La figura que hasta ese momento había permanecido estática finalmente se movió. Nunca en su vida pensó sentirse como en aquel momento, una extraña sensación le oprimía el corazón y sentía que no podía respirar, las imágenes se agolpaban en su mente y hacían que el malestar aumentara por momentos.
Dio media vuelta y saltando por encima de los edificios se dirigió hacia su hogar, La Mansión Hyuuga, su cabeza y su corazón estaban librando una dura batalla, por una parte quería matar al estúpido que se había atrevido a besar a su esposa, y por otra parte, quería reclamarle a ella el haber contestado ese beso. Sin embargo la lógica dictaba que esperara las explicaciones, después de todo el había visto como ella lo apartaba de su lado, como había salido de ahí, seguramente esto nunca volvería a pasar. Pero tampoco podía dejar a un lado el hecho de que ellos se casaron sin amor, y aunque el yahabía admitido que con el tiempo se había enamorado de ella, al parecer a Hinata no le pasaba lo mismo, en lo más profundo de su corazón Neji sabía que él jamás ocuparía el mismo lugar que Naruto, y eso lo desconsolaba, ese maldito rubio había sido el primer amor de su esposa
Y tal vez el único - completo lleno de tristeza
Cuando al fin llego hasta su destino no saludo a nadie, su semblante era más serio de lo normal eh incluso se podría decir que se le notaba deprimido. Los sirvientes no se atrevieron a preguntarle nada, ni siquiera de ofrecieron su acostumbrada taza de té, como siempre al volver de una misión, simplemente se limitaron a no estorbar en su camino mientras este caminaba hasta su habitación.
Para desgracia del castaño, Hanabi salía en esos momentos de su cuarto, se cruzaron de frente, Neji no dijo ni una sola palabra, la menor de los Hyuuga inmediatamente noto el mal estado en el que se encontraba su primo, y a pesar de que no sabía la razón por la cual se encontraba en esas condiciones, lo abrazo.
Neji al sentir la presión de los brazos de su prima sobre su cuerpo levanto un poco los brazos y contesto con lentitud el gesto de solidaridad, nunca había sido demasiado expresivo, tampoco estaba dispuesto a llorar, mucho menos frente a su familia, pero agradecía en el alma el apoyo silencioso que Hanabi le otorgaba en esos momentos. Un par de minutos después se separaron,ninguno dijo nada, Neji se disponía a segur su camino cuando Hanabi interrumpió su marcha.
Hanabi: ¿Ya has tomado el té? - Su cuñado simplemente negó con la cabeza, ni siquiera volteo a mirarla - Yo te lo llevare a tu habitación
Neji siguió su camino después que Hanabi terminara de hablar, no tenía ganas de hablar, como menos de discutir, además, aquello no parecía una petición, más bien era algo que ella haría no importara lo que el decidiera.
Entro a su habitación, y tiro a un lado la máscara de ANBU que aun llevaba en la mano, camino hasta un poco y abrió la puerta que daba acceso al balcón. Avanzo hasta encontrarse con el barandal y ahí se recargo, desde ahí tenía una buena vista del patio trasero de la casa y una buena parte del barrio Hyuuga.
Hanabi se encontraba en la cocina preparando el té de Neji, "¿Me pregunto que le habrá pasado? Es muy extraña la forma en la que se está comportando".
Por un momento pensó que algo malo le abría pasado a su hermana y al bebe, pero descarto la idea, si eso fuese verdad su primo les hubiese informado. Por más que trataba de encontrar lógica para el estado de Neji, no encontraba ninguna, cuando al fin el té estuvo listo, lo subió hasta la habitación principal. Toco a la puerta y entro sin esperar respuesta, después de inspeccionar rápidamente el cuarto, observo una silueta, él estaba en el balcón. Camino hasta ahí y dejo la bandeja con labebida en una pequeña mesa que estaba ahí.
Hanabi: ¿Qué paso? - dijo tratando de que hablara con ella
Neji: Ni yo lo sé con exactitud
