THIS IS MY LIFE

Besos y sonrisa bobalicona.

El tiempo que me dió, sentía que no era suficiente. Me duché, me sequé el pelo y lo ondulé. Mi maquillaje fue con tonos mate, me coloqué mis aretes de perla y mi reloj. Salí a mi cuarto envuelta en una bata para buscar en el armario lo que me colocaria, opté por unas medias azules, un vestido corto del mismo color, botas, y un saco rosa. Guardé en mi bolso lo imprescindible, teléfono, llaves, labial y algo de dinero. Coloqué comida en el plato de Lili, me despedí de ella dejando la luz de la huerta y la sala encendida, y salí. 

...

Estaba muy nervioso. Existía la pequeña posibilidad de que ella no viniera, después de todo, había sido yo quien la alejó. Aún faltaban algunos minutos para que se cumpliera la hora acordada, pero era mejor que yo esperara, y no al contrario, no quería que la idea que tenía de mi empeorara. 

...

Cuando llegué al lugar acordado, un escalofrio me recorrio completa, y tenía una leve taquicardia. Justo cuando estaba por cruzar la calle, lo ví. Vestia pantalon y saco azul, haciendo juego con una camisa rosada, era como si hubiésemos hablado de cómo vestirnos aquella noche, y me encantó. Me sonríe en cuanto está frente a mí 

-¿Me has copiado a propósito no?-me dice con un tono de picardía en la voz

-Pensaba decirle exactamente lo mismo-respondo a su acusación. Su sonrisa se ensancha, y se coloca las manos sobre la nariz. Me da un beso en la mejilla, me ofrece su brazo y nos dirige a un restaurante no lejos de ahí. Me agradó la idea de que no se esforzara por buscar algo excéntrico, un lugar donde no me habría sentido muy cómoda. Nos sentamos en una mesa cerca a la entrada, así tenemos vista de los coches que pasan en frente, lejos de las miradas curiosas. Hablamos de cómo había nuestro día, de cómo concordamos en atuendos, hasta que finalmente pasamos a las preguntas personales, trabajo, universidad, familia

-¿Vives con tus padres?-me pregunta

-Nop-respondo colocándome el pelo detrás de las orejas-Con Lili-le sonrio

-¿Tu hermana?

-Algo así-le respondo. En un intento de cambiar la dirección de la conversación, pregunto por la suya, descubro que vive con su madre y su hermana menor, que su padre vive fuera de la ciudad con su hermano y que adora a su abuela paterna. Pedimos unas arepas de maíz rellenas con carne y pollo, le sorprendió mi gusto por la salsa de tomate.

Cuando salimos de ahí, era ya bastante tarde, pero aun así, empezamos  a caminar. Habia reido tanto, que sentía como si lo conociera hace mucho, era muy sincero, las bromas fluían de él sin hacer el más mínimo esfuerzo, se notaba que era muy sentimental, y bastante inteligente.  Sin pensarlo, me frote las manos por el frío, y su reacción fue inmediata

-Toma-escucho que me dice mientras se quita su saco

-No, no Mati. No es necesario, se morirá de frío-veo cómo me sonríe y me la coloca sobre los hombros

-Estamos cerca Le, y llevo camisa

-¿Cerca de dónde?- le pregunto

-Del lugar donde dejé mi carro-Dice como si nada, algo que hasta el momento no sabía. Era una auto precioso, tal como me había contado que le gustaban. Abre la puerta del copiloto, y subo, en cuanto está dentro, enciende la calefacción

-¿A dónde vamos?-me pregunta

-No lo sé- respondo colocando mis manos sobre mis muslos

-Muy bien-dice arrancando el coche. Durante el camino suena la radio, no hay música especial. Tampoco se comporta como esos tipos que desean llevarse a alguien a la cama. es todo un caballero, no cabe duda. Me lleva a un parque bastante bonito y tranquilo, apenas iluminado por las farolas, y la luna sobre nosotros. Toma mi mano, y siento como si pequeñas corrientes de energía se concentraran en ese lugar, llevándonos a una banca. Me mira