El Hotel

CAPÍTULO 4

CAPITULO 4 

 Asesinato II

-Por favor, permanezcan cerca de todos, y no solos, así si pasa algo podremos saber quien se ha alejado, y recuerden cerrar bien y poner protección en todas las puertas de sus dormitorios, durante la estancia.

Eran las diez de la mañana, del día siguiente, Elton estaba llamando a cada una de las puertas para que fuesen despertando, mientras Bruce se ocupaba de ver que todos salían. Como era de esperar y nada raro dada la situación, la señorita Alice estaba dando problemas, estaba metida en la ducha y no podía salir de aquellas maneras, todo el grupo, incluido cada uno de los trabajadores, como por ejemplo Barnaby, estaban esperando en la puerta, pero tras permanecer diez minutos en la puerta, decidieron irse al desayuno, menos Barnaby y su mujer, los cuales no tenían permiso para desayunar hasta acabar las habitaciones. –Bien yo comenzaré por esta misma de aquí, dice Barnaby.-Pero cariño mio, esa es la de Alice, vas a tener que esperar mucho.-No te preocupes, por eso mismo no quiero hacerte esperar a ti, dice de nuevo Barnaby con una sonrisa en la cara.

-Bueno pues ¿Qué deciden hacer ahora? Pregunta Darell.-No, porfavor, he pagado para disfrutar de mi descanso y mi paz, no para ser seguida de un montón de alimañas, dice Bronwen.-Exacto, necesito estar en mi despacho y no quiero a gente observando, dice Archie.-Y yo y mi marido necesitamos estar con Darell en cocina para limpiar y organizar.-Muy bien pues dejemos libertad pero Bruce y yo, como policías ocupados en el caso, vamos a estar vigilando.-Un momento, antes...Debemos saber que estamos todos.-¿Dónde está Alice? Pregunta Bruce. –no lo sé...-¿Quién es el último que la ha visto?- Barnaby.....-Si, pero yo no he hecho nada, dice bajando la cabeza.-Brooks nos ha dicho que estabas aun limpiando su habitación, solo has podido ser tú, dice Elton. -Que ganas de culpar señor Elton, dice Brooks.

Los días pasaron aparentemente normales, todo seguía su curso, y Archie se ocupó de que desgraciadamente se borrasen los anuncios del hotel, para que nadie quisiese alojarse, que dada la situación era algo raro, la suerte es que nadie aún se había enterado.

Tampoco se pasaba mal en cuanto a la estancia, pues la limpieza y la comida seguía siendo fantástica, y era alegre pensar que no comían solos en cada mesa, si no, después de la unión debido a la investigación, habían salido hasta amistades. Lo triste, que seguía presente el asesinato de Hurrigan y aunque se tenían hipótesis, nadie sabía en realidad quien podía ser. Alice seguía sin aparecer pasados ya tres días.

-Bueno, siento comunicarles que, tras la desaparición de Alice no hemos encontrado su cuerpo, y que desgraciadamente, todos estuvimos juntos excepto la parejita de limpiadores, desgraciadamente son ustedes los culpables, dice Elton.- No tiene pruebas, fácilmente podrías ser tú, y estar fingiendo que nos ayudas, y haber preparado todo para que esto encaje y culparnos a nosotros, en resumen, lavarte las manos del tema, dice Barnaby. –Además, no habéis encontrado el cuerpo, ha podido escapar, no recuerdan que ella quería irse, argumenta Brooks.

Y, así fue, a la mañana siguiente Alice apareció a la hora del desayuno. Todos se amontonaron a su alrededor para saber adonde había ido y porque había vuelto. –Bueno, tuve que ir a mi casa un tiempo, mi padre estaba algo enfermo y los cultivos no estaban siendo cuidados porque él, tenía que permanecer en cama, pero mi hermana ya está de vuelta en mi casa así que he podido volver, explica Alice.- ¿Por qué has vuelto, si querías irte? Dice Elton con expresión rara.-Pues porque soy respetuosa y usted me dijo que no podía salir, y he vuelto, no se preocupen, no he contado nada.

-No sé, Bronwen, dice Camyl, todo esto me parece muy extraño, ¿Por qué ha vuelto?, será muy respetuosa pero quería irse, y después de conseguirlo, ha vuelto.

Pasó todo ese día con total normalidad, Bronwen y su nueva amiga Camyl querrían haber salido a hacer turismo, pero desgraciadamente Elton no las dejó salir del complejo, así que ellas y todos los demás, se tuvieron que conformar con las actividades del local.

-Bruce vayamos a buscar la manera de la que Alice salió de aquí, dice Elton.-Si necesitas ayuda, yo te ayudaré pero sinceramente es algo tan simple como coger el autobús.-Bruce, ningún autobús a pasado por aquí estos días, hemos pasado vigilando a los demás todos estos días y no la hemos visto llegar, y por las noches hemos hecho guardia.

Después de caminar alrededor del complejo y no encontrar nada aparente se les ocurrió a los dos policías ir al parking a ver si había algún nuevo coche. –Elton, no hay nada, está el lujoso coche de Archie, mi coche, el de Darell y Bronwen.-¿Y si alguno de ellos la prestó el coche...?-No sé Elton,¿Por qué tiene que haber tanto misterio? Quizá alguien le dejo el coche para lo que nos dijo pero no signifique nada. –Un momento Bruce, ¿Has visto esto? Dice Elton señalando una pequeña puerta en el suelo situada en una esquina del parking.-¿Qué es eso? Pregunta Bruce.-No lo sé, voy a abrirlo...-Espera Elton, no lo abras así directamente, si alguien ve tus huellas, pensaran que....Has sido tú.-Me da igual, recuerda que nosotros somos los policías, se ríe Elton, ¿Quién va a ver las huellas si no somos nosotros?-Tienes razón, pues adelante, dice Bruce. Antes de pasar Elton y Bruce miran alrededor para asegurarse que todo está en orden, y así efectivamente era, Bronwen y Camyl, estaban en la piscina, Brooks subía a su habitación, Darell no estaba, debía estar preparando una merienda, Alice no estaba pero de repente salió de la cocina de Darell y se dirigió a la playa donde estaba Barnaby que estaba en la arena mientras que Archie estaba en el jazzcusi.

Los dos policías encuentran unas escaleras que llevan para abajo, como un subsuelo que llevaría a un sótano, pero solo se encuentran un pasillo oscuro con una puerta cerrada con llave.-¿Cómo vamos a pasar ahora, Elton? Dice Bruce.-Encontrando la llave.

Al salir de nuevo, pues ya no podían hacer más hasta encontrar la llave, volvieron a mirar alrededor y la situación había cambiado mucho. Bronwen y Camyl se dirigían a la cocina (donde seguramente estaría Darell) Archie subía a su despacho o alguna habitación, Barnaby seguía tomando el sol con unas gafas incluidas y Alice se había metido en el jacuzzi.

-Como sé que estamos todos muy ajetreados y que seguramente tendréis mucho que contaros, Alice nos ha traído gustosamente unas manzanas para que Bronwen con ayuda de Camyl nos preparase sus magdalenas más especiales, las espuma de manzana, así que espero que las disfrutéis, dice Darell. –Gracias, pero creo que no deberíamos comer nada que no sepamos que está preparado bien y no está malo, dice Barnaby.-No seas corta rollos, y disfruta, dice Brooks que sin pensárselo junto a los demás coge la magdalena con su nombre (y es que cada magdalena tenía el nombre de cada uno) , y efectivamente estaba exquisita. - No me queda otra, dice Barnaby mirando a su alrededor y fijando la vista en Alice.-Además ha sido todo un detalle que Alice seleccionase las mejores manzanas para cada uno, la más chiquitita para Brooks, la más chiquitita del hotel, la más verdosa para Barnaby, la más grande para Archie y así con todos, en general, todo un detalle.

Eran altas horas de la noche cuando un profundo grito de dolor proveniente de la habitación de Barnaby despierta y alerta a todos los presentes. -¿Qué ocurre? Pregunta Alice con una sonrisa extraña. –Llamar a un médico enseguida, se trata de Brooks. Camyl y Bronwen aparecen rápidamente en la habitación 04.

Después de examinar a Brooks y de que Darell ofreciese algo de bebida, tuvieron la horrible noticia de que Brooks estaba muerta, aparentemente sin signos de violencia.