1-"Oh girls just want to have fun"

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AGOSTO 2023

Los rayos de sol iluminaban la habitación y las cortinas bailaban con la brisa que dejaba ese frio mañanero dentro. Hace tiempo que no volvía a este lugar que tenía tantos recuerdos de veranos que parecían fantasmas de otra vida, pero aquí estaba ella, en una cama de dos plazas entre sábanas blancas.

Era temprano en la mañana pero tarde para estar lista, quería ir a la playa a recolectar rocas, quería ir a los bares a beber hasta olvidar ese nombre que con traición su cabeza recordaba. Tenía todos esos planes para recargar energía mientras sus ojos todavía ni se abrían, y así de rápido cambiaba sus pensamientos, con los sentimientos a flor de piel apenas piso la casa, unas vacaciones de montaña rusa y la culpa no era de nadie más que suya por dejarse.

- Ser o no ser –retumba en su cabeza cada vez con más frecuencia

Lo primero que hizo fue asimilar que estaba aquí después de siglos de los siglos, en verdad no demasiado pero había pasado tanto drama de por medio que hacía todo más pesado, más rápido y tampoco era muy virtuosa como esa gente que recordaba toda su infancia. Pero en esta casa de playa vivió muchas cosas intensas y no estaba tan mal para lo poco que la usaba o para lo que esperaba, había pasado ya tiempo desde la última vez que estuvo aquí y creyó jamás poder volver ¿Por qué? Es sentimental cada rincón guardaba un momento, puro masoquismo. La última vez, estaban preocupados por no manchar de vino las sabanas pero en estos momentos solo quedaba vino y unas ganas tontas de pensar en cosas que no deberían estar ya en su cabeza. La vida había dado tantas vueltas que aquí estaba otra vez y le gustaría decir que vino para redescubrirse pero este viaje fue de lo más improvisado y en el fondo no está muy segura de su supervivencia.

- Las chicas solo quieren divertirse –tenía una cita con sus amigas que no ve desde fin de año- ¿Quién necesita enamorarse? –tenía un corazón casi desgastado- Soy de mis chicas y ellas mías.

Puso su mejor conjunto, estaba explosiva y claro que sabía todo lo que provocaba... le encantaba.

- Voy a llegar tarde, pero estaré.

Últimamente hacia cosas que no antes, llegadas tardías a encuentros, estar en piyama encerrada sus días libres o pasar una racha donde salía como sí no existiera un mañana. Su vida de artista pintaba una fantasía pero a la larga fue agotador cumplir las exigencias de la industria, pasar de ser una favorita a una del montón golpeo, pero lo vivido durante todos estos años, merecía este descanso. A veces se preguntaba si él también cambio manías, de vez en cuando entraba en las redes solo para saber de su vida, así tan rastrera miraba que era una vida sin ella buscando una pista de haber dejado marca. Decía odiarlo pero compro todos sus discos por dos, en caso de romperlos o perderlos, también recibió uno de ellos todo y con dedicación pero él nunca apareció, aun sabiendo su dirección.

Esta semana era para divertirse, hace unos meses terminaba una relación con un amigo de su amigo, un intento por llenar su corazón ¿Dónde estaba la intensidad? Cada vez que parecía encontrar al indicado escuchaba sus canciones queriendo o no queriendo saboteaba todo intento. Era momento de hacer nuevos recuerdos en este lugar imposible de olvidar y dejar en paz al pasado, enterrar sus rastros.

Una hora de retraso, ni tan mal.

- Samantha! –dijo Alba, la última vez pelirroja hoy pelirosa- te tardas una eternidad para todo.

- Cabrona de mi –y casi lloraron mientras se fundían en un abrazo – oye estas preciosa casi ni te reconozco

- Bueno si nos viéramos más seguido –dice con un retintín en la voz.

- OYE.

- Pero mira a quien tenemos aquí –se escucha desde lejos- no es más que Sammy G la mejor DJ.

- María –es igual a una escena de Barbie y la plebeya, como gusta un buen espectáculo- estoy muy feliz de este reencuentro –no quería ni pensar cómo iba poder no llorar lo que resta del verano- las necesitaba.

- Ay Sam –Alba no duda en sumarse al abrazo- pero si no has cambiado nada.

- Si ustedes supieran chicas –no importaba el tiempo ni el lugar con ellas siempre se desconectaba y era precioso- las quiero mucho.

- Mira Sam podemos estar aquí pegadas las tres todo el día pero dentro tenemos comida y bebidas y no te olvides de todos esos planes -asiente, las libera del abrazo pero no sin antes darles un fuerte beso en la frente- mis niñas.

Lo último que recuerda es una resaca horrible que las mantuvo encerrada en la casita, por lo que, la tarde-noche fue festiva entre anécdotas fuera de contexto, malos ligues en bares de bajo presupuesto, planes de boda y despedida de soltera, la vida pasaba tan rápido frente a sus narices pero se sentía ausente ¿Dónde? Encerrada llorando por fantasmas.

- Fue tan bonito... tan romántico –decía Alba, contando por enésima vez como su chico le había pedido matrimonio - lo amo tanto –se mordía el labio- estoy muy feliz de que se tomaran el tiempo de venir aquí para mi boda, sé que es una locura pero siempre nos gustó ser extravagantes y esta isla tiene tantos momentos nuestros –suspiraron todas- muero por que llegue el día.

- Que si Alba pero ya no piensen en el cuándo estas con nosotras –ríe María.

- ¿Cuándo viene él? –el hombre que robo su corazón y que hace sus ojitos brillar.

- Mañana -su cuerpo parece no resistir el asunto, la risa se le escapa por segundo, Alba ya no es Alba.

- Bueno esta noche hasta que el pesado de Ricardo aparezca –dice María, a lo que se gana un codazo por parte de la novia- esta noche es nuestra, corrijo, todas las noches hasta el gran día, así que ni se te ocurra ser una agua fiestas.

- Pero que vas a decir tu María, si eres la siguiente –a lo que recibe un almohadazo.

Entre risas, algo fuera de control con más de dos botellas de sidra vacías pasa el día. Alba mostró su vestido de novia, contó sobre la familia de su novio, lo nervioso que este estaba y también ella, incluso los planes de su futuro. Y todas estaban con una sonrisa, con el corazón calentito por estar incluidas en ese futuro y peleando por ser madrinas de un bebe que no existe, la manía que tenemos con ilusionarnos, estaban ebrias pero ebrias felices, ninguna sabía lo que se venía.

SAL DE MIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora