Tras el telón de pino - Camren (Adaptación)

Capítulo 26

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La historia no me pertenece, todos sus derechos a la maravillosa escritora Gerri Hill.

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Capítulo 26

Lauren se duchó antes de atreverse a ir hasta la cocina. Había oído antes las risas de los niños,y la voz burlona de Camila. Aquel día había dormido más de lo habitual, pero temía quedarse a solas con Camila. Mientras los niños estuviesen allí, haciendo de amortiguador entre ambas, no habría tiempo para charlas... ni para besos.

Se apoyó en la repisa del baño para tranquilizarse y por fin se atrevió a mirarse a los ojos en el espejo. Había evitado a propósito pensar en lo sucedido la noche anterior... en lo que estuvo a punto de suceder. Seguía sin poder creer que había estado tan cerca de besar a Camila después de tantos años. La palabra que Camila había susurrado seguía resonando en su mente.

«¡Sí!»

Pero ¿qué quería decir aquello? ¿De pronto tenía curiosidad? ¿O estaba expresando en voz alta sentimientos que había estado reprimiendo todos aquellos años?

Fuese cual fuese la respuesta, Lauren no estaba muy segura de poder enfrentarse a ella.

Camila alzó la vista cuando Lauren entró en la cocina, yendo directamente hacia la cafetera, sin dedicarle ni una mirada. Ya esperaba aquello: sin duda, Lauren estaba avergonzada por lo que casi había llegado a suceder. También lo estaba Camila.

Después de todo, había sido ella quien lo comenzó todo: era ella la que quería hablar, y después la que prácticamente le había rogado a Lauren que la besara.

Sin embargo, a la luz del día ya no estaba tan segura. Tal vez sólo se había imaginado aquella expresión en el rostro de Lauren. Tal vez la atracción que sentía por Lauren, la que seguía sintiendo después de tantos años, no tenía nada que ver con el sexo. Tal vez no era más que eso, atracción, una extensión más de su amistad. Tal vez estaba sacando demasiadas conclusiones.

—¿Qué tal te encuentras esta mañana? — preguntó Lauren en voz baja y titubeante.

Camila la miró a los ojos, sumergiéndose en aquellos profundos ojos verdes tal y como había hecho cientos de veces antes, sólo que ahora aceptó lo que había visto en ellos y también lo que sentía por Lauren. Y sí, tenía que ver con su amistad, y al mismo tiempo no tenía nada en absoluto que ver con ella.

—Estoy muy bien, ¿y tú? —

Lauren miró un momento hacia los niños, ocupados comiendo waffles, y volvió a mirar a Camila. —Sobre ayer en la noche Camz... yo, lo siento mucho — susurró.

Camila asintió. —Sí, yo también lo siento. Si Lee Ann hubiese esperado tan sólo cinco minutos más, yo ya sabría lo que es besarte. —   Lauren abrió los ojos como platos.  —¿Quieres waffles? —

—¿Cómo? ¡Camz! —

—¿Mmm? —

—Me estás volviendo loca — susurró Lauren.

—Bien, ya era hora. Entonces, ¿quieres waffles o no? — 

Lauren negó con un gesto. —No, no creo que pueda comer nada —murmuró.

Tomó su taza de café con la intención de volver a su dormitorio... y pensar. Pero una manita le tocó el brazo.

—¿No vas a comer? La tía Mila, ha hecho waffles sólo para ti. —

—Ah, ¿sí? ¿Para mí? — Lauren alzó la vista hacia Camila y pudo ver que se ruborizaba ligeramente.

—Dice que solías comerte diez a la vez. —

—Ah, pero eso era cuando cocinaba tu abuelita. Me da miedo comer lo que cocina la tía Mila. —

Su frase fue recompensada con un trapo húmedo disparado contra su cara.

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Les dejo un capítulo más, es algo corto... pero espero lo disfruten igual ^_^

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