Querido Diario...
que tontería, pero... es lo que la sicóloga recomendó...Supongo que debo empezar de mi infancia, su pongo que escribir de mi terrible infancia hará o ayudará a ver lo mal que realmente fue mi vida y a comprender...
No recuerdo a mis padres, simplemente no se como fueron conmigo o cosas sencillas, el primer recuerdo que me llega de mis tíos es, por su puesto, los gritos de mi Tía Petunia, y los golpes de mi tío Veron. Ellos nunca fueron muy amables, al principio recuerdo que mi primo no era tan malo, incluso jugábamos juntos, pero, todo cambió cuando cumplí 5 años creo que fue cuando hice mi primera magia accidental, no recuerdo lo que realmente pasó, lo único que se es que de un momento a otro estaba en mi armario debajo de las escaleras.
Durante mucho tiempo los golpes, los gritos, los deberes en exceso y los periodos largos sin comida era normal, los Durley se encargaron de entrenarnos a mí y a su hijo para no decir nada, le dijeron a Dudley que era normal maltratar a los más pequeños, que era normal que el tendría todo lo que el quisiera, que era normal que las personas mayores hicieran preguntas sobre su prima, pero que el debía contestar que estaba bien y que causaba muchos problemas, y que estaban tratando de corregirme.
Para mí fue igual, me dijeron que era normal, que ellos tenían la autoridad y que yo estaba siendo curada, y que si quería ser normal debía aceptar todo lo que ellos decían, yo acepté.
Cada moretón, cada grito lo acepté, las cosas anormales a mi alrededor debían ser bloqueadas...
Nunca vi lo mal que estaba, nunca vi lo sola que estaba y si lo vi no quise aceptarlo y me quedé ciega ante eso.
Cuando cumplí 11 años y supe mi verdad pedí a mis familiares una explicación.
Nunca llegó.
Draco estaba en la oficina de su padre, este le había dicho que tenía un contrato de matrimonio muy bueno con los Greengrass, más específicamente con la hija menor Astoria.
-- No -- dijo simplemente viendo a su padre y al otro patriarca e ignorando a la niña que estaba en la sala.
-- ¿qué dices Draco? -- dijo Lucius enojado con su hijo.
-- me niego a casarme con una mujer que tiene fama de ser una calienta camas, que una Puta muggle tiene más honor que esta mujer a mi lado.
-- ¿COMO TE ATREVES? -- grito el Patriarca Greengrass.
-- Draco... yo... no me ..
-- Cállate, no termines esa frase, tu bien sabes de lo que hablo. Cuando estábamos en la escuela, cambié de cama con Theo, y a mitad de la noche los Gadeos de Theo nos despertaron y tú le estabas dando una mamada, nunca te molestaste en poner un hechizo de privacidad, pues su pongo que esperabas inculpar me de algo, nadie de los mayores supo nada por qué supongo que no te contenía que alguien se enterará.