Benjamín - Controlate

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Benjamín

¿Hay algo mal en mí?, la veo con ese diminuto pijama y todos mis sentidos se alteran. La deseo, la deseo mucho, dormir en la misma habitación que ella me está volviendo loco. No puedo puedo aguantar más, voy a acabar con todo esto hoy, ya no quiero esconder lo que siento por ella, me importa una mierda que sea un taboo, o un pecado, ella tiene que ser mía, sólo mía.

-Ben, Grace vengan a comer- grita mamá.

-Ya vamos- respondemos ambos.

Llego primero a desayunar, me gusta cuando mamá nos prepará huevos con tocineta y pan tostado. Comienzo a comer y ce me saluda.

-Hola Ben- Ce es el apodo que le tengo desde pequeña y aunque me gusta llamarla así no se lo digo muy a menudo. Ni yo me entiendo ya.

-Hola Fastidiosa- le digo.

-Idiota- me dice y me saca la lengua, se sienta y comienza a comer. Bajo la mirada y reprimo un pequeño gemido. Como se le ocurre venir a desayunar con esa pijama, le puedo detallar todo el cuerpo. Que Dios me ayude. Tiene un piel hermosa, es de color blanco inmaculado, te hace querer tocarla. Tiene unas muy buenas piernas. Su cabello largo rubio semi liso cae como una cortina en su espalda. Sus Ojos de color verdes son hermosos. Su contextura es delgada con unos buenos pechos. Ay! Dios no tiene sujetador. Vamos Ben controlate, controlate. Ve otra cosa. Sólo puedo sentir como me voy poniendo duro, me tengo que ir, sino soy capaz de arrastrarla al cuarto y hacerla mía. Me levanto de la mesa y voy a ducharme para irme a la academia de baile.

-¿A dónde vas Benjamín? – pregunta mi mamá

-A la academia a practicar la coreografía para el evento de mañana.

 Entro al baño, abro la ducha y mientras el agua corre por mi cuerpo me pierdo en mis pensamientos.

Yo haría cualquier cosa por ella, lo que ella me pidiera. Yo la amo. Está chica tiene un encanto natural no se tiene que esforzar por ser linda. Ya lo es. Y también está está cosas que no sabes que es, es chistosa, simpática, inteligente, sencilla, sexy, le gustan los deportes, los videos juegos y es buena en ello, su personalidad es arrolladora, ama a los niños y ellos a ella, por donde pasa cualquiera la mira, es como la luz en medio de la oscuridad. ¿Qué más puedo pedir?

Ella es sexy sin saberlo. Es tierna e inexperta algo que yo no. Cierro la ducha, me pongo la toalla y me dirijo al cuarto, me visto lo más rápido posible y salgo.

-         ¿A qué hora vienes?- grita mamá.

-         No lo sé- digo

-         Bueno cuando vengas en camino me llamas para estar tranquila.

-         Ok está bien, bendición- cuando tengo mi bolso y todas mis cosas y me dirijo a la puerta, Grace me agarra del brazo.

-         Puedo ir contigo- mi corazón se puso a mil, pensé que me daría un ataque al corazón o algo así. Me intente controlar y me solté de su agarre bruscamente y dije:

-         No, no puedes ir. No quiero que vayas- me miro con tristeza y forzó un sonrisa.

-         Lo siento, no quería molestarte- Ahh soy un idiota, quiero tratarla bien, pero cuando está cerca reacciono muy mal. Es tan hermosa que duele verla, tan tierna.

 Cualquiera se puede aprovechar de ella. Si no fuera porque me he encargado de que ningún tipo se le acerque, diga algo, intente o respire cerca de ella. Estaría preocupado y muriendo de celos y la rabia. Ya sabes cómo es eso ¿no? Ves a la persona que te gusta con otra y te da de todo.

Danger (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora