Agape

Pérdida

Leone Abbacchio había perdido a su madre en el mismo instante en que había venido al mundo, al parecer el parto se había complicado y su madre había terminado perdiendo la batalla, aun así su padre se sentía feliz por tenerlo con el, desde entonces Lysander Abbacchio de había hecho cargo el solo de su hijo, todos los días lo llevaba al colegio para después irse a trabajar, su trabajo como policía le quitaba muchas horas de su tiempo, aun así todo esto valía la pena al ver los ojos de admiración de su hijo, Leone quería ser como su padre cuando creciera, para el no existía mejor persona que su padre.

En su infancia siempre había sido un chico retraído, y no porque le costara hablar con la gente, más bien no le interesaba en lo absoluto, la mayoría de niños de su edad le hacían enojarse o simplemente le parecían aburridos, por lo que estaba acostumbrado a estar solo la mayor parte del tiempo, su padre le había regalado un pequeño reproductor de discos portátil en el que aprovechaba para escuchar música mientras el resto de niños jugaban en el patio.

Su vida era así hasta que lo conoció, un chico de corto cabello negro y ojos azules, mentiría si dijera que no se quedó sorprendido ante aquel infante cuando lo vio por primera vez, a diferencia de todos los niños ahí, el pelinegro tenía un aura especial, además tras observarlo por un rato se dio cuenta de que aquel niño aún a su corta edad era bastante carismático, siempre que hablaba todos los niños le ponían atención y seguían sus órdenes, además también era bondadoso, una vez vio cómo un chico más joven perdía su comida cuando resbaló, dejando un sandwich tirado en el piso y a un joven niño llorando amargamente por eso, en ese momento el chico de cabellos negros se había vuelto hacia el y le había ofrecido su propia comida con una sonrisa.

Tenía curiosidad y ganas de hablar con él, sin embargo no encontró como hacerlo, pero la suerte estaba de su lado, pues un domingo mientras el. Jugaba videojuegos en la sala de su casa escucho la voz de su padre llegando, también escucho otras voces por lo que supuso que su padre había venido con algún compañero de trabajo, aun así la sorpresa vino cuando vio a aquel chico de cabellos negros entrando a la sala, este venía acompañado de un hombre con rasgos similares a los suyos, probablemente era su padre.

Mi padre me explicó que tras ayudarle a Paolo con un tipo que lo amenazaba constantemente para que le pagará por dejarlo surcar el mar en su pequeño bote pesquero, ambos habían terminado volviéndose amigos, Paolo había traído a su hijo para que pudiera convivir con él hijo de su amigo mientras ellos tomaban una cerveza y hablaban de la vida.

Bruno Bucciarati, ese era el nombre de aquel chico de corto cabello negro, al parecer el chico solo era un año menor que el,  a pesar de tener personalidades bastante distintas también encontraron cosas y gustos similares, por lo que a partir de ese día ambos se hicieron inseparables, a veces pasando las tardes en la casa del albino jugando videojuegos mientras que los fines de semana ambos iban con el padre de Bucciarati a navegar en su barco.

_Bruno, ¿Crees que seamos amigos siempre? - preguntó Leone durante una salida al parque donde ambos se encontraban sentados en el pasto.

_Claro que si, un día ambos nos iremos a vivir juntos cuando seamos más grandes- dijo el de pelo negro.

_¿Me lo prometes?- el de cabello blanco acercó su mano para que esta tocará la del pelinegro.

_Te lo prometo- dijo el de cabellos negros.

Pero las promesas a veces solo se quedan en la nada, Abbacchio fue consiente de esto unos años más tarde cuando ambos entraron a la preparatoria, si bien al principio seguían hablando como hasta las vacaciones pasadas, esto no duró mucho tiempo, pero no culpaba a Bruno, sabía que tarde o temprano eso pasaría, primero empezó con las reuniones en su casa, estaba acostumbrado a que Bruno llegara con su padre todos los fines de semana, sin embargo en la segunda semana en la que iniciaron la preparatoria Bruno dejó de ir, su padre nos decía que lo habían invitado a una fiesta, que había salido al cine con amigos o que estaba estudiando en casa de un amigo.

Aquello fue doloroso, sin embargo siempre se las arreglo para que todo pareciera que iba bien, en la escuela Bruno a penas y lo saludaba con la mano cuando se cruzaban en la cafetería, y el único momento en el que Bruno y el se habían sentado juntos fue los 3 primeros días de colegio, a partir de ahí, el de pelo negro no volvió a sentarse con el, y salvo por Risotto quien se había vuelto lo más cercano a un amigo, el se sentaba solo, y aunque intentaba no lanzar miradas hacia Bruno quien compartía mesa con un montón de chicos escandalosos, siempre fallaba en su intento.

Cada día se preguntaba que es lo que había hecho para que el se alejara de esa forma, entendía que por el carácter de Bruno le había sido muy fácil ser de los más populares en la escuela, pero, ¿por qué abandonarlo? Quizá porque a su lado no hubiera logrado ser aceptado por todos, el ceño fruncido, las pintas de malote, su considerable altura y el maquillaje que usaba diariamente hacían que casi todos tuvieran miedo de el, o que lo miraran como bicho raro, Leone sabía que no le agradaba a la mayoría de la escuela, así que entendió porque Bruno se había alejado de él.

Aún así eso no quitaba que doliera, no quitaba que viera esos ojos azules con profunda añoranza, que quisiera levantarse y obligarle a que le dijera que había pasado.

Pero no lo haría.

A pesar de todo Bruno se miraba feliz, y aunque ahora ya ni siquiera podía usar su nombre de pila para referirse a él ya que el pelinegro dejó de llamarlo Leone para referirse a él con un frío Abbacchio y el por inercia había comenzado a llamarlo solamente Bucciarati, aunque eso pasara, una parte de él se sentía feliz al verlo sonreír, Bruno se veía realmente feliz, y eso era suficiente para el.

--------------------------------
Hola a todos, traigo un nuevo AU de esta pareja, la idea me surgió mientras estaba viendo Facebook y me encontré esta bonita imagen.

Quería hacer algo tierno pero terminó siendo triste XD igual tendrá momentos bonitos en los siguientes capítulos, realmente espero que les guste.

Gracias por leer.