Song-fics || Harry Potter - Homo

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Canción: Corazón Sin Cara | Prince Royce

Pareja: Harry Potter / Draco Malfoy

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Luego de volver a Hogwarts después de la guerra, Harry inició una rutina de paseo nocturno debido a sus dificultades para conciliar el sueño durante las interminables madrugadas que lo ahogaban. ¿Cómo podía dormir si lo que miraba al cerrar los ojos eran los cadáveres de todas las personas muertas en la guerra, reclamándole por no haberlos salvado?

—Hasta que el maldito Malfoy se digna a aparecer por el comedor —murmuró Ginny, provocando que Harry levantara la vista hacia la mesa de Slytherin.

Harry podía ver al mismo Draco Malfoy demacrado que había visto durante sexto año, pero parecía verse mejor que en ese entonces y no entendía el desprecio de Ginny al hablar de él. ¿Había hecho algo el rubio y él no se había enterado?

—¡Es un mortífago! Se ha dedicado a molestarnos durante todos estos años en Hogwarts... Sigo sin creerme que se haya atrevido a volver este año —explicó antes la duda de Harry, como si fuera lo más respuesta más obvia.

Y ellos también lo habían molestado a él. Eran solo niños estúpidos discutiendo por cosas estúpidas. ¿Por qué seguir con esa tontería? Él seguía queriendo a Malfoy por mucho que...

¿Qué? Mierda. ¿Por qué no podía olvidarse de eso? ¡Anoche (y otras miles más) se había dicho a sí mismo que lo olvidaría! Se suponía que lo iba a  olvidar desde quinto año, cuando se unió a la Brigada Inquisitorial y su tía había matado a su padrino. ¿Tanto costaba olvidarse de Draco Malfoy?

—¿A dónde vas, Harry? —preguntó Hermione cuando vio que Harry se desviaba del camino hacia la Torre de Gryffindor.

—Necesito relajarme un poco, así que voy a ir al baño de prefectos. Os veo en la Sala Común, ¿sí?

—No tardes mucho, Harry —comentó Ginny—. Quiero hablar contigo.

Se adentró al baño de prefectos con toda la tranquilidad del mundo. Fue hacia donde se encontraban las toallas, tomó una, se desvistió y dejó su túnica a un lado de la bañera con tamaño de piscina que era rodeada por casi cien grifos.

Minutos más tarde Harry escuchó unos pasos que provocaron que tomara su varita, se giró y apuntó a la otra persona presente. Delante de él estaba Draco Malfoy, usando una bata y apuntándolo también con la varita. Parecía igual de sobresaltado que Harry.

—Ah... eres tú. —Draco fue el primero en hablar, bajando levemente su varita—. Lo siento, pensaba que estaba vacío... yo... me voy.

—¡No! —Se interpuso Harry—. No hace falta... Hay mucho espacio para ambos. —El moreno quería golpearse en la cabeza.

El rubio pareció pensarlo, al final decidió por meterse a la bañera con todo y bata. un poco alejado de Harry. Una vez con la espuma cubriéndolo se quitó la bata toda mojada y la dejó a un lado de la bañera.

—Te ves genial —halagó Harry minutos después, cuando el rubio estaba mirando un punto fijo en el agua.

—¿Estás bien? —preguntó confundido—. Deberías ponerte tus gafas.

Estaba más pálido que esa mañana, los hematomas en sus hombros eran notorios, aunque parecían estar por desaparecer. Tenía ojeras bajo sus ojos grises, los cuales ya no brillaban tanto al igual que su cabello.