Dancer [ 𝗝𝗛𝗦¹⁸ ]

10

-- Nada nunca cambiará, pase lo que pase, participemos o no al concurso. -- Concluí mirando sus bellos ojos.

Hoseok sonrió levemente y acarició mi espalda baja. Este hombre era adorable, hasta que bajó más su mano. Dejó de sonreír para atrapar mis labios y tomar mi trasero con más seguridad.

Me estaba dando cuenta que la cosa era seria: Este hombre me gustaba de verdad. No me enamoraba fácil, pero Hoseok iba por el buen camino.

6:30

-- Hobi, ya es la hora. -- Susurré despertándolo.

Hoseok me abrazó mas fuerte de lo que ya estaba haciendo y besó tiernamente mi cachete derecho.

-- Vamos... Hace frío fuera, cinco minutos más. -- Susurró a su turno haciéndome sonreír levemente.

-- ¿Te duele mucho la muñeca? -- Pregunté dándome la vuelta para quedar frente a él.

-- Está bien. -- Aseguró respirando en mi cuello. -- Si te duchas conmigo, me levanto ahora. -- Negoció.

-- De acuerdo, pero sin nada turbio que no tenemos tiempo. -- Respondí, pues no era malo  ahorrar agua. 

-- No te preocupes. Solo extraño verte... Entera. -- Justificó.

7:30

-- Pero Hoseok... Tienes que ser mas prudente, mira en el lío que estamos ahora. -- Regañó mirando la hinchada muñeca de Hoseok. -- Lo mejor que puedes hacer ahora es no hacer nada con tus manos y Jiyeon sabe que hacer con las cremas y todo eso. -- Suspiró él mismo.

-- ¿Cree que va a poder recuperarse para el concurso? -- Pregunté.

-- Del todo, no lo creo. Mejorar sí, pero depende de él si quiere participar... Yo sé que tiene las capacidades. -- Aseguró.

-- Ni se te ocurra hacer presión, usar o hacer cualquier cosa con esa mano. Muy poco antes del día, vas a retomar lentamente contacto, pero te advierto que seguirá doliendo. -- Explicó el anciano serio.

Hoseok asintió nervioso, yo tomándole el brazo.

-- Veamos tu solo Jiyeon. -- Finalizó.

16:40

Hoseok no estaba conmigo, lo estaba buscando por toda la casa sin entender lo que pasaba. Estuvo callado todo el regreso a casa después de nuestro día de entrenamiento, no sabía lo que le ocurría.

Decidí ir a ver a su habitación, después de buscar en toda la casa, era uno de los lugares donde menos probabilidades tenía de estar. Estaba bastante preocupada, Hoseok no solía comportarse de esa manera.

Me adentré a su habitación luego de dar unos golpes en su puerta. Me encontré un Hoseok sentado en su cama cabizbajo, despejando una tristeza inhabitual de su cuerpo. Me acerqué rápidamente preocupada y  noté que se secaba el rostro con las manos.

-- Hobi... ¿Que ocurre? -- Pregunté agachándome delante de él para ver su rostro.

-- Lo siento... Lo arruiné todo. Siempre lo hago. -- Empezó desanimado. -- Sólo ignórame, es lo mejor para todos. -- Sollozó partiéndome el corazón.

-- ¿De qué hablas? Tú no has arruinando nada, no tienes de qué disculparte. -- Dije tomando su cara entre mis manos y instalándome sobre sus piernas delicadamente.

El hombre se acomodó para que quede bien encima de él.

-- Por estúpido, estamos a un poco más de 5 días del concurso y me destruyo la muñeca. -- Lamentó mirando la banda que protegía su mano.

-- Hobi, me hubiese podido pasar a mí también, fue un accidente. Ahora lo mejor que podemos hacer es cuidarte y esperar que todo salga bien. -- Consolé acariciando su suave cabello.

Pasó sus manos por su rostro tapando sus hinchados y rojos ojos. Analizaba sus movimientos, parecía desesperado, como si no encontrara sus palabras.

-- Además... Tú no me amas, yo solo quiero terminar con todo esto para dejar de molestarte. -- Lloró agachado la cabeza.

Lo último rompió mi corazón en mil pedazos, ¿Cómo podía decir eso? ¿Cómo se atrevía?

Mis ojos se estaban humedecido cada vez más, por sus palabras y por la imagen que estaba viendo. Nunca lo había visto llorar, él era un sol, siempre sonriente y radiante.

-- Cómo te atreves a decir eso. Hoseok, tú... Iluminas mis días, desde que has llegado a mi vida, pude saber lo que era la felicidad. Tú me gustas, me encantas. Probablemente... Seas la persona que más amo en este mundo en este momento...  -- Pronuncié cada vez más suavemente.

Hoseok levantó la mirada hacia mí y se me quedó mirando los ojos llorosos. Lo abracé y logré tranquilizarlo, también logrando que yo deje las lágrimas de lado. Ambos sabíamos lo mucho que nos queríamos, pero había mucha presión sobre nosotros, necesitábamos desahogarnos.

El concurso se acercaba con pasos de gigante y habían cada vez más problemas. Ya era más que suficiente, necesitábamos sacarnos la mierda que traíamos.

Unos minutos después, Hoseok pareció mostrar la sombra de una sonrisa antes de desviar la mirada.

-- Sé que no es el momento... Pero, si me amas tanto como yo lo hago, por qué no me dejas... ¿Demostrarte mi amor? -- Empezó tierno. -- Sé que me has dado el paso anteriormente, pero no te siento lista para más que toqueteo. Seguiré esperando pero quiero que sepas que te deseo cada día más... Es difícil contenerme. -- Explicó posando sus manos en mis caderas remojando sus labios.

Sonreí ante lo que decía... Todo lo que decía era verdad. Pero me gustaba tomarme mi tiempo. Lo que anhelaba era que ambos estemos muriendo de impaciencia por el otro, haciendo mucho más especial nuestra primera vez juntos. Además, no quería volver a equivocarme. 

Cuando perdí mi virginidad, fui bastante manipulada por el chico. Él solo quería mi cuerpo para después dejarme. Luego de eso, siempre quedó el trauma que tuve llegando a la quincena y ahora era mas prudente. Me di cuenta que mientras más esperaba, más lo disfrutaba por el deseo acumulado todo ese tiempo.

-- Hobi, tú sabes que estoy esperando... El momento. -- Respondí sonriente acariciando sus mejillitas.

Hoseok negó con la cabeza riendo levemente y despejó mi cabello de mi rostro para besarme lentamente la mano en mi mandíbula. Detuve su delicioso beso para mirarlo y hacerle una propuesta.

-- Pero por ahora... ¿Podemos jugar un poco, no? -- Cuestioné apegándome a su cuerpo.

El hombre rio un poco ante mi pregunta, bajó sus manos para apretar mi trasero y volver a besarme más intensamente.

-- Esperaré el momento pacientemente. Por ahora, me contentaré de lo que me propones, bella criatura. -- Me apodó juguetón, antes de dejarse caer en la cama conmigo encima.

Gracias por leer❤