La Doña 2 - ¿Leogracia?❣️

Estoy abrazando a mi hijo...

Altagracia fue despertando y se encontró con León abrazado a su cintura, y recostado de su pequeño vientre que aún no tenía forma de embarazo.

Lo miró con ternura, intento despertarlo, pero él se aferró más a su cuerpo. Poco a poco fue abriendo los ojos...

A- Pensé que te habías ido, que estabas molesto conmigo...

L- Hace un rato te dije que no los dejaré nunca. Y si, estoy molesto...

A- Y por qué me abrazas?

L- Aahm, bueno, estoy abrazando a mi hijo.

A- Ah si, claro. Por cierto será una niña, estoy segura (dijo eso recordando el momento en el que Mónica le habló de una hermanita).

L- Como lo sabes? (Con cara de intriga)

A- Yo lo sé todo.. además, vi a mi hija, a Mónica, parecía un sueño. Me dijo que luchara por mi felicidad, por nuestra hija, y por ti.

L- Como? Soñaste con Mónica?

A- Si, la vi.. (con la voz entrecortada)

L- Entonces tendremos una niña... (con cara de emoción)

A- Si, y lo único que te pido, es que no te vayas, entiéndeme. He perdido tanto en mi vida, que perderte a ti. Sería un golpe que no quiero ni estoy dispuesta a soportar León, sino quieres estar conmigo, lo entenderé, aunque me duela en el alma, pero no te alejes de nuestra hija...

León la miró y se recostó en su vientre de nuevo, les habló a las dos...

L- Tú mamá y yo, estamos muy felices de tenerte aquí creciendo dentro de ella... no soy la mejor persona, pero tú mamá, ella es la más maravillosa, y yo jamás me alejaré de ella, sabes por qué bebé? (En susurro: porque la amo)
Y amo cada parte de nuestra historia, incluso la que aún no hemos escrito, porque sé, que será siempre juntos...
Tú mamá es algo difícil mi amor, así que me vas ayudar a estos meses no hacérselos tan complicados, prometo cumplir sus antojos y todo. Pero ayúdame para que no sea tan impulsiva, y a partir de hoy, NADIE SE LE ACERCARÁ A MAMÁ, a menos que sea papá. (Altagracia lo miraba con ternura y le causaba mucha gracia los celos de León, sabía muy bien que se refería a Amado, y eso le asustaba)

A- Yo no quiero que nadie que no seas tú se acerque a mi... Te amo León.

Él se sube encima de ella y comienza a besarle el cuello, ella suspira y solo le dice, quiero ser siempre tuya. De nadie más mi amor...

Comenzaron una guerra de besos, Altagracia amaba ser dulce y tierna con León, pero hoy, lo necesitaba, quizás las hormonas la tenían un poco alterada. Le quitó el camisón a León y como pudo se sentó encima de él, poco a poco cada prenda fue desapareciendo. León entró en ella de una manera suave, pero ella tomó el control... y así, pasaron casi toda la noche...

León dió un casto beso en los labios de su mujer... de su amor.

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¿Podrán ellos estar siempre juntos?

¿Amado será un obstáculo o ayudará a Altagracia para lo que viene sin esperar algo a cambio?

¿Ustedes qué opinan?