Poché pov
- Mi vida ¿puedes pasar la limonada? Ya Vale pasa los platos - escuché el grito de mi papá desde la habitación y de inmediato me paré para dirigirme a la cocina
- ¿Necesitas que te ayude en algo más? - dije dejando la jarra de limonada sobre la mesa y acercándome a la estufa en donde mi papá terminaba de preparar la cena
- No amor, ya solo me falta servir - giró su rostro para verme - ¿A qué hora llamarás a Dani? en dos minutos no sentamos a comer - habló para que me apurara en llamar a mi novia
Volví a mi cuarto en busca de mi celular para hacer Facetime con Calle. Después de haberle comentado la idea que mi papá quería tener, solo nos faltó cuadrar el día en que todos tendríamos tiempo libre y fue más rápido de lo que pensamos.
No respondió así que le envié un mensaje preguntándole si ya estaba lista, no recibí una respuesta escrita, en su lugar, mi teléfono se alumbraba con una llamada entrante de su parte- ¿Por qué no me contestaste? - musité apenas su rostro apareció en cámara
- Hola a ti también - fingió una sonrisa la cual me hizo reír - Cosita, estaba sirviendo la cena y arreglando la mesa, lo siento - habló enfocando el lugar en donde se iba sentar a comer
- Te la paso - traté de sonar seria - Estás muy linda hoy - fallé en el intento
- Debo decir lo mismo - me regaló un guiñó, en se momento escuché la voz de Vale diciendo que nos estaban esperando
Al volver a la sala, acomodé el celular en un florero que adornaba nuestro comedor, haciendo así que mi papá, Vale y yo, quedaramos en el enfoque de la cámara
- ¡Hola Dani! - mi papá no ocultaba su emoción - Qué gusto verte ¿cómo estás? - sonrió esperando que la morena contestara
- Juan Carlos, me alegra estar hablando con ustedes - río y pude notar que estaba nerviosa, lo que me provocó ternura - Estoy muy bien y ustedes qué tal? Cómo va todo? - la conversación típica formal estaba fluyendo bastante bien, yo solo hablaba para afirmar o negar las pequeñas bobadas que salían de la boca de mi hermana
- Mi hermana está a punto se treparse por las paredes - no podía creer lo que acababa de decir, delante de mi papá, el cual obviamente no entendió lo que hizo que Dani y yo nos sintiéramos aun más incómodas
- Valentina, por Dios, cállate - golpeé su cabeza con una fuerte palmada, la pequeña no podía con el ataque de risa
- A ver, explícame a qué te refieres con que tu hermana está a punto de hacer eso - papá acomodó su silla para quedar frente a ella, la carcajada de Calle no se hizo esperar y ahora éramos nosotras dos las que nos buscábamos de ella
- Ay no papi, olvida que dije eso - se hundió en su sitio sin saber qué más decir
Luego de unos minutos en los que Dani le comentaba a mi papá cómo iba su vida en la universidad y él le contaba algunos detalles sobre su trabajo, me paré para ir al baño un momento, al volver los tres me miraban con mucha expectativa lo que me hizo sentir un poco extraña
- ¿Todo bien? - hablé sentándome de nuevo
- Te esperábamos, tu papá quiere contarnos algo que tiene preparado - en ese momento él se paró y fue a su habitación para regresar con un sobre en su mano y dejarlo justo a un lado de la mesa
- Niñas, como ya saben en mi trabajo vivo más en otras ciudades que en mi propia casa, y ya hace algún tiempo que no he salido de aquí - Valentina no entendía nada así que se levantó y decidió llevar los platos para lavarlos - Estaba esperando hace casi un mes que me confirmaran este viaje porque apenas supe de su posibilidad, a mi mente llegó una idea que creo nos hará feliz a todos - acercó el sobre frente a mí - Sé cuánto se quieren y cuánto se echan de menos - miré a Dani y estaba igual de perdida que yo - Ábrelo
Lo tomé entre mis manos sin saber muy bien qué esperar
- No - fue lo primero que salió de mi boca apenas identifiqué que se trataba de un tiquete de avión con destino a Bogotá, me lancé encima de mi papá para poder abrazarlo con todas las fuerzas que tenía - Te amo, te amo, te amo - repetía en voz alta
- Cuéntale a ella que no está entendiendo nada - reía por mi reacción
- Amor te voy a ver - su rostro de confusión se hizo notar - ¡En dos semanas! - acerqué los boletos para que ella pudiera leerlos
- Debo ir a cerrar un negocio en Bogotá, llego el jueves y me regreso el lunes, sé que es un poco corto el viaje pero pensé en que sería una bonita sorpresa para ambas - nos explicó lo que él tenía pensado para ese fin de semana y en realidad no era mucho; nosotros llegábamos a Bogotá y Dani estaría esperando por nosotros allí
- Terminen de hablar y cuadrar sus cosas, yo debo mirar con quién se quedará tu hermana
- Por mí no te preocupes, le acabo de enviar un mensaje a Andrea diciéndole que me adopte ese fin de semana - gritó desde su cuarto
Una vez quedé sola con Dani la otro lado del teléfono, le dije
- Siendo sincera - bajé el volumen un poco - Sí estoy que me trepo por las paredes - empecé a reír al ver su cara
- Amor, cállate, estaremos todo el tiempo con tu papá - era cierto, pero no era un impedimento
- Tú déjame eso a mí -
- Te amo millones Poché, soy muy feliz contigo - aquello llenó por completo mi corazón y ella lo sabía
- También me haces muy feliz amor, y te amo el doble, nos vemos en 15 días - dije haciendo el signo de promesa frente a la cámara
- Nos vemos en 15 días - imitó mi acción
Lo siento por la demora, ya todo vuelve a la normalidad. Ahora sí, nos leemos pronto.
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¿Segura? - Calle Y Poché |PAUSADA|
Подростковая литератураLa amistad de Calle y Poché se vivía a distancia. Daniela vivía en Medellín, Colombia y María José se encontraba ubicada en la ciudad de Buenos Aires, Argentina. Poché planea un viaje a Colombia con algunos de sus amigos para poder visitar a Calle...