❝Ninguno de ellos podía siquiera imaginar como el castillo de naipes comenzaba a alzarse para caer y llevarse todo consigo. Arrasando con todo aquello que había construido lentamente. Los retos comenzaban a asomarse y aquellos secretos que algunos g...
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No estaban seguros de cuánto tiempo había pasado. Ambos estaban sumidos en un silencio entre incómodo y tranquilizador un poco asfixiante. HyungWon quería pegarse a sí mismo por las tonterías que había dicho y Elisia no dejaba de preguntarse a que se refería el chico cuando le preguntó si confiaría en él. ¿Por qué había de hacerlo?, pero más importante, ¿por qué no debía hacerlo? Eran muchos pensamientos confusos circulando por dos cabezas completamente diferentes y a la vez sumamente parecidas.
—Tenía que haber intentado explotar la puerta. —rompió él el silencio—Tal vez funcione todavía.
—Lo dudo. —explicó ella—Me apuesto lo que sea a que SeungMin utilizó uno de sus hechizos propios para sellar la puerta. Es su forma de hacerme aprender que no puedo llevarle la contraria cuando le gana a Felix en algo. Fui muy ingenua al pensar que no se vengaría ipso facto.
HyungWon se encogió de hombros—Es horrible cuando tus amigos son así, pero son los que tenemos y debemos quererlos así porque ellos nos aceptan de la forma en que somos.
—Pareces versado en el tema —se burló ella al ver el rostro de resignación del chico.
—Mi cama está al lado de la de MinHyuk, créeme, sé dos o tres cosas —hizo una mueca—. Y ahora que se ha empeñado en emparejar gente tiene a todos de los nervios. —quedó en pausa e hizo silencio—Se suponía que no debía hablar del tema. —se recriminó.
—Tranquilo. Soy parte del club, aunque no por decisión propia, creo que todos fuimos arrastrados.
Él le dedicó una sonrisa y antes de poder decir algo más notó como Elisia estaba temblando del frío. No quería parecer poco caballeroso, pero no podía darle su túnica porque él también tenía muchísimo frío. Una idea pasó por su mente, no era demasiado moral y definitivamente así no era como su madre le había criado, pero situaciones así merecían medidas desesperadas. Se acercó más a ella, apoyando su propio cuerpo contra la pared y ayudándola a ella a subirse a su regazo, la espalda de Elisia contra su pecho, las manos de él imperturbablemente afirmadas sobre el estómago de ella. La túnica de él cubriéndolos a ambos y la manta brindando más calor a sus cuerpos. Algo en esa acción se sentía extremadamente agradable y bonito...
—Wow. —se burló ella, girando su rostro para mirarlo, aunque de repente su expresión cambió—No creo que a tu novia le guste mucho verte así con otra chica, ¿no te parece?
Una mezcla entre asco y confusión fue todo lo que HyungWon fue capaz de expresar—No tengo novia, así que no debes preocuparte. —sus palabras fueron absolutamente cortantes y frías.
Por la forma en que ella abrió sus ojos oscuros y sus mejillas se colorearon en un gesto involuntario, HyungWon supo que le había impresionado. Todos lo hacían. Quizás estar en esa situación con Elisia lo volvía más personal. Como un gesto involuntario le acercó más a él, afianzando el agarre y se tomó el atrevimiento de apoyar su cabeza en el hombro de la chica.
