Padrinos Mágicos *5sos* Terminada. 《EN EDICIÓN》

Capitulo 27.

*Siento mucho no haber esta activa. Tenía examen el día de hoy y tuve que estudiar. Bueno, voten y comentes. Las amo* xx

Después de un rato, Alison se dio cuenta de que Luke se había perdido, y como la buena persona que es: le lanzó un brazalete de la amistan en la cara.

-¿Qué carajos te pasa? -él preguntó mientras se frotaba los ojos. Un par de lágrimas se habían escapado de sus ojos, y ciertamente, no estaba seguro si había sido por el ataque o por la profundidad de sus pensamientos. De cualquier manera, él estaba agradecido de que Ali lo hubiera... ¿agredido? De cualquier otra manera, habría revelado su lado débil. -Pudiste dejarme ciego.

Ali se estaba riendo, y Michael, por primera vez desde que habían empezado con esas horribles cosas empezó a divertirse. Estar con Ali y con su mejor amigo era lo mejor que pudiera pedir. Claro, últimamente las cosas habían estado un poco raras entre los tres, pero eso era cosa del pasado. O al menos eso quería pensar Michael. -Lo siento. Es que lucias triste, lo cual es raro.

-Pues yo no lo creo. -escupió Luke. Traer a la vida los recuerdos de su pequeño Evan lo habían dejado un tanto sensible. -¿Ya terminaron? Porque déjenme decirles que es la cosa mas aburrida que se les hubiera ocurrido hacer.

Michael hizo un puchero. Los brazaletes de la amistad eran una estupidez, significaban mucho para él. Pero desde la perspectiva laboral eran un completo asco. Debieron haberlas comprado hechas. Sin embargo sabia que a Alison si le había gustado elaborarlas, y le gustaba verla feliz. Desde que pasó lo de Evan se sentía cada vez mas mal, sabiendo que es inútil no encariñarse con sus hijos asignadas, y es peor su llega a pasar lo de Evan. -Fue divertido. Te hizo uno, si qui...

-No, gracias. Prefiero meter mi cara al inodoro. -la mandíbula de Alison se tensó. Creía que Luke por fin mostraría su lado humano después de lo que paso con el asunto de Calum. Tenía esperanzas de que fuera así con ella también. Estaba consiente de que Luke adoraba a Michael, aunque no lo admitiera, incluso pensaba que si algo le pasaba el rosado se moriría. Pero con ella, siempre seria un imbécil.

Se puso de pies rápidamente, estaba realmente enojada. -Si eso es lo que quieres. -un rebelde y rubio mechón de pelo le cosquilleó en la cara, pero ella lo apartó rápidamente con indignación. -Deseo que Luke tenga la cara en el retrete.

Luke trató de Luchar contra sus instintos de hadas, pero sabia que era inevitable, pues no estaba fuera de las reglas. Y unos segundos después, con una gran cara de enfado el y Michael se encontraron chasqueando los dedos, para después pasar a sentir el agua entrando en su nariz.

Y en ese momento, odió con todas sus fuerzas ser un hada.

Michael se encontraba disfrutando con la vista de su mejor amigo ahogándose con el agua, sin embargo, no mentiría, su parte coherente estaba realmente preocupada. Preocupado por la manera en que el rosado golpeaba con sus manos la porcelana fría del retrete, preocupado por las intenciones de Alison, pero más que nada estaba preocupado por si mismo. Porque no hizo nada por detenerlo, simplemente se cruzó de brazos con una sonrisa en su rostro. ¿Qué le estaba sucediendo?

-Creo que es suficiente Ali. -murmuró, todavía no muy seguro de que era suficiente. Tal vez, esto le daría a Luke, lo que llamaban, una cucharada de su propio chocolate. Cuando ella negó con la cabeza, murmurando que se merecía unos segundos más el no dijo nada. En cambio, observaba con atención como su amigo intentaba salir de ahí. -Ali...

Rodando los ojos y lanzando sus manos al aire miró a Michael. -Esta bien, ya es suficiente. Deseo que la cabeza de este idiota este afuera de la taza. -y el hada con cabello verde concedió su deseo felizmente. -Michael, te adoro. Pero tienes que dejar de ser una vagina.

-¿Una vagina? -el preguntó confundido.

Luke permaneció de pie, tratando de reponer su respiración. Esto era algo que no quería volver a repetir en su jodida vida. Maldita Alison. -Ustedes están completamente desquiciados.

-No, te lo merecías. -dijo Alison decidida mientras se recargaba en la pares fría. Ahora que lo pensaba ¿Por qué estaban tan frías? ¿No había un sistema de aire caliente? Como sea... -Si, una vagina es realmente molesta. Mas en los días de tu periodo; sangras como regadera ambulante y te causa dolores infernales. Básicamente, Michael a veces es algo así.

Michael se sintió un poco ofendido, pero a la vez encontraba esa comparación bastante hilarante. Chasqueó los dedos y unos segundos después apareció una toalla, para que Luke pudiera secarse. -Eso es algo que jamás he visto en mi vida, y estoy orgulloso.

PD: Admiren la hermosa foto de multimedia de Michael y Taylor :33

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