me exija nada. Estoy demasiado agotado y apático como para follarla.

Pero una vez que estoy en la oficina, me transformo en otro. La potencia que me hace falta con mi novia me desborda en la oficina, y me enloquece. Mi cuerpo no me obedece, y mi polla cosquillea y se pone dura en los peores momentos posibles. Siempre que Mi Jefe se pasea por los pasillos y me dedica una sonrisa mínima y fugaz, o una mirada asesina, todo mi ser vibra. Una sensación que jamás he sentido se apodera de mí, un deseo irrefrenable por entregarme a lo desconocido, por rendirme, por ser derrotado y liberado al fin.

No tengo idea que me está ocurriendo
Miro el reloj en la pared de la oficina, en menos de media hora es mi salida.
Aunque una parte de mí prefiere quedarse aquí. Por más molesto y confundido que me sienta, cerca de Perth me siento vivo, y cerca de Clara me siento muerto.

¿Casarse con ella será la decisión correcta?

¡Por supuesto que lo es!

Todo esto no es más que un caso de nervios prenupciales… Clara ha sido mi novia desde la preparatoria, la primera chica con la cual tuve sexo. Y la única.

Todavía recuerdo lo histérico que estaba y en aquella situación. La presión por lucir confiado y dominante cuando me estaba cagando encima de miedo.

Me pregunto si Perth alguna vez se ha sentido así. Dure menos de un minuto y ella parecía decepcionada; ya había estado con otros muchachos antes que yo.

Pero aun así, aceptó seguir saliendo conmigo. Fuimos el rey y la reina del baile en nuestro último año de preparatoria. El resto de los tíos estaban tan celosos de mí… Clara era la chica más deseada de toda la escuela. Y no es para menos, con su cuerpo escultural, su largo cabello rubio y sus profundos ojos celestes.
Atributos que hoy por hoy, no me producen ni el más mínimo cosquilleo.

¿Acaso habrá algo malo conmigo?

¿Por qué salí con ella en primer lugar? Pues porque tenía casi dieciocho y todavía era virgen. Si alguno descubría mi secreto, seria a mí a quien encerrarían en los casilleros en lugar de al pequeño Perth.

Yo recibiría las palizas y las bromas pesadas, y no me creía capaz de tolerarlas. Curiosamente, el debilucho Perth las había tolerado día a día durante años… tal vez todo este tiempo él ha sido el fuerte y no yo.

Y si aguanta una polla en el culo, debe ser muy fuerte… Aunque dudo mucho que Perth reciba, seguramente él debe darles por el culo a los otros tíos. Y volvemos al punto uno;

¿Cómo se sentirá que Perth te folle por el culo?

¿Cómo se verá desnudo?

Ciertamente ya no es el escuálido paliducho de la preparatoria, por encima de sus impecables trajes entallados se notan unos bíceps trabajados y un abdomen firme,.

¿Cómo será que esas manos grandes y fuertes te cojan de la cintura mientras te embiste por detrás?

¿Sera rudo o gentil?

¿Qué sonidos hará mientras se corre?

Basta.

Miro el reloj nuevamente; ya es hora de irme. En la pantalla de mi ordenador están las imágenes que he preparado para la campaña de cosméticos Venus. Programo sus horas de publicación online en las diferentes redes sociales y apago mi computador, agotado.

Me pongo la chaqueta, tomo mi bolso y me dirijo al ascensor. Abandono el edificio central de Crane Inc. y decido caminar a casa.

La Venganza De Mi Jefe [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora