💕Ciegos de Amor💕 «Kookmin»

Capitulo 17

Los labios de ambos se movían con lentitud, disfrutando de los labios del otro, Jungkook tomó el rostro de su asistente entre sus manos para acercarle más, mientras trataba de ir lo más suave posible, todo pensamiento había sido desechado de la mente de ambos, no había ninguna etiqueta válida para ellos cuando sus labios se encontraron, y sus corazones latian con firmeza en sus pechos, Jimin se aferró a las solapas del traje de su jefe cuando la tibia lengua del más alto tocó por un momento sus labios, más todo se fue lejos y su burbuja fue rota cuando las voces de las personas se escucharon rodeando todo de risas y algunas discusiones a lo lejos.

El primero en separarse fue Jimin, quien dirigió su vista hacia el lugar donde provenían los ruidos.

Avergonzado, bajo su mirada para que su jefe no lo viera, y mordió su labio inferior con nerviosismo sin saber que decir o hacer ahora.

Las palabras no fueron necesarias cuando su jefe se levantó y le ofreció la mano para ayudarle, sin ninguna duda la tomó.

— Todos están saliendo debemos irnos, además no quiero que te enfermes, debes ducharte porque acabamos de mojarnos - dijo el más alto con una sonrisa avergonzada, como si fuera un adolescente.

Jimin solo asintió y con la mano entrelazada con la del castaño comenzaron a caminar hacia el hotel, aún en silencio.

Una risa fue la encargada de romper el silencio que se mantenía entre ellos, el pelinegro volteó a ver a su jefe con el ceño fruncido sin saber la razón por la cual se estaba riendo.

— ¿Qué te da tanta gracia? - preguntó enarcando una ceja

— Tú, tú me das mucha risa - continuó el castaño, riendo aún mucho más, lo que provocó que el más bajo le golpeara en el pecho con una sonrisa triunfante en el rostro.

— ¡Hey!, Eso ha sido injusto ni siquiera te dije porqué me estaba riendo - se quejó su jefe con exageración. - Me río de ti porque estás lleno de arena en el rostro

Apenas el castaño dijo eso, su asistente ya estaba buscando con su palma, limpiar su mejilla donde ciertamente podía sentir la arena.

— ¡No es gracioso, idiota! - le reprimió, con molestia

Pero al castaño no le importó y seguía riendo, a pesar de los golpes en su brazo.

— Ya basta, además lo decía como buena persona que era - se defendió el castaño con orgullo, pero como su asistente no le hacía caso, solo pudo detener su brazo con su mano, provocando que quedaran más cerca.

Jimin tragó saliva al notar la distancia y solo pudo querer alejarse, Jungkook notó su nerviosismo, y sonrió con diversión, acercándose más a su rostro.

— También me reía, porque que bien besas, Jimin-ssi, que escondido te lo tenías, ahora se porque el idiota ese te buscaba tanto - le dijo en tono burlón haciendo que Jimin casi se atragantara con su propia saliva, antes de escuchar una carcajada por parte de su jefe nuevamente.

— Ash, te odio - dijo el mas bajo cruzándose de brazos. - No me movere de aquí - protestó

— Deja tu drama y vámonos de este lugar, tenemos que llegar al hotel - le miró con los ojos entrecerrados y al ver que no iba a ceder, Jungkook se encaminó hasta él, entrelazando sus manos de nuevo y caminando para halarlo con él.

Primero el pelinegro protestó pero no le quedó de otra que ceder, mientras caminaban pudo ver el enlace de sus manos y solo pudo sonreir, parecía que el castaño se había dado cuenta pues siguió su vista para encontrar sus manos unidas y una vez más sonrió, al igual que su asistente.

Con los rostros sonrojados por el beso que se habían dado hace unos momentos y sus manos entrelazadas, siguieron caminando sin soltarse y ambos sonriendo mientras caminaban hacia el hotel, de nuevo en su burbuja.

Sus pasos se hacían cortos pues aunque no querían pensar en ello, mientras más se acercaban a las puertas del hotel los pensamientos se iban ordenando, más aún así siguieron caminando con sus manos unidas, mirándose tímidamente de vez en cuando, subieron por el ascensor hasta el piso de sus habitaciones sin separar su manos pero aún así sin mirarse a los ojos.

Las puertas se abrieron unos cuantos momentos después y se quedaron en el pasillo donde sus habitaciones quedarán en lugares diferentes.

Jungkook miro hacia su pasillo y luego a Jimin, ambos se sonrieron con ternura y no sabían que hacer, los ojos de ambos se mantenían tratando de analizar la expresión del otro y queriendo decir algo.

Sus respiraciones estaban cada vez más cerca de nuevo y las mejillas de Jimin se ponían más rojas conforme el tiempo.

— No sabía que ya habían regresado - dijo una voz conocida para ambos que les hizo separarse un metro de distancia para mirarlo.

Jin estaba en el pasillo sonriéndole un tanto incómodo pues apenas unos segundos después Tae dió la vuelta para encontrarlos a los tres.

— Oh, chicos ya han regresado - dijo sorprendido viendo a ambos un poco cerca y con sus miradas avergonzadas, sus ojos viajaron por los trajes de ambos que estaban mojados y solo sonrió medianamente al suponer lo que había pasado - Bueno yo me voy a la cama, ya, adiós Jin ya seguiremos buscando el collar que perdiste - se despidió del mayor y luego fue hasta Jimin para sonreírle y por último se acercó a Jungkook para dejar un beso en su mejilla, para luego irse a su habitación.

— Yo también me voy - dijo el pelinegro mirando a sus pies y dando la vuelta para despedirse de su jefe sin mirarle y solo agitando la mano de lado a lado antes de dar la vuelta por el pasillo.

Jungkook se quedó ahí parado mientras no sabía qué hacer, y como todos se iban.

— Bueno, yo también me voy, creo que tu noche ha sido buena así que no hace falta desearte lo - Dijo Jin con una sonrisa en sus labios siguiendo a Jimin.

Corrió hasta que lo alcanzó y sintió ternura al ver como se veía aún avergonzado, justo cuando iba a llegar a su habitación le hablo.

— Espera Jimin - le dijo acercándose hasta a él tratando de ver algo en sus ojos - ¿Algo malo pasó? - le dijo con preocupación fingida al ver como ponía su rostro en sopresa y totalmente avergonzado se rió - Los he visto, por eso tenía que hacer que se separan antes que Tae llegara, aunque creo que sí se ha dado cuenta

Jimin le miró con terror en sus ojos y tratando de negar, no sabía lo que le pasaba comúnmente no era así.

— No lo niegues Jimin, ve a dormir descansa y trata de pensar, mañana hablaremos te espero fuera a las ocho - dijo Jin antes de dar la vuelta y salir desapareciendo de la visión de Jimin.

Hola, hola ¿cómo están?, Espero que muy bien, espero que les guste la historia y que sigan comentando me gusta mucho leerlas.
Bueno no había podido actualizar por la universidad que estuve ocupada pero trataré de hacer lo mejor posible ya que,  ya casi termina.
Bueno bye y linda noche.