Capítulo 284: Un hombre honorable como yo, no le teme a la muerte

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“Gracias, Hermano Mayor. ¡Muchas gracias! ¡Hermano Mayor!” Contestó Feng Xiaoling muy agradecido. En este momento estaba lleno de felicidad por la oportunidad que le estaba dando el Hermano Mayor Lin.

“Te lo he dicho. No me llames Hermano Mayor.” Lin Fan lo miró enojado.

“Cierto, cierto…” Feng Xiaoling asintió con su cabeza de forma obediente.

“Este Li Tianxing era un hombre que había cometido un crimen atroz en el pasado y fue recluido en la cárcel. Pero por alguna razón, el Gran Maestro de repente decidió dejarlo salir. Este hombre es extremadamente vicioso en su manera de actuar, y un hermano menor fue asesinado brutalmente porque no estaba de acuerdo con la manera en que Li Tianxing estaba tratando a las discípulas de la Secta Palacio Lunar. Y es también porque él es mucho más fuerte que nosotros, que los demás discípulos menores no se atrevieron a protestar después de eso”. Para empezar, Feng Xiaoling tenía que contar todos los crímenes de Li Tianxing, para que Lin Fan no siguiera malinterpretándolos.

“¡Así es! ¡Li Tianxing es simplemente demasiado despiadado! Nuestro Hermano Menor murió porque no quería aceptar esto”.

“¡Boohoo! Mi lamentable hermano menor tuvo una muerte tan trágica”.

“¡Sólo pudimos soportar en silencio la ira que había en nuestros corazones!”

“¡No fue por nuestra propia voluntad ni siquiera el destruir la Secta Palacio Lunar fue! ¡Pero no pudimos desobedecer las órdenes de arriba!”

Los discípulos de la Secta Jiuxiao comenzaron a quejarse de lo que había en sus inconformes corazones. Sus vidas ahora mismo no eran lo que querían.

“Hermano mayor Lin, la Secta Jiuxiao ha cambiado. Nuestro Gran Maestro también ha cambiado. En el pasado, la Secta Jiuxiao sí declaró la guerra contra otras sectas, pero sólo contra las sectas malvadas…” Feng Xiaoling movió su cabeza y suspiró. Él tampoco entendía por qué estaba pasando esto.

“Hmph, dices que la Secta Jiuxiao sólo lucha contra las sectas malvadas, ¿entonces por qué están empeñados en destruirnos? ¡La Secta Palacio Lunar se encuentra aislada de los asuntos mundanos!” Mu Han señaló a Feng Xiaoling con una mirada llena de furia en su cara.

Lin Fan levantó su mano, indicándole a Mu Han que guardara silencio.

Mirando las acciones de Lin Fan, Mu Han sólo podía permanecer de pie ahí enfurecida. Pero la mirada de odio hacia esos discípulos de la Secta Jiuxiao no cambió.

“¿Por qué mi hermano Xinfeng no está aquí?” preguntó Lin Fan.

Al escuchar esta pregunta, Feng Xiaoling se secó el costado de sus ojos, “Esta es una larga historia, Hermano Mayor Lin. Cuando el Gran Maestro reunió a los discípulos de la secta interna y dio la orden de atacar a la Secta Palacio Lunar, el Hermano Mayor Xinfeng y algunos otros Ancianos Mayores estuvieron rotundamente en contra de eso. Entonces, el Gran Maestro los encerró a todos por traición dentro de las cárceles. Con su destino desconocido, el resto de nosotros sólo pudimos obedecer las órdenes silenciosamente y con miedo…”

“Hermano mayor Lin, sin importar qué, yo, Feng Xiaoling soy un genio de la Secta Jiuxiao. Pero ahora mismo, mi vida dentro de la secta ni siquiera es comparable a la de esos discípulos malvados que una vez estuvieron recluidos en las cárceles….”. Feng Xiaoling no portaba la altiva elegancia de antes. Incluso ese abanico que siempre llevaba consigo para que se diera un poco de aire fresco ya no estaba con él.

“Muy bien, basta de hablar de ti. ¿Qué más pasó dentro de la secta?” Lin Fan hizo un gesto con sus manos. No le preocupaba las quejas de Feng Xiaoling, pero tenía la desagradable sensación de que algo serio había sucedido en la Secta Yuxiao.

The Strongest System [Volumen 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora