Un nuevo hogar, una nueva ciudad, todo para comenzar de nuevo, una nueva etapa de su vida más no la más esperada, pero al ver a su madre feliz por estar en este lugar le daba ánimos, desde lo que sucedió con su padre estaba muy triste pero este lugar las hacía sentir más conectada con él, después de todo el nació y se crió en esa ciudad suburbana, observó su celular siendo apenas las cuatro de la tarde con el camión de la mudanza y varias personas bajando sus muebles y cajas.—si quieres puedes ver tu habitación —ambas estaban en la parte trasera del auto- y comenzar a organizarlo —tomando una pequeña jaula, junto a una caja.
—Está bien mamá —con una tenue sonrisa, toma ambas cosas para así subir a su habitación— será un nuevo comienzo ¿no crees Bastet? —dejo la jaula en la cama, dejando salir a la criatura.
Dentro de ella se encontraba un felino de color negro y unos brillantes ojos de color verde, su mirada se dirigió a la caja, sacando de ella algunas fotografías enmarcadas, sus ojos se cristalizaron, más una sonrisa en sus labios apareció viendo la figura que estaba en ella.
— ya estamos aquí papá —abrazo contra su pecho la fotografía.
Su mirada se posó en la ventana, no pasó mucho tiempo para cuando el camión se fuera, solo unas cuantas cosas había desempacando y con eso queremos decir la ropa, el cielo había oscurecido, fue llamada por su nombre del piso de abajo, con rapidez se encontraba en la sala.
— creo que nos tocará comer afuera por hoy —muestra entre sus manos la llave del auto— así que ¿vamos? —le lanza las llaves, con una mano las agarra.
—claro que ¡sí! Madame.
~✧~❃~✧~
— burritos.... Los adoro! —degustaba su segundo burrito de esa noche— iré por uno más están deliciosos.
—como es posible que comas tanto y no engordes... —se quejo la madre— tuviste que heredar el metabolismo de tu padre te envidio —bebía de su soda.
—bendito metabolismo, además mamá tú estás muy bien como estas pero... —se levantó de su lugar— iré por otro más —una pequeña fila estaba, menos mal que atendían con rapidez el vendedor— disculpe me da otro.
— WoW tu apetito es bastante grande —tendiéndole el burrito.
—me tendrá de clienta fija entonces señor —sonríe con amabilidad, degustando la primera mordida, tendiéndole el dinero.
— Stuart ese es mi nombre si seras clienta fija sería bueno presentarnos —lo recibe con una sonrisa— para la otra el primero la casa invita señorita?.
— Tanit es mi nombre, vendré a comer estos deliciosos amigos más seguidos —emprendiendo camino al lugar donde estaba su mamá.
Pero no contaba que chocarán con ella, ambos cuerpo caen uno encima del otro, un quejido de dolor sale de ambos individuos, el cuerpo extraño se levanta un poco permitiendo que ambos se vieran a los ojos, un joven de cabello negro y ojos azules la miraban fijamente.
— Jimbo cuando quieras te levantas de ella —musitó el joven de brackets.
Como si un resorte fuera se levantó, tendiendo su mano a ella.
— como lo siento no me fijé por donde corría.
Antes que pudiera dar una respuesta ambos huyeron con prisa; perdiéndose en la oscura calle, su vista volvió a su burrito en el suelo, junto sus manos en forma de plegaria "descansa en paz burrito" .
Tanto como madre e hija se encontraban en la casa en medio de sala mirando todas las cajas y muebles.
— mamá....¿puedo hacerlo? —con sus dedos acariciaba las caja mirandola esperanzada, verla con los brazos cruzados y una mirada sería le dirijia— ¿lo estás considerando? —sorprendida ante ello.
— solo con lo pesado y nada más... No quiero que me duela la espalda —con su dedo apuntaba— sabes que no podemos exponerlo —con cansancio se sentó en el sofá, con su mano le hizo la seña para que pro-siguiera.
Sus ojos brillaron con emoción fue hasta las ventanas cerrando las cortinas, se subio en la mesa, con un aplauso las luces se apagaron dejando solo una que la iluminaba, como si de un circo se tratase una leve reverencia hizo, con un chasquido de sus dedos todos los objetos comenzaron a elevarse dirijiendose a los lugares asignados, el cosquilleo que sentía era gratificante, dejándose llevar por el pero no duró mucho.
— ¡TANIT! —la voz de su madre la detuvo, se encontraba en el aire aferrada al sofá, una risa nerviosa salió de sus labios— ¡bájame ahora o estarás castigada por un mes! — era mejor no atentar a la suerte con ella.
Suspiro con profundidad, con otro chasquido todo volvía a su lugar.
— me emocioné lo siento –se disculpó bajándose de la mesa.
— bien ahora el resto lo vamos hacer nosotras —se acomodo el cabello— mama por hoy se va —besa su frente, dirijiendose a su habitación— descansa cariño.
Un puchero apareció en sus labios mientras estaba sentada en su cama, acariciando a su gato, se asomó por la ventana, la oscura noche gobernaba más un nuevo día comenzaría, se acomodo para así caer en los brazos de morfeo.
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𝐋𝐨𝐯𝐞𝐥𝐲 𝐫𝐚𝐫𝐢𝐭𝐲 ❥𝐓𝐫𝐨𝐥𝐥𝐡𝐮𝐧𝐭𝐞𝐫𝐬
Random"𝙽𝚘 𝚑𝚊𝚢 𝚏𝚞𝚎𝚐𝚘 𝚌𝚘𝚖𝚘 𝚕𝚊 𝚙𝚊𝚜𝚒𝚘́𝚗, 𝚗𝚘 𝚑𝚊𝚢 𝚝𝚒𝚋𝚞𝚛𝚘́𝚗 𝚌𝚘𝚖𝚘 𝚎𝚕 𝚘𝚍𝚒𝚘, 𝚗𝚘 𝚑𝚊𝚢 𝚕𝚊𝚣𝚘 𝚌𝚘𝚖𝚘 𝚕𝚊 𝚕𝚘𝚌𝚞𝚛𝚊, 𝚗𝚘 𝚑𝚊𝚢 𝚝𝚘𝚛𝚛𝚎𝚗𝚝𝚎 𝚌𝚘𝚖𝚘 𝚕𝚊 𝚌𝚘𝚍𝚒𝚌𝚒𝚊. 𝙴𝚕 𝚟𝚎𝚛𝚍𝚊𝚍𝚎𝚛𝚘 𝚊𝚖𝚘𝚛 𝚗�...