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Pasaron más semanas, ni Jotaro o Kakyoin lograban algo más íntimo, el pelinegro ya se había cansado de esta situación, por lo cuál decidió ir a un motel con Kakyoin, obviamente después de una pequeña cita y gritarle a Josuke que no lo llamara hasta el día siguiente, así no tendrían ni un solo contratiempo.

- Sabes siento cierta tensión entre los dos, Noriaki - Jotaro se sonrojó, no sabía coquetear.

- Yo también pienso algo así - rió y sostuvo su mano, ambos caminaban felices de la mano.

- Oye se que debe ser algo apresurado pero.. - Jotaro se llevó a Kakyoin por otro callejón - Tengo ganas de.. ya sabes.. contigo, sin interrupciones, claro, si tu quieres -

- Oh.. Te has vuelto algo más directo, Jojo - se sonrojó y acomodó sus lentes un par de veces, pensado en que diría - Creo que esta bien.. Algo de privacidad no nos vendría mal - Agarró su mano.

Ambos adultos fueron al motel, pidieron un cuarto y entraron, se veía cómodo, la cama era grande, habían muebles en todos lados y una piscina pequeña en la otra esquina de aquella habitación.

- Es mejor de lo que imaginé - Kakyoin se sentó en uno de los sofás.

- También pienso lo mismo - Jotaro agarro una botella de vino y sirvió dos copas - ¿Vas a tomar? -

- Solo por hoy nada más, no tolero tanto el alcohol - tomó de la copa.

Era cosa de minutos que Kakyoin se encontrara totalmente ebrio y solo con dos copas de vino, Jotaro aun seguía sobrio y de cierto modo disfrutaba de la actitud de su acompañante.

Jotaro lo tomó torpemente del brazo y lo tiró a la cama, se posicionó encima de él y sonrió.

Kakyoin acarició la mejilla del contrario y lo besó con algo de rudeza.

- ¿Eso es todo lo que tienes Jojo? - lo miró retandolo y sonriendo.

- ¿Quieres que sea rudo contigo también, Noriaki? - sonrío y lo besó, ahora las fuerte, con pasión.

Los cuerpos de ambos volvían a moverse se manera sincronizada, ya estaban sudando.

Jotaro se quitó la camisa, Kakyoin al mirarlo se quedó sin palabras, sabía que el era musculoso, pero no tan exagerado, ahora temía más por sus caderas que cuando casi lo mata Dio.
Los brazos de Jotaro era exageradamente musculosos y bastante marcados, sus manos eran jodidamente enormes y para que hablar de todo su torso, era perfecto, todo era armónico en su cuerpo a pesar se ser literalmente un gigante de 1,90

- ¿Pasa algo? - estaba confundido.

- No, todo está bien... Solo te veía - se sonrojó más de lo que estaba.

El pelirrojo acarició todo el torso del contrario, el tacto con su piel se sentía fantástico, se mordió el labio y sonrió levemente.

El pelinegro se abalanzó sobre el y mordió su cuello, acariciaba su cintura y piernas, estaba comenzando a excitarse, no se había sentido así ni siquiera con su ex esposa.

Besó sus labios, bajo a su cuello y delicadamente le quitaba la ropa, Kakyoin solo se dejaba llevar por el momento.

Jotaro acarició su trasero, estaba algo nervioso, no quería lastimarlo, no sería con culpa, pero se sentiría mal si Kakyoin no lo disfrutaba.

- ¿Esta bien si lo hago? - preguntó nervioso.

- No nos podemos hechar para atrás en ese momento - sonreía.

- Sere lo más cuidadoso posible, te lo prometo, Noriaki - besó su mejilla.

Tomó ambas piernas del contrario y las besó, pues eran las partes más delicadas de su cuerpo.
Acomodó su miembro en la entrada del pelirrojo, la respiración de ambos estaba agitada, aún así, Jotaro, se adentró suavemente en el cuerpo de su ahora pareja.

- A-ahg.. - Kakyoin se agarró fuertemente de las sábanas y arqueo la espalda.

- Lo siento, fui muy duro? - Jotaro le miró preocupado.

- S-solo debo a-acostumbrarme - jadeó y movió su cuerpo.

Al rato el pelirrojo le dio permiso para seguir al contrario, sus embestidas eran suaves, con cariño, de vez en cuando le daba besos en el cuello a Kakyoin.

Poco a poco iba subiendo la velocidad e intensidad de sus estocadas, sostenía a su pareja de la cintura, era tan delgada que pensaba que literalmente lo podría romper en cualquier momento, era considerable la diferencia del tamaño corporal de ambos.

Besaba su nuca en lo que seguía embistiendolo, Kakyoin gemía su nombre cada vez más alto, Jotaro bajó su mirada, dándose cuenta de todas las veces que se vino el pelirrojo, sonrio orgulloso, a lo mejor los dos la estaban pasando igual de bien.

Estaba porfin llegando al clímax, un par de estocadas más y Jotaro se vino dentro de Kakyoin, soltando un último gruñido y respirando agitado.

Se acostó a su lado, estaba feliz de haber avanzado con su compañero, aún no sabía si llamarlo su pareja formalmente, no creía que ese fuera el momento adecuado para preguntarle, lo mejor sería esperar hasta el día siguiente.

Kakyoin se acurruco en el pecho del mayor, sonrío suavemente, pasaba uno de sus dedos por el pecho del contrario, delineando su contorno cariñosamente, Jotaro lo abrazó con un brazo y besó su frente, ambos sonreían, a lo mejor un amor ahora si de verdad brotaba en ellos.

🍒⭐🍒⭐🍒⭐🍒

Lol, porfin actualice jsjs
Perdón por la demora(?) Tipo, me metí más en mis historias Bruabba (leanlas plox) y me olvidé de esta xd jsjsjs

Quería escribir lemon, cosa que no hago hace un buen tiempo 🤔 pero lo intenté uwu y espero mejorar.

-SaikoSensei_

- 🍒Cherry Star! 🍒- JotaKak DESCONTINUADO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora