Una densa neblina cubría los exuberantes bosques de hoja perenne, pesados tanques circulaban por los caminos en medio de los árboles, las luces de las máquinas de guerra fueron activadas a máxima potencia iluminando su camino, tres tanques ocupaban el ancho de la carretera y guiaban a los de retaguardia.
—Deberíamos hacer esto durante el día— expresó el artillero del tanque Leman Russ.
— ¿Has oído hablar de la estrategia?— mencionó la oficial de comunicaciones.
—Sí, pero al parecer no nuestros comandantes. ¿Dónde está la estrategia en cruzar esta arboleda con todas las luces encendidas?
— ¿Quieres lidiar con esta neblina sin luces? Nos estrellaríamos antes de llegar.
—Somos una puta farola, Balne, una puta farola.
—Ya cállense— dijo la comandante del tanque —Ustedes no llegaran a comandar su propio tanque con esa actitud.
— ¿Entonces agachamos la cabeza y decimos, "Señor si señor", a todo lo que nos pidan?— masculló Balne.
La comandante sacudió la cabeza sonriendo —No tienen remedio.
— ¿Cuánto falta?— preguntó el conductor.
—Sí, ya quiero dispararle a los malnacidos del Imperio— dijo el artillero.
—No te alteres, Ferrin— pronunció la comandante.
—Cuatro kilómetros— contestó Balne — ¿Por qué los defiende Juna?
La comandante rio —No defiendo a nadie, solo los quiero concentrados.
Ferrin quitó su vista de los instrumentos —Su padre fue comisario, seguro mantie...
El tanque se detuvo de golpe, chispas saltaron y los faros se apagaron, toda la tripulación se sacudió en el interior.
— ¡¿Qué mierda pasó?!— exclamó Juna.
—Las orugas... estallaron, estamos inmovilizados— respondió el conductor aterrado.
— Caímos en una trampa— expresó Ferrin — ¡Les dije que éramos una puta farola!
— ¡Cállate y apunta el cañón!— Juna puso en orden a su equipo y estuvieron listos para combatir.
Los sensores y escáneres no mostraban evidencia de sus atacantes, dos docenas de tanques atrás de ellos quedaron atrapados, tras la conmoción llegaron varios segundos de silencio y paz que solo enloquecían a los atemorizados soldados, calma antes de una tormenta.
Los sensores produjeron un ruido alarmista, docenas de biomarcas aparecieron a su alrededor.
— ¡Estamos jodidos!— exclamó Ferrin desesperado mientras trataba de buscar a las señales que se mostraban.
—Sí, lo estamos— concordó la comandante.
Una figura oscura y pesada cayó sobre ellos, arrancó la escotilla de la torreta, disparó varias veces dentro, la munición bolter rebotó por las paredes del tanque, acabando con los artilleros y las astillas metálicas se volvieron esquirlas que incapacitaron al resto de la tripulación.
Juna con una gran herida en la pierna se arrastró hacia Balne —Vamos... nena, debemos salir.
—No... puedo moverme— dijo sollozando, la joven mujer fue impactada por la metralla en sus brazos y cadera.
Juna la tomó de los hombros y arrastró hasta una trampilla que llevaba bajo el tanque, un ruido metálico se oyó rebotar dentro del tanque, una granada, con un golpe de adrenalina logró mover el cuerpo y así misma justo a tiempo. El par cayó en el frío ferrocemento, se escuchó la explosión, la temperatura se elevó abrigándolas momentáneamente de la baja temperatura de la noche; la munición dentro del tanque no estalló pero solo era cuestión de tiempo.
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CABALLEROS OSCUROS
FanfictionUn capítulo Primaris en el segmentum Obscurus busca su lugar entre sus hermanos de batalla, tendrán que demostrar de lo que son capaces y ganarse el respeto de los Capítulos más veteranos y las demás instituciones del Imperio. Un fanfic crossover de...